Soy: María Luisa y Diego es el nombre de la marca que la diseñadora María Luisa Ortiz y el director de arte Diego Guarnizo crearon hace un año, con la cual hoy tendrán pasarela en Colombiamoda 2017 que cuenta la historia de una mujer llamada Rosa María.
Tal vez es una telenovela. O mejor una joya del cine colombiano.
La historia que contarán María Luisa Ortiz y Diego Guarnizo tuvo un capítulo previo que es necesario tener presente para comprender lo que pasará esta noche, a las 7:00, cuando lleven a la Pasarela Modo Rosa: Soy – Arkitect -Finlandek de Colombiamoda 2017; el viaje de amor, de vida, que hará Rosa María: resulta que Teresa, una mujer huilense que conoció a un negro muy atractivo llamado Conrado y se enamoró de él, le dijo que le entregaba su corazón si le enseñaba dónde quedaba la felicidad, por lo que él se la llevó para Quibdó, donde tuvieron un idilio del que nació su hija, Rosa María…
Y ella, una joven que decidió irse para Medellín a estudiar Agronomía y después trasegó al Urabá para aplicar lo aprendido, descubrirá en las tierras bananeras que tiene cáncer de mama, ante lo que creerá morir. Sin embargo, se salvará, y, como relató Guarnizo, “decidirá iniciar un recorrido por todo el Caribe, para contar con generosidad a las mujeres que se cuiden, pasando por pueblos como Tuchin o San Jacinto, hasta llegar a La Guajira, donde estará feliz, radiante, por haber cumplido su misión, a través de ese mensaje”.
Rosa María puede ser cualquier mujer colombiana. Rosar María es una manera poética de contar la historia de mujeres que, como Lina Hinestroza, directora de Tripartita Comunicaciones y fundadora de Modo Rosa, colectivo que lucha por la prevención del cáncer de seno, enseñan a las demás que con sus propias manos, tocándose, haciéndose el autoexamen, pueden prevenir esta enfermedad.
Es por eso que Guarnizo y Ortiz dividirán su colección en tres momentos: Esperanza, situada en el Urabá antioqueño; Generosidad, inspirada en las técnicas ancestrales de municipios como Tuchín o San Jacinto y Vida, que situarán en el Cabo de la Vela.
“Es algo consciente elegir estos territorios y no al azar. A través de nuestro proyecto, queremos contar y visibilizar el trabajo de los artesanos, de las comunidades y lo que pueden narrar a través de sus manos. El Urabá es una región de Colombia muy rica en biodiversidad, en paisajes, muy rica culturalmente, tiene un contenido artesanal muy importante, por lo que allí arrancamos el viaje hacia el norte de La Guajira, hacia el Cabo de la Vela. La parada en San Jacinto y Tuchín es muy importante porque son dos culturas que llevan muchos años tejiendo historias colombianas, nos parecía fundamental detenernos allí y hablar un poco de sus técnicas, a través de los gráficos de la colección; La Guajira se trata de hacerle homenaje a la vida, las playas, su arena, los flamingos, una parte más orgánica, que es el mensaje de vida y auto protección importante, es donde nuestra protagonista Rosa María termina, luego de enseñarles a las mujeres a cuidarse”, detalla María Luisa Ortiz.
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La unión hace la fuerza:
María Luisa y Diego
Hace precisamente un año, la creatividad de Diego Guarnizo se unió a la experiencia y el talento en la moda de María Luisa Ortiz, proyecto que decidieron llamar: Soy: María Luisa y Diego.
“De las cosas encantadoras que pasaron con Soy, es este ejercicio que hicimos con María Luisa que en los vinos se llama decantar, ella diseñadora de moda, yo director de arte, cada uno como 30 años de experiencia, yo con dirección de arte hago vestuario, entonces nos encontramos para decantar nuestras ideas, para replantear cosas”, cuenta Guarnizo.
Todo se dio porque, “viendo como se está moviendo esta industria colombiana”, creyeron que era el momento de pensar en una propuesta de moda “que tuviera todo lo que hemos vivido, un proyecto que sea honesto y generoso, honesto en términos tan chéveres como buscar los orígenes colombianos. Yo con el Reinado de Belleza recorrí el país, sé qué produce los empoderamientos de la moda y la artesanía; María Luisa, estudiada en parís, maravillosa, diseñadora consumada, tenía un mundo para aportarme; decidimos entregarle a la industria todo lo que sabemos, diciéndoles: miren primero a Colombia, no se trata de volvernos folklóricos, pero sí hay cosas que inspiran en nuestro ADN”, dice el director de arte y publicista.
Para María Luisa Ortiz, “lo más bonito de Diego es su generosidad, es el ser humano más generoso del mundo. Mi mirada ha cambiado porque nunca había trabajado en un equipo tan grande de personas, siempre había tenido bajo control todo lo de mis colecciones, trabajar en equipo me ha abierto las puertas para ver que las cosas sí se pueden hacer, volar de la mano de una persona como Diego te permite no ponerle obstáculos a tus sueños”.
Él, por su parte, destaca que la diseñadora lo ayuda a redescubrir: “Lo más bonito es ese descubrir el compartir de verdad, todo lo que sabe me lo enseña, todo lo que sé se lo entrego y entre los dos hicimos una bomba creativa que hace que este proyecto en el que llevamos un año pueda posicionarse. Estamos como niños chiquitos que estrenan juguetes”.
Así, uniendo dos mundos, Diego y María Luisa entregarán hoy una colección que incluye piezas de hogar, que podrá ser comprada de manera masiva en Almacenes Éxito, con un mensaje de cuidado con el cáncer de mama, con el color de Modo Rosa.
“Lo que queremos con esta colección, aparte de una democratización de la moda, es un poco ir más allá de que todos tuvieran acceso a ropa de diseñador, sino que tuvieran acceso a ropa de diseñador diseñada en Colombia, inspirada en nuestros origines, confeccionada en los talleres de Medellín y Bogotá; un trabajo en el que muchas familias colombianas están metiendo la mano, comiendo. Cuando te pones un producto de estos, te acuerdas de ellos”, concluyó la diseñadora.