Las primeras señales de que la economía global muestra síntomas de un paciente enfermo comienzan en Europa
La pregunta que todo el mundo se hace es si estamos cerca de un cambio en la tendencia creciente de la economía en los Estados Unidos. Se dice que los economistas casi nunca anticipan cuando llegara una recesión hasta que se está en ella. Hay señales de que la economía global comienza a desacelerarse. La producción del sector manufacturero ha caído en los primeros 6 meses y los empresarios andan nerviosos con las sanciones a China generando incertidumbre sobre las decisiones de inversión.
Los mercados se espantaron esta semana por lo que se conoce como “la tasa de interés invertida” que ocurre cuando las tasas de interés de los bonos de corto plazo son mas altas que los de largo plazo. El índice Dow Jones se desplomó el miércoles en 800 puntos, luego de que el mercado de bonos proyectó un aviso peligro que ha precedido a cada recesión desde 1956.
Piense por un momento en sus depósitos en la cuenta bancaria que son de alguna manera préstamos a su banco. Usted dispone de su dinero cuando quiera sin que la entidad le pague un rendimiento alto. Pero si decide dejarlo por un año o más, entonces recibirá una tasa de interés mayor. Lo mismo ocurre con el mercado de bonos. La tasa de los papeles del Tesoro a 30 años cayó por primera vez por debajo del 2 por ciento este miércoles.
La rebaja de un cuarto de punto por parte de la Reserva Federal la semana anterior tiene varias interpretaciones: sostener la inercia que trae la economía, mantener los niveles de empleo actuales, anticiparse a una posible desaceleración (que no es recesión) y aceptar que se ha llegado a la cima que indefectiblemente llevara a un ciclo descendente.
Las primeras señales de que la economía global muestra síntomas de un paciente enfermo comienzan en Europa. El PIB alemán se contrajo en el segundo trimestre siendo esa caída la segunda en todo un año. No hay que olvidar que la economía de Alemania es el motor que mueve a la Eurozona. Lo mismo ocurrió en Gran Bretaña y Suecia. Ni que hablar de China que por primera vez en 17 años la producción industrial fue la más débil, así como se reportaron menores niveles de inversión y ventas al por menor.
Por el momento, los principales índices de la economía norteamericana mantienen un ritmo positivo, con un nivel de empleo que es el más alto desde la década de los sesenta, aunque las cifras de inversión han estado por debajo de lo esperado y hay un exceso en la capacidad de producción del sector manufacturero. El comercio por su parte saca la cara gracias a los consumidores que continúan gastando de manera sostenida. A continuación, se muestra un cuadro sacado del sitio Axios que indica los ciclos de expansión en los Estados Unidos desde 1945. ¿Estaremos cerca de ese largo periodo de crecimiento? Esa es la pregunta que nadie se anticipa a predecir.