Un nuevo ciclo para la pesista Leidy Solís
En 2017 Leidy Solís espera ganar los Juegos Bolivarianos, seguir con su título de campeona panamericana y hacer un excelente papel en el Mundial mayores en Estados Unidos.
Leidy Yesenia Solís fue una de las deportistas colombianas que dio de qué hablar durante el 2016. No sólo por sus logros deportivos durante el año sino por la tenacidad que demuestra al momento de afrontar las adversidades que se le presentan en la vida.
Esta temporada la pesista colombiana logró tres medallas de oro en el Campeonato Panamericano de la disciplina, en los Juegos de Río terminó su participación en la cuarta posición de la categoría de los 69 kilogramos, a muy poco del bronce, y se convirtió en medallista olímpica tras la descalificación de una rival que marcó positivo en los controles de dopaje de los Juegos Beijing 2008, resultado que le otorgó la anhelada presea de bronce.
Sin embargo, el inicio de esta temporada no fue nada fácil para la haltera vallecaucana. “Comencé el año sin competir. En noviembre del 2015 me diagnosticaron una hernia en el disco cinco de la columna. A partir de ese momento tuve que comenzar un proceso de recuperación muy complicado que se demoró aproximadamente seis meses. Sólo hasta junio de este año conseguí estar en mi cien por ciento y desde ahí inició mi temporada”, expresó la atleta quien terminó el año con grandes satisfacciones pues a pesar de tener altibajos “realicé un buen trabajo tanto en los Panamericanos de pesas como en los Olímpicos y aunque quería estar en el podio de Río, puedo decir que cumplí todas mis expectativas porque mejoré mis marcas”.
Sin duda el momento más difícil de 2016 fue perder la medalla de bronce olímpica por tan poca diferencia, “me desmoroné en ese momento, no entendía por qué tenía que pasar eso sí me había esforzado tanto para conseguirlo, pero después comprendí que a veces en la vida también se tiene que perder para aprender”, dijo Leidy quien cuatro meses después recibió su recompensa.
A mediados de este mes le fue confirmada la noticia de que era medallista olímpica tras decretar el dopaje de una de sus contrincantes en los Olímpicos de Beijing. “Esa medalla fue más un reconocimiento para todos los deportistas que trabajamos sanamente para obtener nuestros resultados. Definitivamente el tiempo de Dios es perfecto, pues después de ocho años recibo el mejor premio que he obtenido hasta ahora en mi ardua carrera deportiva”, concluyó la deportista cafetera quien ahora se prepara para iniciar un nuevo ciclo que sueña le conduzca a su gran anhelo de ser campeona olímpica.