El trasegar de los humanos por el planeta, está lleno de vicisitudes. El camino no es precisamente un sendero de rosas, pero muchas de las veces, los humanos nos las sabemos complicar, pues luego de dar algunos pasos hacia adelante, salimos con las sorpresas de desandar los pasos y perder así el tiempo y la experiencia invertidos y adquiridos, en el entendido que cada cual, ve la realidad y se aproxima a ella, de acuerdo con sus intereses. Por lo tanto, los comentarios y reflexiones que vamos a plantear son obviamente, subjetivos.Después de varios decenios de ser declarada como Museo y además Patrimonio de la Humanidad, y después de haber sido aceptadas estas condiciones por todas las religiones interesadas, el controvertido gobierno turco de Erdogan, declara que Santa Sofía (Aya Sofya) en Estambul, vuelve a ser mezquita después de 86 años, volviendo a alborotar el avispero de los fanáticos de todas las religiones, fanatismo que siempre ha estado ahí y que no requiere sino de una buena excusa para explotar. La buena excusa está servida. ¡Amanecerá y veremos!En lo local, la nueva Constitución Política abrió la posibilidad de la dosis mínima de consumo de marihuana, el actual gobierno la frena a través del nuevo Código de Policía y hoy los altos tribunales vuelven a aceptarla. ¡Qué pérdida de tiempo y qué falta de sindéresis!Se anuncia por parte de EPM que su planta piloto Jepírachi en la Guajira, funcionará hasta el 2023, noticia, que nos deja apesadumbrados, ya que la energía eólica es una de las mejores alternativas para la producción de energía limpia. Razones técnicas y financieras debe tener EPM para tomar esta decisión que esperamos sea compensada con el montaje de un nuevo campo eólico ya no como piloto, si no como planta de producción de energía limpia en propiedad.Como periódicamente sucede, el actual contralor general de la Nación recorre el país “descubriendo” elefantes blancos, es decir, obras inconclusas que están ahí, a los ojos de todo el mundo, sin que hasta el presente se hayan tomado las medidas y las acciones necesarias para culminarlas, que sería lo obvio, o para tumbarlas.Debería existir un punto dentro de un Plan de Desarrollo serio, para destinar los recursos necesarios para que este tema sea resuelto y obviamente los responsables asuman las responsabilidades de todo orden que les competan. No es suficiente la alharaca mediática, si no se toman las decisiones apropiadas y oportunas dentro de la extemporaneidad.Un ir y venir de discursos se pronuncian por kilómetros, alrededor del problema de la deforestación y de los programas de reforestación. Lo cierto es que a la fecha no hay un control efectivo contra la deforestación generada por parte de cualquiera de los varios actores involucrados que la provocan, como tampoco un proyecto serio y continuado para recuperar y ampliar la extensión forestal en el país.Ojalá aprovechemos la nueva producción de nuestro grande Carlos Vives, CUMBIANA, para volver los ojos hacia la Ciénaga Grande de Santa Marta y hacer lo que haya que hacer para intervenir las infraestructuras viales mal diseñadas y volver a permitir mediante obras apropiadas, la circulación de las aguas del mar y del Magdalena para que renazcan los manglares y reviva ese maravilloso ecosistema destruido por imbéciles.Por último, ya aparecen las pilatunas legales para evitar o demorar la demolición del Edificio Aquarela construido cerca al Castillo de San Felipe en Cartagena, el cual no debió haber recibido nunca licencia de construcción, entregada en su momento por otros imbéciles. Ya la UNESCO dio como plazo hasta el 2021 para que la construcción sea demolida, o sino Cartagena y Colombia perderán la calidad de Patrimonio de la Humanidad que hoy posee el Castillo de San Felipe.Excelente el programa que ha emprendido la Alcaldía de Medellín para aprovechar estos nuevos días de cuarentena para intervenir zonas en estado de deterioro y recuperar el espacio público que se había perdido. Las acciones inicialmente emprendidas en los sectores de La Bayadera y el Sagrado Corazón o Barrio Triste, son ejemplarizantes y deben servir de estímulo y de ejemplo para intervenir otras zonas en franco deterioro. ¡BRAVO!Como una cosa es planear y otra planificar, y otra cosa es no planear y no planificar, es prudente que aquellas construcciones de vivienda subsidiada que se entregan en obra negra después de muchos trámites y una alta dosis de paciencia por parte de los beneficiados, -que en la mayoría de los casos se originan por una tragedia previa como un derrumbe, una inundación, un incendio, un temblor u otra calamidad-, sean dotados de los servicios públicos elementales, entre ellos, ya no como cosa marginal, sino estructural, la conexión a INTERNET. Pongo como ejemplo la urbanización La Cabañita en San Cristóbal, una Unidad de 9 bloques de 6 pisos ocupada recientemente por sus nuevos dueños, un poco más de 50 familias cuyos niños no tendrán como acceder a la educación virtual forzada, a la cual nos tiene sometida la bendita pandemia.NOTA 1: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.NOTA 2: Mis agradecimientos a la casa EL MUNDO por haberme permitido comunicarme con ustedes a través de las 900 columnas que ajustamos hoy y que coinciden con la suspensión de actividades para el Periódico y mil gracias a ustedes por tomarse el tiempo para leer esta Columna de Opinión.Es un golpe duro para el fortalecimiento democrático y para el ejercicio de la pluralidad y la tolerancia, pero esta es la realidad que nos corresponde enfrentar, en un país como el nuestro. Una última invitación, a que vayamos siempre, con prudente optimismo, ¡DE CARA AL PORVENIR!
La realidad actual se caracteriza por la presencia e interacción de 4 grandes variables entrópicas: este es un mundo VOLÁTIL, donde los cambios son veloces, las dinámicas inestables, todo es impermanente y los ciclos son cortos. Un mundo INCIERTO, lleno de situaciones imprevistas, con resultados inesperados y con múltiples factores influyendo de manera concurrente. En este momento histórico, la AMBIGÜEDAD es generada por la aparición de múltiples interpretaciones de todo, la emergencia de nuevas teorías y modelos para tratar de explicar el mundo. Todo esto lleva a la COMPEJIDAD, donde los problemas adquieren multidimensionalidad, donde existe un exceso de información y donde se establecen múltiples relaciones asociadas a los desarrollos y a la popularización de ciertos avances tecnológicos.Lea también: Grandes acontecimientosLos antiguos griegos, para Occidente, trataban de entender el comportamiento de los humanos, y entonces aparece la lógica, que deviene en la Filosofía y además trataban de encontrar la explicación a los fenómenos naturales y entonces, aparece la razón, y respaldadas en ésta, todas las demás ciencias.Se hablaba en su momento de la armonía existente entre la música y el funcionamiento del Cosmos. Además, se hablaba también del Quadrivium, siguiendo el modelo de la filosofía natural, o sea la relación total entre la aritmética, la geometría, la astronomía y la poesía. San Agustín y Boecio incorporarían posteriormente a la música.La propia Filosofía da origen a la Antropología, la Epistemología, la Lógica, la Ética, la Estética y la Política.Aparecen los Géneros Literarios: La Épica, la Lírica y el Teatro, y las Musas acompañan a las diferentes expresiones artísticas, así:Calíope era la Musa de la elocuencia, la belleza y la poesía épica. Clío era la Musa de la historia. Erato era la Musa de la poesía lírica. Euterpe era la Musa de la música. Melpómene era la Musa de la tragedia. Polimnia era la Musa de los cantos sagrados y la poesía sacra. Terpsícore era la Musa de la danza y la poesía coral. Talía era la Musa de la comedia y la poesía bucólica, y Urania era la Musa de la astronomía, la poesía didáctica y las ciencias exactas.Hoy por hoy, se habla de las Ciencias Formales: Las matemáticas y la lógica. De las Ciencias Naturales: La física, la astronomía, la geología la química y la biología. De las Ciencias Humanas: La medicina, la sociología, la política, la arqueología, la economía y la antropología.Sin embargo, ninguna de estas ciencias es capaz de explicar completamente al universo por sí misma. Es por eso que, hoy, se impone la multidisciplinariedad y se hace necesario que los humanos, con humildad, reconozcamos al unísono con el gran pensador, que “Solo sé que nada sé”. Cada que se abre una nueva ventanita de conocimiento, nos deja ver la aparición de un nuevo universo de posibilidades.Mente abierta, disposición al cambio y a la adaptación, tolerancia, grandeza de espíritu y humildad de conocimiento, son ingredientes que requerimos hoy para poder medio sobrevivir en este valle de lágrimas.Capítulo aparte merecen la espiritualidad en todas sus formas y las expresiones de Fe. No ha sido posible y no hay necesidad de tratar de juntar el agua y el aceite. Así mismo, no es necesario tratar de juntar o de comparar a la Razón y a la Fe, pues cada una maneja sus propias lógicas.Le puede interesar: Pasa el tiempoRetomando el Evangelio, recordemos las palabras de Jesucristo a sus discípulos: “Sed mansos como palomas y astutos como serpientes”.NOTA: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.
Oikos “(griego:ο?κος, plural: ο?κοι),? el equivalente al término 'casa' en la Grecia Antigua, es el conjunto de bienes y personas que constituía la unidad básica de la sociedad en la mayoría de las ciudades-estado (polis), e incluía a la cabeza del oikos (el telestai, generalmente el varón de mayor edad -el equivalente-”.El prefijo OIKOS griego y su equivalente ECO latino moderno, está asociado al lugar de habitación. ECOlogía, ECOnomía, ECOsistema, hacen parte de palabras y conceptos asociados.Lea también: La gran improvisaciónEl Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo -PNUD- no se queda atrás y define como ECOdesarrollo “El nivel de desarrollo socialmente justo, económicamente viable y ecológicamente compatible”, definición inspiradora que lamentablemente no ha podido ser implementada.Asociado al ECOdesarrollo se determinan la Factibilidad, la Sostenibilidad, la Viabilidad y la Sustentabilidad de las organizaciones y todo esto debiera redundar en la capacidad de estar bien y de generar bien estar -BIENESTAR- para toda la población, de una manera equitativa y digna.Finalmente, independientemente la arista a partir de cual queramos iniciar alguna reflexión o discusión, el común denominador y el foco central deberá ser la vida. Y no solo la vida humana, sino la vida en su completa extensión y dimensión, para que el concepto de ECOsistema adquiera verdadero sentido. Y es que el ECOsistema contiene los diferentes hábitats sobre los cuales se despliegan los diferentes tipos de seres, alrededor de sus particulares y asombrosos ciclos de vida.Con razón los llamados filósofos presocráticos estaban interesados en entender cómo funcionaba la naturaleza, ya que en ella están la mayoría de las respuestas a nuestras inquietudes y es donde a la luz de algunos pensadores, está Dios escondido debajo de cualquier piedra.Y es que lamentablemente, cuando hablamos de desarrollo, de manera coincidencial, se atenta contra la vida, se genera destrucción y contaminación en cualquiera de sus formas, y afectamos de manera inapropiada y egoísta las formas de vida de otras especies, apareciendo el hombre como el máximo depredador y el mayor ensuciador entre todos los seres vivos que hemos pasado por este maravilloso planeta. Mientras el concepto de desarrollo no esté asociado con el concepto de vida, no habrá nada que hacer.Vinculado al concepto de desarrollo está el concepto de progreso, el cual es generalmente construido de modo artificial e impuesto por métodos usualmente violentos, casi siempre, desde el ejercicio de poderes externos. Se hace necesario también, que el concepto de progreso esté asociado a la promoción, cuidado y respeto por la vida en todas sus formas y expresiones.Debemos dar muestras entonces, que hoy en plena edad del conocimiento, alrededor de lo que llamamos sociedad del conocimiento, si exista conocimiento.Es a partir de este conocimiento y reconocimiento de nuestra realidad, que podremos comportarnos como seres inteligentes y más aún, como seres éticos.La valoración y defensa de la vida, nos facilitará la construcción de una Cultura de la Vida, cultura que debería estar insertada en nuestro ADN y reivindicada permanentemente desde nuestros sistemas y procesos educativos como única alternativa para que el respeto, la tolerancia, la armonía y la convivencia pacífica pasen de ser posturas deseables, a ser realidades contrastables.Ahora bien, como esta cultura es vívida y no letra inerte, debemos garantizar que, desde los procedimientos básicos y elementales de la crianza, los padres de familia y los docentes, profesores y maestros, todos al unísono, compartamos el mismo guion alrededor del respeto por la diversidad, por el otro, por la naturaleza, por la comunidad.De nosotros depende, a todos nosotros nos compete, la defensa de la vida por la vida misma.Sin embargo, muy a mi pesar, parece que los humanos no entendemos o no queremos entender. Un ser humano respira unas 20 veces por minuto durante toda su existencia, y a pesar de esta realidad, no hacemos nada por dejar de ensuciar el aire que obligatoriamente tendremos que respirar. ¿Homo Sapiens?Le puede interesar: Homo DeusREFLEXIÓN: El jueves 9 de Julio sale llorando por TV el director general de la Organización Mundial de la Salud. El 11 de Julio sale Trump con tapabocas. Cada día hay más primeros mandatarios de diferentes países con pruebas positivas de covid-19. Medellín hace una excelente gestión de contención para el virus, pero al menor descuido, o decisiones bien intencionadas, pero mal planificadas como el día sin IVA, que traen asociados sus terribles costos, hacen que los casos de contagio se hayan disparado. Ningún centro científico de investigación ve probable una vacuna aplicable masivamente en Colombia antes de 18 meses. El aliento económico del sector privado llegó a su fin para mantener un aislamiento, así sea sectorizado. Los recursos del Estado Colombiano no son suficientes para atender la pandemia y subsidiar las necesidades básicas de la población improductiva por efecto de la emergencia. Queda demostrado hasta la saciedad, el mal manejo y la falta de planificación e inversión en temas de salud pública, por parte de la clase dirigente de este país en los últimos decenios. Y, por último, se desnuda la pésima formación ciudadana que desde las familias en la primera crianza y desde las distintas instituciones educativas de todos los niveles, se está entregando a la sociedad. Algo hay que hacer, pero ya, pues no es un asunto de buenas intenciones o de buenos propósitos, si no de resultados tangibles con respecto a un comportamiento ciudadano serio, responsable, solidario, cívico y disciplinado, que hoy brilla por su ausencia en el más alto porcentaje de los casos.Por ahora y ante este sombrío panorama, la única recomendación razonable es, mantenernos confesados.NOTA: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida Familia.
En poco tiempo, resultó necesario tocar de nuevo el tema de la Fiscalía General y, ahora, acompañado por la Contraloría. O, mejor, por respeto a las Instituciones, del fiscal general y del contralor, estos en minúscula.Lea también: CorrupciónEn esta oportunidad incurren en una situación francamente caricaturesca que hace poner en duda no solo su respeto a la ley, sino su cordura y su sensatez. Ya era suficientemente incómoda la relación superiores y subordinadas del fiscal y la esposa del contralor y de este con la esposa de aquel. Es posible que allí no se viole la ley, no se incumpla el régimen de incompatibilidades e inhabilidades del servidor público, pero que se ve feo, se ve feo y, por lo menos, genera un conflicto de intereses y una incómoda situación desde lo ético, si es que este concepto todavía tiene alguna importancia sobre la faz de la tierra.Pero este juego de intercambio de parejas tuvo un capítulo grotesco con el inútil e injustificable viaje a San Andrés, en aparente misión oficial, en compañía de sus cónyuges, de la hija del fiscal y de una amiga de esta, ambas menores de edad y en plena pandemia. Más que ridícula fue la justificación del viaje, soportada en que las funciones de las dos dependencias tienen que realizarse en todo el territorio nacional y que San Andrés no puede ser la excepción, pero más ridícula aún la rueda de prensa del fiscal en la que con fingidos pucheros invocó su calidad de padre de familia que no quiere alejarse de su familia. Espero que en próximos días los dos altos funcionarios visiten en compañía de sus esposas –es decir cada uno con la suya- y de sus hijos menores, a Leticia, a Tumaco o, incluso, para no tener que incurrir en gastos de avión, a ciudad Kennedy.En esta sociedad de doble moral puede suponerse que, si algún otro servidor público hubiese incurrido exactamente en las mismas conductas en las que incurrieron fiscal y contralor, estos dos funcionarios ya habrían iniciado las correspondientes investigaciones penales y fiscales, y habrían hecho su tradicional alharaca ante los medios de comunicación: si otros lo hacen está mal, si yo lo hago, es justificable. Más aún cuando, en medio de una infinita arrogancia, el fiscal “reinventa” la estructura del Estado y define que su cargo es el segundo más importante del país.Qué desfachatez y que falta de comprensión del cambio que pretendió generar la Constitución de 1991 al reemplazar el concepto de funcionario público por el de servidor púbico. Cuánta falta hace que, quienes ocupan cargos de cualquier nivel en la estructura del Estado, entiendan que están allí al servicio del país y dejen de pensar que tienen el país a su servicio.Le puede interesar: Corrupción y corruptelaEste tipo de situaciones, sumadas a tantas más que se presentan a diario en Colombia y en todo el mundo, le dan la razón a Fernando Savater cuando concluye que después de la pandemia, los humanos seremos ”los mismos, pero un poco peor”. En otras palabras, cuando llegue eso que melosamente llaman “la nueva normalidad”, seremos los mismos, pero con tapabocas.NOTA: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.
Por donde quiera que uno mire, esta pandemia ha puesto al descubierto que no tenemos claro el manejo de los riesgos, que somos una sociedad estructuralmente desigual y que la vida y la economía hoy en día, están intrínsecamente ligadas y colocadas al mismo nivel de valoración.Lea también: Pasa el tiempoLa falta de un verdadero liderazgo, la falta de solidaridad y la mezquindad, también han acompañado este fenómeno.La primera potencia mundial le quita el respaldo a la Organización Mundial de la Salud -OMS- cuando más soporte y ayuda requiere; el tema es manejado en muchas partes con fines políticos y las decisiones erradas y los malos manejos de los recursos en términos de corrupción, ponen en evidencia la bajeza y la ruindad de algunos humanos.Unos países se encierran, otros quedan abiertos y otros juegan al sí pero no, mientras las cifras de contagiados y de muertos crecen en todo el planeta, demostrando que estamos ante un ejercicio de prueba y error.Dicen que el infierno está lleno de gente con buenas intenciones. Asumamos que existe el infierno y entonces allá estarán, ahí sí guardados, quienes por acción u omisión nos ponen en peligro a todos.Ojalá la experiencia del pasado 19 de junio (El día sin IVA), nos sirva para entender que el sistema educativo, al menos en Colombia, ha fracasado en términos de formación de ciudadanos y de gente civilizada, y que lo que tenemos en abundancia es una caterva de Cafres, retomando los términos del Maestro Echandía, Cafres que ni cuidan su seguridad individual, ni tienen el más mínimo ápice de solidaridad para cuidar a los otros.Decía Teilhard de Chardin que “El árbol de la vida requiere ser podado”. Pues si a la gente le parece que no se justifica cuidarse, pues qué tal si miramos la situación de otro modo y damos vía libre para que quien quiera se quede en casa y el que quiera salir que salga, eso sí, anunciando que no se aumentará el número de UCIS, que no se comprarán más ventiladores y que el que se enferme, pues que se atenga a sus consecuencias. Es que uno le da comida a la gente, pero no ganas de comer. ¡Qué cansancio! ¡Qué desgaste! ¡Qué irresponsabilidad!Esta es una época para Reflexionar, Repensar, Reimaginar, Reiniciar y Resistir.Es el momento de Redefinir conceptos hoy manoseados, popularizados, vulgarizados e incomprendidos como el de Liderazgo, Solidaridad y Responsabilidad, entre otros varios. Hoy no hay verdaderos líderes, hoy la solidaridad es una expresión de moda y la responsabilidad es una quimera.Los mal llamados líderes de hoy detestan que les hablen de filosofía y de futuro, lo cual los deja enmarcados en lo que son: ejecutores vacíos, cortoplacistas y miopes.De igual manera, los mal llamados líderes no han querido reconocer que la gente del común perdió toda la confianza en las instituciones actuales, lo cual, dicho en palabras de los eruditos, quiere decir que se agotaron los relatos, que ya no son pertinentes y que lo que es peor, no aparecen relatores ni relatos nuevos.También hoy creemos que, si usamos muchas veces la palabra “Reinventarse”, por arte de birlibirloque las cosas cambiarán. ¡Absolutamente falso! No es el cambio por el cambio. Esto no es un proceso de tierra arrasada, de “Tabula rasa”. Debemos llegar al meollo del asunto y de pronto allá nos encontramos con que lo que hay que cambiar, son las “prácticas de crianza”, lo cual nos incumbe a todos.Se requieren nuevos liderazgos ético-sociales que sepan tejer un “Tejido Social” sólido y equitativo, donde la TRAMA haga el buen papel de hilo de amarre y la URDIMBRE aporte los hilos longitudinales, que estando en permanente tensión, aporten el vector direccional.El ser líder ético-social implica aunar la ética con lo estético, para que el ser ético y el ser social coexistan en armonía.Ecología y Economía comparten una raíz común: OIKOS que quiere decir casa. Y es que la casa hay que cuidarla y la economía, como hija de la Filosofía Moral, debe preocuparse por que los habitantes de la casa disfruten de un Bienestar digno para todos. Hay que ponerlas a trabajar juntas y no a competir.No quiero dejar pasar por alto el hecho de que uno de los argumentos esgrimidos para que los colegios y escuelas públicas del departamento de Antioquia no vayan a tener clases presenciales en el segundo semestre del 2020, es que algunas de ellas no tienen agua potable. ¡Por Dios! ¿Y nosotros los antioqueños tan orgullosos de qué? Y para colmo de males, se establece que una de cada 3 casas rurales, tampoco tiene agua potable. ¡Ave María!Le puede interesar: Aprovechar el tiempoAsí mismo, una reciente evaluación de la CEPAL de cómo van los países de América con respecto al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS- muestra a Colombia en la penúltima posición, solo superando a Bolivia. ¿Quiénes son y en dónde están los ilusos que insisten en que vamos bien?Y mientras tanto, el asesinato de líderes sociales no se detiene.Finalmente, una arenga provocadora: “En Colombia, siempre hacia atrás, nunca hacia adelante”.Reflexión: El Honor Militar está por encima del tratamiento que se le da a cualquier valor o atributo superior por parte de la sociedad política. Quienes amamos hondamente al Ejército de Colombia, nos sentimos verdaderamente compungidos por la escalada de “casos aislados” que se dan en diferentes frentes, y que tuvo su más reciente expresión en la violación de la niña Embera por parte de 7 soldados activos, es decir, en servicio. Una manzana podrida daña a las manzanas buenas. Por eso, en un acto de verdadera responsabilidad y de respeto al Honor Militar, toda la línea de mando, toda, debería renunciar, o ser llamada a calificar servicios por parte del Comandante Supremo de la Institución que es el Presidente de la República, como medida ejemplarizante, a ver si se le pone coto, por fin, a este tipo de situaciones.NOTA: Mi solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.
Soy respetuoso de las instituciones y en los diferentes círculos en los que desarrollo actividades como directivo, como docente o como ciudadano trato de incentivar ese respeto, pero tal postura personal no puede ocultar la evidencia de la falta de credibilidad de algunas de esas instituciones. Ahora, es claro que dicha pérdida de credibilidad no se debe a las instituciones como tales sino, por supuesto, a las personas que las conforman y a la manera como ejercen sus roles.Lea también: Manejo simbólico del derechoUna de esas instituciones es la Fiscalía General de la Nación, cuya creación en el proceso constituyente de 1991 puso a tono nuestro sistema penal con los más avanzados del mundo, al pasar del sistema inquisitivo al sistema acusatorio. Con dicho cambio se tuvo que construir una estructura inmensa y muy compleja, integrada en su inmensa mayoría por profesionales responsables, dedicados, sacrificados, que, a veces contra la corriente, hacen lo que pueden por lograr que ese monstruoso aparataje funcione eficientemente.Lamentablemente, lo dicho sobre los funcionarios de ese ente, no puede extenderse fácilmente a quienes han ocupado su cabeza durante los últimos treinta años: Gustavo de Greiff Restrepo, Alfonso Valdivieso Sarmiento, Alfonso Gómez Méndez, Luis Camilo Osorio Isaza, Mario Iguarán Arana, Guillermo Mendoza Diago como encargado, Viviane Morales, Martha Lucía Zamora como encargada, Luis Eduardo Montealegre Lynett, Jorge Fernando Perdomo como encargado, Néstor Humberto Martínez, Fabio Espitia como encargado y Francisco Barbosa. Personas con pergaminos, unos más que otros, profesionales idóneos, unos más que otros, pero con notorias características en común: gestiones grises, con más pena que gloria y una enfermiza proclividad al espectáculo mediático y a la notificación de sus decisiones a través de los medios de comunicación, circunstancia esta que resta seriedad a cualquier gestión y atenta enormemente contra la integridad y el buen nombre de los ciudadanos.Es más, tal afecto por las ruedas de prensa, en muchos casos en compañía de otros funcionarios como el Procurador General de la Nación y el Contralor General de la República, han originado una confusión generalizada y es enmarcar a estos tres altos funcionarios como las cabezas de los órganos de control, afirmación esta que he escuchado y leído, incluso, a renombrados juristas. Pues lo cierto es que la Procuraduría y la Contraloría son órganos de control mientras que la Fiscalía pertenece a la rama judicial del poder público y, por lo tanto, su actuación debería atender por encima de todo a la dignidad de la justica y los derechos de los ciudadanos.Mucho se ha escrito en pocos días sobre la decisión tomada por la Fiscalía y notificada en rueda de prensa, de ordenar medida de aseguramiento contra nuestro gobernador Aníbal Gaviria Correa. Me exonero de hacer en este artículo una defensa de nuestro mandatario regional, pues, en primer lugar, no la necesita y, en segundo lugar, ha sido tan arrollador el respaldo de los diferentes entes de nuestra sociedad que sólo me resta adherir a lo que han manifestado los empresarios a través de Proantioquia, la academia, a través del G8, y, en general, toda la sociedad civil antioqueña.Todo parecería indicar que, de nuevo, se toman decisiones efectistas para tratar de proyectar una imagen de eficiencia que oculte la realidad estadísticamente demostrable de más de un 90% de impunidad y de grandes casos de corrupción que, quien sabe por cuál razón, se quedan en los archivos sin que jamás suceda nada.Quisiera preguntar, y ¿A la Fiscalía quién la ronda? ¿Ha existido siquiera una condena contra los exfiscales por acciones de repetición en virtud de los billones de pesos a los que es condenado el Estado Colombiano por privaciones injustas de la libertad? ¿Ha existido contra ellos siquiera una condena por prevaricato por la expedición de decisiones manifiestamente contrarias a la ley?Reitero, el problema no está en la institución sino en las personas. No se trata ahora de proponer reformas constitucionales para eliminar la Fiscalía ni para reformarla. Ni siquiera se trata de modificar su forma de elección, pues en el mundo se hace de manera similar a la nuestra. Por ejemplo, mientras en nuestro país el presidente conforma una terna de la cual es seleccionado el Fiscal, en Estados Unidos es el presidente quien directamente lo designa, pero allá, como regla general, la Fiscalía funciona muy bien.Definitivamente, se evidencia otra vez que las leyes de Murphy son infalibles: creímos que bajo la orientación de Néstor Humberto Martínez el cargo de Fiscal General había tocado fondo, pero no, aún faltaba la gestión del fiscal Barbosa quien en pocos meses ha logrado demostrar que toda situación por mala que sea, es susceptible de empeorar.Le puede interesar: En su justa medidaNOTA: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.
La actual coyuntura pandémica nos ha obligado a realizar sobre el camino y sobre la marcha, ajustes, cambios e improvisaciones en varios de los asuntos que hacen parte del día a día de los humanos, entre los cuales, cabe, por ejemplo, el tema de la educación. Hoy se habla con alguna ligereza de que hemos virtualizado la educación, cuando nos referimos a emplear la tecnología disponible para aproximarnos de manera remota a los estudiantes, estableciendo comunicación vía teletrabajo, tele charlas o teleconferencias, simplemente simulando que se dictan las clases, pero de manera remota.Lea también: PertinenciaSólo las instituciones que a la fecha ofrecen programas virtuales apoyados por plataformas LMS (Learning Management System) pueden hablar de una verdadera Educación Virtual. Estos sistemas de gestión del aprendizaje se implementan a partir de la posibilidad de crear “aulas virtuales” donde se produce la interacción entre tutores y alumnos.Sin embargo, una cosa es la coyuntura y otra cosa lo que se viene: que la virtualidad llegó para quedarse, que la transformación digital es un imperativo y que la educación presencial debe revaluarse y replantearse, son hipótesis todas válidas, donde lo importante es precisar cuál metodología es la más apropiada pedagógicamente hablando, para cumplir con la finalidad última de la educación que es la formación, la instrucción y la apertura mental de los nuevos ciudadanos, en medio de entornos cambiantes y de relatos completamente agotados, garantizando la potenciación de humanos de bien.Personalmente considero que estamos ante la posibilidad de volver a recorrer el péndulo de la evolución educativa, mirada a la luz de la experiencia histórica y de las posibilidades tecnológicas que hoy tenemos a mano.No es caer en la simpleza de replicar lo que hacemos presencialmente, respaldados en la tecnología. ¡Ni más faltaba!Es entender el gran papel que en su momento cumplieron los mentores y/o los tutores, la posterior necesidad de masificar la instrucción y las posibilidades de llegar de nuevo a una educación personalizada, gracias a los avances tecnológicos disponibles como el Big Data, la Inteligencia Artificial, la Movilidad y el Blockchain.Personalmente me la juego, en un futuro no muy lejano, por una educación personalizada de manera virtual, lo cual implica un replanteamiento total del ejercicio educativo, respaldado en paradigmas como contenidos, métodos y evaluaciones, entre otros varios, que deben ser actualizados.Recordemos que la palabra MENTOR se origina en la Odisea, cuando Méntor fungía como educador y consejero de Telémaco, el hijo de Odiseo. Grandes mentores y tutores de la historia son más conocidos por el éxito de sus alumnos, su producto final, que por ellos mismos. Rescatemos entonces a Sócrates como tutor de Platón y a Platón como tutor de Aristóteles. Alejandro Magno tuvo como tutores a Aristóteles quien le abrió la mente a otras culturas, Lisímaco quien lo aproximó a la literatura y a las letras y Leónidas en la formación de su carácter y en el arte de la guerra. Fue tutor de Julio César, Marco Antonio Gnifón. De Leonardo, Andrea Verrocchio. De Miguel Angel, Francesco Da Urbino y los hermanos Ghirlandaio. De Galileo Galilei, Ostilio Ricci.En la España del Siglo XVI se destacó Juan Huarte de San Juan quien precisó los fundamentos que conforman el concepto de la Acción Tutorial, entendido como tarea orientadora que atiende las características diferenciales del alumno. Mayor elaboración al respecto se encuentra en las ideas pedagógicas de ilustres personajes como Comenios (1592-1670), San Juan Bautista de La Salle (1651-1719), Rousseau (1712-1778), Pestalozzi (1746-1827), Monjón (1846- 1923), Dewey (1859-1952), Montessori (1870-1952), Decroly (1871-1932), Vogotsky (1896-1934) y Piaget (1896-1980).Quisiera recordar los grandes maestros tutores que tuvo Bolívar: Simón Rodríguez, Andrés Bello, Alexander Von Humboldt y Guillermo Pelegrón, cuyas ideas formaron al Libertador y cuyas propuestas están aún por desarrollar.Le puede interesar: ¿Y cómo estamos?Como cada época trae su afán, hoy habría que hablar de diferentes tipos de tutorías: la tutoría individual, la tutoría de grupo, la tutoría técnica y la tutoría de la diversidad. En esto es importante abrir la mente y dejar que los expertos se pronuncien. El tema educativo se ha convertido en un tema multidisciplinar, donde considero yo, la coordinación de esfuerzos debe estar en cabeza de los pedagogos y no de otros especialistas, por importantes que sean.NOTA: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.
Coinciden algunos de los principales analistas y comentaristas del mundo contemporáneo en que el momento de crisis por el cual atravesamos no tiene antecedentes en la historia y que, lamentablemente, ha coincidido la aparición de la bendita pandemia, con el momento en que más escasos son los líderes mundiales (que entre otras cosas no se ven y no se identifican) y cuando más opacos son en su conjunto, los gobernantes en ejercicio a lo largo y ancho del planeta.Lea también: Inteligencia artificial y estupidez naturalEn la mayoría de los casos, los gobernantes de turno son los responsables directos de las polarizaciones que se agudizan al interior de sus países, de la fractura del necesario equilibrio de poderes y del desmembramiento de la tan anhelada y dispendiosamente construida, comunidad internacional.Irrespeto por los pactos firmados, discontinuidad de políticas y programas y engreimientos y soberbias propios de las monarquías, son las señales que hoy se ven, fuera de la falta de preparación y la falta de carácter de las cabezas de los sistemas republicanos a nivel ejecutivo, obviamente, con las naturales excepciones propias de cualquier actividad humana.Que los presidentes y primeros ministros de muchas partes del planeta hubieran tenido que esperar a que apareciera una pandemia que distrajera a los ciudadanos y aplazara sus reclamos y descontentos, para comenzar a gobernar o para simular que gobiernan, los convierte en seres débiles, que con ganada razón, no cuentan con el mínimo de gobernabilidad y de aceptación que sirven como respaldo a la legitimidad de un mandato constitucional.Se supone que para abajo de una cuesta las piedras ruedan, y en un momento de crisis, pues le corresponde al gobernante de turno ponerse los pantalones, remangarse la camisa y comenzar a actuar, a irradiar aliento y, sobre todo, a servir de inspiración y de ejemplo.No es motivo de agradecimiento que un gobernante haga su trabajo. Para eso luchó hasta con las uñas para su elección y ahora le corresponde trabajar. El disponer de los recursos del erario no es cuestión de buena voluntad y de iniciativa personal, sino que es su responsabilidad la administración de los recursos públicos aportados por todos los contribuyentes, sin ninguna excepción. ¿Le da usted las gracias, amigo lector al cajero electrónico cuando le entrega el dinero que acaba de retirar? Pues claro que no, pues es su dinero y es obligación entregarlo si tiene saldo favorable o cupo de sobregiro aprobado. Hoy somos testigos de una especie de piñata donde todos los días se anuncian ayudas, subsidios, tratamientos especiales, incremento de la deuda pública, liberación parcial del encaje bancario, acompañados, eso sí, por un séquito de plañideras que con razón o sin ella se acercan como mendigos a la mesa del rico Epulón para suplicar sus favores o al menos recoger algo de las migajas que caen de su mesa.Es la hora de la objetividad, de la racionalidad, pero también de la compasión y el respeto, así como de la solidaridad por parte de todos.Es hoy cuando se evidencia la falta que nos hace tener una cultura de la previsión y del ahorro.Hoy más que nunca se requiere de la grandeza de las almas y lo que menos se necesita es la grandilocuencia, o dicho en palabras del común, los discursos politiqueros y los cálculos políticos.Finalmente, y ante la inoperancia de nuestro aparato de justicia, malditos, mil veces malditos sean los que aprovechan estas penosas circunstancias que estamos padeciendo y esta grave emergencia y hacen negocios turbios con las ayudas, las donaciones o los recursos del Estado, haciendo de la tragedia humana un festín para alimentar la corrupción.Le puede interesar: Pasa el tiempoNOTA 1: Expresa el doctor José Gregorio Hernández G. con respecto a la presencia de tropas extranjeras en Colombia: “Al tenor de nuestra Carta Política, el solo tránsito -con mayor razón la permanencia- de tropas extranjeras en el territorio colombiano requiere permiso del Senado, que hoy no está en receso. Y, si lo estuviera, se requeriría concepto previo del Consejo de Estado”. En este asunto no opino pues no soy experto en el tema. Las que sí me parecen simpáticas son las voces patrioteristas de aquellos que inmediatamente salen a vociferar reclamando respeto por la Soberanía Nacional, siempre tan pisoteada. Es como si las prostitutas lideraran una campaña en pro de la virginidad.NOTA 2: Pasaron de agache los gremios económicos y los defensores de la economía de mercado ante la desconcertante intervención del Primer Mandatario para vetar el nombramiento de quien había sido electo por su Junta Directiva como Presidente de Asocaña. Muy mal mensaje por lado y lado.NOTA 3: Mi completa solidaridad con el señor gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.
En una sesuda entrevista, Muhammad Yunus, fundador del Banco Grameen y Premio Nobel de la Paz, hace una seria reflexión acerca de lo que debería ser un Plan Social y Ambiental de la postpandemia.Lea también: Ajustes a los calendariosInicialmente nos invita a recordar que antes de la pandemia, existían serias críticas al mundo que estábamos viviendo: la catástrofe climática, el deterioro ambiental, el desempleo masivo, la concentración inusitada de la riqueza, la deslegitimación del Estado, entre otras varias situaciones de gran complejidad que afectaban la vida digna de miles de millones de personas.Sostiene el doctor Yunus que la contingencia sanitaria nos ha dado la oportunidad de repensar la manera como vamos a enfrentar esta oportunidad nueva y fresca que nos da la vida.Invita a que decidamos antes de reiniciar o reactivar la economía, qué tipo de economía queremos, en el entendido que la economía es una herramienta creada por el hombre, lo cual permite ajustarla o cambiarla en cualquier momento, de acuerdo con lo que esperemos obtener a través de ella.Propone también no hablar de recuperación sino de reconstrucción de la economía, donde el punto de partida sea la conciencia social y ambiental que exige y permite construir la nueva realidad.Insiste en la recomendación que los gobiernos no deben aportar recursos a nadie que no garantice el máximo retorno social y ambiental para la sociedad, entre las múltiples opciones posibles que se presenten.Aboga por la creación de “negocios sociales” cuyo objetivo no es el lucro sino la resolución de los problemas de las personas y de la sociedad.Expresa la preocupación acerca de que mientras la economía siga siendo una ciencia para la maximización de ganancias, no se puede confiar en ella para el programa de reconstrucción social y ambiental que el planeta necesita y reclama.Ante esta coyuntura planetaria es claro que son múltiples las miradas y múltiples las propuestas para recuperar la inercia productiva del planeta. Ojalá todas esas miradas sean conscientes que de todas maneras como íbamos no íbamos bien y que esta coyuntura nos da la irrepetible oportunidad de hacer los ajustes a que haya menester.Le puede interesar: Los días por venirRecordemos finalmente como humanos y como humanidad, que el humanismo es el bien preciado de esta especie, lo que nos vuelve seres superiores cuando lo ejercemos o nos convierte en seres rastreros cuando lo violentamos. Por lo tanto, es el momento en que aparezca la grandeza del alma y no la grandilocuencia. NOTA: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.