El negocio lácteo ha sido tradicionalmente uno de los motores en el desarrollo económico y social del Norte de Antioquia; con el estancamiento del precio de la leche y el aumento en los costos de producción surge también la preocupación por el reflejo de estos factores en la economía de la subregión.
El Norte de Antioquia es la segunda cuenca lechera del país, de ahí que la actividad económica de esta subregión, especialmente en el altiplano norte, esté sustentada en la actividad lechera.
Esta vocación, según la bióloga Laura Castrillón Salazar, docente de la Universidad de Medellín que ha trabajado con el sector lechero acompañando estudios de calidad sanitaria y composicional de la leche, ha hecho que la zona tenga un alto reconocimiento, pero agregó que el mismo hecho puede llegar a ser una dificultad debido a factores como el estancamiento en el precio de la leche, el cual suele mantenerse estable en el mercado mientras los costos de producción aumentan debido a variables como los aumentos en el salario mínimo, el precio del dólar, abonos, fertilizantes e incluso el costo de la tierra.
“El precio de la leche lleva varios años estancado; la alimentación de los animales influye mucho y es un sector que se ve muy afectado por contingencias como la que se vivió recientemente con el paro de maestros, porque las escuelas son una de las salidas más importantes para la leche líquida y si los estudiantes no están recibiendo clases, inmediatamente se siente la afectación”, señaló la académica.
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Jaime Garzón Araque, Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de Antioquia se refirió a este tema que es conocido como las enlechadas. “La verdad es que en el Norte sólo Colanta puede recibir leche para pulverización, nosotros hemos ido trabajando con una maquina concentradora de leche, esta es la etapa anterior a la pulverización y estamos en conversaciones con el Ministerio de Agricultura para tener una nueva máquina pulverizadora en Unilac para que así los productores no se vean tan afectados en las enlechadas, al punto de tener que botar su producción”.
Jorge Alonso Tamayo, alcalde de Entrerríos, señaló que en los últimos diez años se ha evidenciado una mayor influencia de la industria lechera en los municipios de la subregión. “Aunque nosotros siempre nos hemos destacado en Entrerríos por el tomate de árbol, innegablemente el negocio de la leche ocupa a una gran parte de la población, además, la llegada de la planta de Alpina al municipio ha sido visto con buenos ojos por parte de los productores, porque al haber más competencia, mejoran sus condiciones”, señaló Tamayo.
Johanna Jurado, gerente de Alpina en Entrerríos, destacó que desde allí se pretende abarcar los mercados de Antioquia, la Costa y el Eje Cafetero con el portafolio de productos de la compañía, que sumado al portafolio de empresas como Colanta, contribuirá a la estrategia trazada en el año 2015, cuando el entorno empresarial de la subregión participó con la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia en la construcción de la Ruta Competitiva de Lácteos. Allí se identificaron retos estratégicos en los que se diagnosticó la importancia de alcanzar nuevos segmentos, alcanzando mercados más allá del regional y con productos a los que un mayor nivel de cualificación los haga más atractivos, derivando en beneficios para los productores y demás actores de la cadena productiva.