Los estudiantes recurren a test vocacionales para responder a la duda de qué estudiar tras terminar el colegio, pero ¿realmente funcionan? Expertos analizan los elementos a tener en cuenta en el momento de elegir a qué dedicarse el resto de la vida.
Escoger carrera no es fácil, siempre hay dudas, “¿qué quiero?, ¿en qué soy bueno?, ¿eso sí da dinero? Y es que esa es una decisión que marca la vida.
Tatiana Vélez, psicóloga cognitiva, indicó que hay que tener en cuenta muchos aspectos, lo económico, las habilidades, la visualización, la vocación: “es algo que se hace durante toda la vida”.
Alexandra Betancur, psicóloga de la Universidad Pontificia Bolivariana, sugirió ir de manera gradual, empezar por determinar intereses y capacidades para escoger diferentes carreras posibles.
“Al tener varias preseleccionadas es recomendable buscar asesoría de un profesional que se desempeñe en esas áreas. Hay mucho mitos entorno a cada carrera, es importante que el estudiante tenga información de primera mano de cómo es la carrera y el campo laboral”, agregó Betancur.
Poniendo a prueba los test
Los test de orientación vocacional son herramientas muy útiles, según destacó Vélez, pero advirtió sobre no confiar en cualquier test en la red y también que así el test se haya diseñado adecuadamente, la respuesta que arroje no es una camisa de fuerza, sólo una sugerencia, por eso destacó la importancia de consultar con profesionales.
Los test de orientación vocacional son herramientas que sirven para valorar en términos generales las características psicológicas de una persona. Son cuestionarios sistemáticos y ordenados, que a través de cada respuesta determina actitudes, aptitudes, personalidad e interés profesional, de tal modo que se pueda determinar qué área del conocimiento se adapta a la persona.
Son herramientas para orientar y cada vez están más al alcance de las personas, en internet hay un gran número de estos cuestionarios. Incluso hay aplicaciones, como la lanzada por el gobierno argentino en junio de 2018 para ayudar a los jóvenes que no saben qué estudiar, enfocada en establecer en qué es bueno el estudiante y qué es aquello que le apasiona.
Consejos para elegir carrera
Betancur señaló que el estudiante debe pensar: “¿cómo se visualiza en el campo de acción?”, y especificó que es muy importante el tema de los gustos, “no solamente lo técnico”. Explicó que el estudiante debe tener en cuenta aquellas áreas en que destaca, pero que no debe ser lo único que determine la decisión.
El Ministerio de Educación da algunos consejos para tomar la decisión más acertada: “Empieza por preguntarte ‘¿para qué soy bueno?’, reconoce materias favoritas y habilidades, revisa tu historia académica, aprende a leer tu Saber 11”.
El Ministerio señaló que el estudiante debe conocer la oferta educativa e investigar el mundo laboral de la profesión de interés, “investiga, empieza por analizar si el estilo de vida que llevan los egresados responde a lo que quieres para tu futuro”.
¿“Y si no es lo mío”?
Si en el curso de sus estudios, la persona se da cuenta que eso no es lo que quería realizar, Vélez sugirió tener en cuenta todo: las materias, visualizarse en un futuro, las otras opciones: “cada decisión es individual, pero la persona que ya lleva un camino recorrido no debe lamentarse si decide cambiar de carrera, no es tiempo perdido, todo conocimiento es valioso”.
Es preferible un cambio a última hora que lamentaciones futuras, ya que una persona en promedio gasta 10 años de su vida trabajando. Un estudio de la agencia de trabajo Adecco Colombia reveló que el 65% de los colombianos no está conforme con la carrera que eligió. Betancur puntualizó que esto se debe a que la mayoría de estudiantes escogen su área de estudio de acuerdo a las oportunidades laborales (54%, según Adecco) y no a la vocación.
Eduardo Medina Torres en la conferencia ¿Cómo definir mi futuro profesional? Del Centro de Orientación Vocacional Personalizada (Ovao) afirmó que ninguna carrera asegura el éxito económico: “A pesar que el dinero es importante, no lo tendrás si estudias algo que no te gusta o que no te interesa, pues no serás un buen profesional”.