Tras el arresto del exlíder catalán, Carles Puigdemont, las protestas del sector independentista no se han hecho esperar. Con pancartas y actos simbólicos reclaman libertad para los presos políticos.
Manifestantes reclamaron este domingo en Bruselas la libertad de los políticos independentistas catalanes encarcelados, coincidiendo con la detención en Alemania del expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont, instalado en la capital belga hace casi cinco meses.
La cita, convocada por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) antes de la detención del independentista en territorio alemán cuando regresaba de un viaje a Finlandia, se produjo junto a la sede de la Comisión Europea (CE), y en ella se vieron pancartas con frases como "Liberad a los presos políticos, suficiente silencio UE".
También hubo rótulos con el término "democracia" y a favor de una eventual república catalana, así como banderas esteladas independentistas y de Flandes, la región septentrional de Bélgica con un fuerte sentimiento nacionalista.
Los asistentes corearon frases como "¡Viva Cataluña, viva la república!", "¡Libertad para los presos políticos!" o "¡Rajoy, criminal!", además de que uno de los manifestantes se puso cinta adhesiva en la boca y otro un traje de presidiario que representaba a la república catalana.
"Es una España de tiempos franquistas. En todo caso, lo que nos toca vivir por la parte de Cataluña es una España que no conoce el diálogo, que está metiendo a la gente en prisión por riesgo de fuga", opinó la miembro de la ANC Núria Bordes.
A su juicio, añadió, las causas contra los líderes independentistas, como la acusación de rebelión, "no tienen justificante ninguno", a la vez que dijo haber recibido la noticia sobre la detención de Puigdemont con "sensación de injusticia".
El eurodiputado nacionalista flamenco de la N-VA Mark Demesmaeker consideró, por su parte, que el envío a prisión de Jordi Turull, Carme Forcadell y tres exconsejeros catalanes el pasado viernes, así como la detención de Puigdemont, son "una escalada" de las tensiones.
"Europa está construida sobre valores democráticos, sobre los derechos y libertades de ciudadanos libres de ejercer sus derechos políticos y, claramente, ese no es el caso ya en España", consideró, a la vez que llamó al "dialogo" y la "negociación" para resolver esta crisis política.
El exlíder catalán detenido este día en Alemania ha pasado casi cinco meses en Bruselas, a donde llegó el pasado 30 de octubre tras la declaración unilateral ilegal de independencia en medio de una gran expectación mediática, acompañado de cuatro exconsejeros regionales de su gobierno.
La presencia del político catalán en Bélgica ha generado tensiones y resultado incómoda para el Gobierno federal belga, una coalición de centro-derecha compuesta por nacionalistas flamencos (N-VA), democristianos (CD&V), de liberales francófonos (MR) y de Flandes (Open Vld), así como para sus relaciones diplomáticas con España.
Además, la CE y su presidente, Jean-Claude Juncker, han reiterado su apoyo al orden constitucional español y subrayado la posición jurídica del actual Ejecutivo comunitario y de sus predecesores, de que "si un referéndum se organizara en consonancia con la Constitución Española, ello significaría que el territorio que se saliera se encontraría fuera de la Unión Europea".
La activación de la orden europea de detención supuso que Puigdemont no podía abandonar Bélgica, pero una vez que un juez del Tribunal Supremo acordó el 5 de diciembre retirarla, la Fiscalía belga anunció que pediría al tribunal de primera instancia competente que hiciera lo propio.
A partir de ese momento, Puigdemont viajó a países como Dinamarca, Suiza y Finlandia, al mismo tiempo que acudía en Bélgica a manifestaciones y actos culturales.
A su vuelta de Finlandia, fue detenido en Alemania, a pocos kilómetros de la frontera con Dinamarca, en cumplimiento de la reactivación de la euro-orden por parte de la justicia española.
Permanecen en Bruselas los exconsejeros Toni Comín (Sanidad), Meritxell Serret (Agricultura) y Lluis Puig (Cultura), sobre quienes igualmente se ha reactivado esa euro-orden.
La Fiscalía de Bruselas confirmó el sábado la recepción de la euroorden española contra Puigdemont y los exconsejeros catalanes huidos como él en Bélgica.