Una de sus grandes apuestas para llegar a un mayor público se denomina Teatro digital, una entrada para todos.
Cuando el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo abrió sus puertas en 2010, Bogotá era una ciudad que comenzaba su gran eclosión cultural, desde entonces los gestores del centro han contribuido a esa explosión construyendo un público afín al teatro, la ópera o la danza y con un heterogéneo programa.
"El gran desafío es formar públicos y hacer que el público que ya tiene el interés por las manifestaciones artísticas se vuelva más complejo, más demandante, más abierto para los nuevos lenguajes. Esos son los retos de la casa", comentó el director del Teatro, Ramiro Osorio.
En este sentido, comentó que en un país como Colombia, con diferencias sociales tan grandes, "el gran reto es hacer posible que el mayor número de ciudadanos venga a instituciones como esta".
Para ello cuentan, entre otros elementos, con una escuela de formación de públicos, en la que invitan a gente que no puede permitirse una entrada y por la que el año pasado pasaron unas 20.000 personas, programas con escuelas y la transmisión en vivo por internet, una de sus grandes apuestas, denominada Teatro digital, una entrada para todos.
"Es el más importante de todos los que hacemos (...) lo que nosotros queremos es multiplicar la posibilidad de que la gente tenga acceso a los espectáculos que presentamos en este teatro", aseveró Osorio.
En promedio hacen entre 10 y 12 transmisiones al año "con una calidad extraordinaria", que es lo que Osorio considera que le da sentido ya que cree que el de la cultura "es un mundo donde esos espacios se ganan solo si de verdad lo que se emite tiene muchísima calidad".
Por ello, la temporada pasada consiguieron que unas 50.000 personas asistieran al "Teatro digital", si bien cree que irá creciendo a medida que van teniendo más oportunidades.
En este sentido comentó que para este año esperan crecer alrededor de un 20 % en la asistencia virtual a las obras del teatro.
"Nosotros nos proponemos en este teatro un diálogo entre lo mejor de la cultura del mundo con lo más sobresaliente de la cultura de Colombia. Aquí caben 1.300 personas en una sala y hasta 320 en otra sala, en esa medida queremos multiplicar esos espectadores que puedan tener acceso a estas manifestaciones de excelencia que es lo que caracteriza a esta casa", subrayó Osorio.
Sin embargo y debido a cuestiones de derechos, la emisión solo se hace en una única ocasión. Osorio, que tiene una larga trayectoria en la gestión cultural y que fue ministro de Cultura de Colombia en los años 90, comentó que uno de sus grandes retos "fue construir un público para la danza".
"Es uno de los sectores que tiene mayores problema de desarrollo en la danza, especialmente del ballet", aseguró.
Para este 2017, la programación del Teatro Mayor incluye un total de 76 artistas o grupos de música, danza y teatro de distintas partes del mundo, entre ellos conciertos clásicos dedicados a la Rusia Romántica y espectáculos de la cultura francesa.
En su mezcla también tiene espacio la música popular colombiana, por ello este sábado será el folclórico Cholo Valderrama el que tome un escenario para el que ha colgado el cartel de "todo vendido".
"Tenemos una gran propuesta para nuevos públicos de rock o jazz, una programación que se llama 'músicas del mundo' y es interesante porque las condiciones de la sala son tan buenas que les permite hacer conciertos acústicos con la mejor calidad", subrayó.
De todos estos años al frente del teatro recuerda con particular afecto la "Salomé", de Richard Strauss que dirigió el español Josep Caballé Domenech.
Esa pieza sabía que sería "una ópera difícil y que ya tenía su dosis de escándalo en sí mismo", pero además se sumaba un cambio en el final que "para los críticos era un sacrilegio".
Para esta temporada espera con entusiasmo el III Festival Internacional de Música Clásica de Bogotá, que organizan cada dos años y que considera "un privilegio".
"El hecho de poder hacer 50 conciertos y cuatro funciones de ballet en tres días y medio en 17 escenarios de 10 localidades de Bogotá, para mí es un regalo fantástico. Poder darle a la ciudad esa posibilidad, no tengo palabras para agradecer", aseguró.