El Pequeño Teatro de Medellín empezará bien el 2017: viajando al exterior. Una representación del Teatro viajará desde hoy al XVIII Festival Internacional de Teatro Zicosur  que se realizará en Antofagasta, Chile, y donde presentarán dos obras, Los Chorros de Tapartó, creación de Rodrigo Saldarriaga, su fundador; y La muerte en la calle, de José Félix Fuenmayor. Las obras se representarán, respectivamente, domingo, lunes y martes, y tienen como valor agregado ser dos obras netamente colombianas, creadas por dramaturgos nacionales de gran trayectoria. 

“Qué mejor manera de empezar el año que viajar a otro país para mostrar lo mejor del teatro que hacemos. Fue una sorpresa porque fue una invitación que hicieron ellos directamente, por recomendación de unos chilenos residentes en Colombia y a quienes les preguntaron qué grupo teatral representaba mejor al país en términos generales, y ellos nos recomendaron a nosotros. Entonces es muy especial porque fueron los espectadores agradecidos los que ayudaron a que esto pasara”, aseguró Catalina Murillo, actriz de larga trayectoria en el Pequeño Teatro que viajará al Festival.

Zicosur, que inicia mañana e irá hasta el 20 de enero, invitó a agrupaciones de países como Senegal, Bolivia, Argentina y, por supuesto, de Chile, para que presentaran sus propuestas artísticas con obras que narrarán de forma original y propia las vivencias de sus países. 

“Esta invitación llega en un momento muy especial porque el Teatro está pasando por muchos cambios. Además de los viajes que pensamos hacer este año con varias presentaciones, también estamos renovando la infraestructura de nuestra sede para dar un espectáculo más acorde a nuestra calidad y a la exigencia de nuestro público”, aseguró Murillo, quien agregó que las renovaciones serán en la sala del Teatro, la silletería y en los parqueaderos de bicicletas afuera de la sede, que ahora podrán utilizar los espectadores cada vez que haya función. 

Perfiles de las obras

La muerte en la calle: la literatura y en especial el género del cuento han nutrido al teatro de un repertorio único; es el caso  de José Félix Fuenmayor, en donde la escritura en primera persona le otorga unos matices únicos para convertirla en pieza dramática. José Félix Fuenmayor mostró cómo el cuento a pesar de su corta extensión es un universo total. 

Los Chorros de Tapartó: Para el Pequeño Teatro esta obra “refleja nuestra cultura, nuestra identidad. Dos personajes -Mireya y Maruja-, con posiciones críticas frente a la realidad de nuestro país, asumiendo sus carencias y sus afectos”. Un texto que aún pareciendo más literario que teatral, exige a las actrices el respeto por la palabra, por la imagen, por el sentido crítico.