El denim es un tejido diagonal construido con dos hilos, una trama que es blanca originalmente y la urdimbre de color azul. Esta base textil que se utiliza para fabricar jeans, se remonta al siglo XIX demostrando que ha resistido y evolucionado de generación en generación.

Según Martha Cálad Isaza, directora del Laboratorio de Moda de Inexmoda, “en el denim se parte entonces que es un tejido de alta resistencia y que se caracteriza por estar preteñido. Es decir, que se tiñen los hilos de la urdimbre en tonalidad azul o de colores y la trama es en crudo. Esos colorantes en que se tiñen los hilos de la urdimbre tienen la cualidad de irse destiñendo y desgastando con el uso, el tiempo y el estilo de vida de la persona”.

En cuanto a la historia del denim, Adriana Gómez Arias, diseñadora de Modas, asesora y consultora independiente del sector textil comentó que “su origen proviene desde tiempos muy lejanos. Nació en una ciudad de Francia que se denomina Nimes. De allí fue llevado a los Estados Unidos en barco y en ese momento era una tela rígida, cruda, muy fina que quiere decir que era muy resistente”.

Para 1850 se convirtió en vestuario cuando el francés Levi Strauss llegó a San Francisco, Estados Unidos y observó que esa tela era muy resistente, por lo que, según Gómez Arias, “él empezó a ofrecer este tejido para elaborar las prendas, los overoles y los pantalones de los mineros y de los obreros que en esa época construían los ferrocarriles en los Estados Unidos” y con ello se logró la invención del jean.

Fue así como el denim se volvió industrial y se fue masificando al ser utilizado en ropa de trabajo. Más adelante en los años 40 y 50 cuando se empezaron a hacer las películas de los vaqueros en Hollywood, este tejido empezó a ser usado en los pantalones de los actores y se fue convirtiendo en una prenda muy deseada por los jóvenes de la época.

“Luego en los años 60, los jóvenes que estaban en contra de la guerra de Vietnam no solamente empezaron a usarlos como prenda de trabajo sino como prenda de vestir diaria”, señaló Gómez Arias.

Natalia Guzmán, jefe de la Línea de Denim de Americanino expresó que “el denim es el textil más democrático, con propiedades y características únicas que se ha reinventado a través de los años. Gracias a él, podemos descubrir innumerables maneras de transformación y actualmente, es un protagonista activo en la conciencia ambiental. Ya que interactúa perfectamente con insumos amigables con el medio ambiente, razón por la cual, es cada vez más importante en la industria textil nacional e internacional”.

En el ámbito internacional hay marcas de jeans que utilizan denim que son muy reconocidas, ecológicas y sostenibles como G-Star, Denham, Nudie Jeans, Jack and Jones, Levi’s, Diesel, Chevignon, Marithé+François Girbaud, entre otras.

Denim en Colombia
Esta base textil llegó a Colombia a principios de los años 60 y los jeans se convirtieron en una prenda deseada por los jóvenes de esa época cuando arribaron marcas internacionales como Levi’s y Wrangler.

Cabe recordar, según Gómez Arias que “Caribú, Lec Lee y Baboo empezaron a hacer jeans”, anteriormente no habían jeans para hombres o para mujeres, sino que básicamente su diseño constaba de un sólo molde (unisexo).

Más adelante con la masificación, algunas marcas empezaron a lanzar su propio tallaje y lograron también diferenciar el género del jean. “En esa época existían marcas muy potentes como Caribú, aunque habían otras como Rifle y Gamin que ingresaron a la industria colombiana. Luego empezó a hacerse este tipo de tejido en nuestras fábricas madres como Fabricato y Coltejer, lanzando el índigo en los años 60”, añadió la diseñadora de Modas.

El denim es importante en la industria textil de Medellín y data desde esa época porque Fabricato y Coltejer eran las textileras líderes y fueron pioneras en la fabricación de denim.
Gómez Arias señaló que “Medellín como industria o como capital nacional del sector textil y de confección en Colombia asume este textil y empieza a hacer prendas”, sin embargo, la capital antioqueña comienza a ser reconocida por el denim en el siglo XXI, específicamente desde el año 2000 cuando realmente fue que se masificó debido a que muchas empresas pequeñas innovaron y aplicaron este tejido en la moda.

Tecnología y procesos
En cuanto a los procesos de los jeans, estos cambian de acuerdo con las tendencias y a las temporadas. Existe una gran variedad como los degradés, los manchones, los desgastes y las arrugas que se elaboran con tecnología y en algunos casos se incluyen las manualidades. “Los efectos de degradé pueden ser a través de procesos láser o de inmersiones con químicos, que tienen que ver con las temporadas comerciales y la moda”, expresó Gómez Arias.

Eva Eitel, gerente administrativa y financiera/CFO de CHT Colombiana Ltda expuso que la historia de CHT Bezema de origen alemán y con presencia en 70 países, “se destaca por desarrollar soluciones químicas y servicios a la medida de sus clientes”, ya que se caracteriza por su innovación constante y su filosofía sostenible.

El OrganiQ y la Pasta de Índigo son dos productos bandera de la empresa y que a su vez, son amigables con el medio ambiente. Francisco Javier Durier Robledo, jefe de Ventas área Textil de CHT Colombiana Ltda explicó que CHT Bezema está presente en Colombiatex de las Américas 2017 con su respectivo portafolio. “El OrganiQ, por ejemplo, es el primer blanqueador totalmente orgánico para el tejido de denim; y su implementación disminuye el consumo de permanganato de potasio en más de 1.000 toneladas al año, reduciendo considerablemente el uso de este producto que es altamente contaminante”, siendo una opción de sostenibilidad, eficacia y ecología por encima de otros procesos.

Asimismo, la “Pasta de Índigo, está desarrollada para usarse sobre cualquier base textil y generar una apariencia de denim, destacándose por ser un producto vanguardista”, señaló Durier Robledo. Cabe resaltar que la nueva colección de Fabricato que se expondrá en la Feria, está desarrollada con este acabado.

Por su parte, Gómez Arias dijo que marcas como G-Star están en una campaña de limpiar los océanos, “a través de los plásticos logran hacer unas fibras y con estas tejen denim”.

Exportaciones
Los jeans demuestran que tienen infinidades de posibilidades para abarcar los mercados, “desde la gala o el lujo hasta lo más informal. Es una variedad súper extensa debido a la alta tecnología y a la masificación que están teniendo”, indicó Gómez Arias.

Además, la industria textil cada vez más se está enfocando en la evolución del denim que tiene infinidad de variaciones, porque los hay livianos, pesados, con fibras como el elastano, el tencel, el lyocell, el lino, el algodón 100% o mezclados con poliéster.

Entre más variedades haya, las oportunidades son más amplias y por esa razón Colombia exporta jeans a países como México y Ecuador. Cálad Isaza concluyó: “Sabemos hacer denim y no solamente desde las marcas sino el paquete completo, tenemos unas empresas especializadas y muy competitivas en desarrollar grandes volúmenes de este tipo de telas, pero lo que hoy nos identifica en los mercados principalmente latinoamericanos es el ‘levanta colas’”.