Los regalos son un vehículo de expresión, de ahí que cada vez sea mayor el esfuerzo por buscar uno personalizado que conecte emotivamente a quien da con quien recibe.
Al momento de hacer un regalo, un aspecto fundamental es conocer a esa persona; de ahí que justamente en el nivel de conocimiento que se tenga de quien recibirá el presente, determina lo representativo y el nivel de emotividad que implique la entrega del obsequio.
Así lo entendió Natalia Ardila, quien a través de su empresa, Ideas de una Pelirroja, decidió convertirse en puente para que las personas que desean hacer regalos personalizados y no cuenten con la creatividad para materializar sus ideas, puedan participar en un proceso creativo que les permita construir un detalle con identidad y expresión propia.
“Es importante hacer un regalo personalizado porque uno, a través de éste, muestra cuánto conoce a esa persona especial, entonces si das un regalo es importante hacerlo bien porque el regalo es la forma de expresar lo que quieres decir; muchas veces tu vas y compras una camisa un pantalón o cualquier cosa y puede que con eso le estés demostrando a la persona que la conoces y sabes que quería eso, pero no necesariamente le estás expresando esa importancia y ese sentimiento especifico que conserva el regalo personalizado”, apuntó Ardila.
Nataly Hurtado elabora Cupcakes, pequeños ponqués con decoración temática que suelen estar personalizados según el tipo de celebración o las preferencias de la persona homenajeada. Ella expresó que “hay un tema que, sin duda, es ganador y es el de las profesiones de las personas, porque al ver la actividad que uno desempeña decorando un postre que podemos disfrutar con los seres queridos esto cobra mucho más valor, además se cuida cada detalle, se trata de personificar, en un espacio muy pequeño, a la persona o algo que la represente y eso lo convierte en un regalo muy valioso, porque es pensar que quien nos lo hace cuidó cada detalle para que realmente fuera algo nuestro.
Además, con el cupcake pasa algo muy especial y es que aunque siempre lo primero que se haga sea tomarle fotos y compartirlo, termina siendo un regalo efímero porque después de apreciar que está bello y nos representa, es un detalle para disfrutar y compartir en el momento”.
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La participación de quien regala en la elaboración del regalo, también es un elemento destacado en los detalles personalizados; así lo resaltó Natalia Ardila al afirmar que “el cliente no sólo nos cuenta la idea y nos da un rango de precios sino que está atento en todo el proceso, desde que le compartimos la idea gráfica hasta que se termina el regalo y durante el proceso está siempre compartiéndonos detalles, datos de la persona para la que va el regalo y todo eso al final hace que realmente el detalle sea personalizado, porque hay una interacción constante que se ve materializada en el producto final”.
Un elemento a tener en cuenta al momento de pensar en un regalo personalizado, es que estos de ninguna manera pueden ser regalos de última hora, por lo que en caso de pensar en un obsequio de este tipo, es importante hacerlo con antelación a la fecha de celebración para cuidar cada detalle y lograr el efecto deseado con el presente.