La victoria le había sido esquiva a Natalia Muñoz en la Vuelta a Colombia Femenina. En cada participación le salía un obstáculo que le impedía sumar un triunfo, pero este año fue el que cambió el rumbo y por fin pudo celebrar.
Es lógico celebrar un triunfo con alegría y euforia, pero para Natalia Muñoz fue algo mucho más especial. Desde hace varios años la corredora del equipo Flowerpack Montedias venía soñando con conseguir una victoria en la Vuelta a Colombia Femenina y después de serle tan esquivo pudo conseguirlo.
En una extraordinaria actuación, la experimentada ciclista Natalia Muñoz se quedó con el triunfo de la tercera etapa de la Vuelta a Colombia Femenina 2019, disputada entre la ciudad de Manizales y el municipio de Anserma, sobre un trazado de 124,4 kilómetros, una victoria trabajada y esperada en una carrera que mantiene como líder a la antioqueña Daniela Atehortúa (Avinal).
Natalia Muñoz lleva 15 años en el ciclismo, “que han sido muy intermitentes por mi labor de madre y porque siempre he trabajado, pero gracias a Dios he podido salir adelante”.
Del ciclismo se enamoró porque “me reta a ser mejor cada día, porque es muy difícil, tenemos que vencer muchas adversidades cada día, podemos ser libres en nuestra bicicleta, conocer lugares, ver paisajes y conocer gente”.
Inició en este un día que “monté en una bicicleta y quedé enamorada. Hasta el día de hoy he sentido muchas satisfacciones, es difícil por el tema del apoyo, hay muchas personas que aún no están de acuerdo con que las mujeres brindemos el mismo espectáculo de los hombres, pero yo sigo insistiendo en que las mujeres tenemos tanto potencial como lo tienen ellos, que podemos llegar a ser potencia en ciclismo femenino y por eso no me rindo y sigo luchando por lo que amo”, aseguró la deportista.
Natalia lleva 3 años buscando el triunfo en esta carrera y en diálogo con EL MUNDO contó que “desde que inició esta carrera, en el año 2016, estaba buscando este triunfo. Ese año nació mi hijo Jerónimo y no pude estar lista, en el año 2017 tuve una lesión en las rodillas, que todavía sigo arrastrándola un poco, el año pasado me enfermé y no pude tener una actuación destacada, pero por fin este año pude conseguir la anhelada victoria”.
“Conseguir triunfos como el de hoy, que fue tan soñado, tan luchado y que se consiguió después de mucho tiempo, es satisfactorio, porque demuestra que nunca es tarde y que luchando por alcanzar los sueños se pueden hacer realidad. Este año ha sido muy difícil para mí por el tema de apoyo y pensé que no iba a participar, pero lo pude hacer y hoy cumplo uno de mis sueños”, destacó.
Esta corredora de 34 años, mamá de Valentina, de 14 años, y de Jerónimo, de 3 años, nació en Andes, Antioquia, pero desde muy pequeña reside en el departamento de Risaralda, más exactamente en el municipio de Dosquebradas, por eso le favorecía esta fracción, pues conocía perfectamente el territorio.
“Este es mi lugar habitual de entrenamiento, casi todo el pueblo me conoce, por eso la barra en la llegada tuvo mucho que ver, sin duda, porque hubo un momento en el que pensé que se me agotaban las fuerzas, pero la barra y la gente golpeando las vallas me dieron la fuerza para rematar y lograr el triunfo”, expresó la corredora.
Sobre la exigente jornada y el cruzar la meta en primer lugar opinó que “desde el inicio veníamos buscando la etapa. En la segunda jornada estuve en una fuga, intentando y no se nos dio, en la tercera tuve suerte y se logró, aunque hubo un momento en el que pensé que no se iba a dar porque miré hacia atrás y vi el lote muy cerca, pero gracias a Dios se consiguió”.
Con este triunfo, que ella misma confesó verlo imposible en varias ocasiones, Natalia representa “esa mujer cabeza de hogar que no desfallece, a esa empoderada que lucha por sus sueños y le doy un mensaje a todas aquellas mujeres que quieren salir adelante y que creen que por su condición de madres no pueden hacer, sí se puede, nunca es tarde para comenzar. Hoy lo demuestro, cada día vivo una contrarreloj con mis hijos, entrenar, las cosas del hogar, pero Dios me ayuda y esta es una señal divina que me dice que voy por buen camino”.
La cuarta fracción de esta edición de la carrera 2.2 de mujeres en el país se disputará este viernes 6 de diciembre con una Contrarreloj Individual entre las localidades de La Virginia (Risaralda) y Viterbo (Caldas), sobre un trazado de 22,8 kilómetros.
Clasificación etapa 3
1. Natalia Muñoz (Flowerpack) ----- 3h:42:39
2. Aranza Villalón (Avinal) ---- a 02
3. Camila Valbuena (Evolución) ----- m.t.
4. Daniela Atehortúa (Avinal) ----- a 09
5. Jeniffer Medellín (Evolución) ----- a 10
6. Milena Fagua (Fundación Proyecta) ----- m.t.
7. Natalia Pardo (SuperGiros) ----- a 15
8. Xiomara Castro (Evolución) ----- a 19
9. Ana Cristina Sanabria (Selección Colombia) ----- a 22
10. Yeny Colmenares (Boyacá Raza de Campeones) ----- a 39
Clasificación general
1. Daniela Atehortúa (Avinal) ----- 10h:44:07
2. Natalia Muñoz (Flowerpack) ----- a 06
3. Aranza Villalón (Avinal) ----- a 09
4. Jeniffer Medellín (Evolución) ----- a 19
5. Camila Valbuena (Evolución) ----- a 21
6. Natalia Pardo (SuperGiros) ---- a 28
7. Milena Fagua (Fundación Proyecta) ----- a 54
8. Xiomara Castro (Evolución) ----- a 1:14
9. Yeny Colmenares (Boyacá Raza de Campeones) ----- a 1:18
10. Jessenia Meneses (Team Illuminate) ----- 1:50