Ya sabemos que nos tenemos que quedar quietos en casa. Pero no es quietos estilo estatua, ni mucho menos quietos en un sillón viendo lo que los demás hacen. El movimiento del cuerpo es lo que más nos va a ayudar en este tiempo de hogar. Y en el hogar hay muchas cosas por descubrir, cosas de las que nunca hemos tenido en cuenta, porque la dichosa rutina de todos los días no nos ha dejado ver la realidad.
-Vamos a empezar por darnos un “corrientazo”. ¿Han revisado alguna vez con lujo de detalles los aparatos eléctricos de casa? Cables, suiches, enchufes, extensiones, pilas, bombillos hacen parte del día a día y muchas veces un enchufe no funciona simplemente porque las paticas están demasiado cerradas o demasiado abiertas, lo cual impide que hagan buen contacto. Sepa cómo se manejan las cajas de los brackets ya que esta es la que reparte la energía a los distintos circuitos de la casa. Evite poner una puntilla cerca de los tomacorrientes, porque si toca un cable con una puntilla recibirá un choque eléctrico. Nunca instale cables eléctricos bajo las alfombras, si se mojan o si se pelan no lo va a anotar y puede causar un incendio. Hay que perderle el miedo a la electricidad, siempre hemos pensado que este tema es cuestión de un técnico o que el hombre de casa es el único que puede ayudar. Este es un buen tiempo de hogar para aprender juntos.
-Otro dolor de cabeza en casa o en el apartamento es la humedad y es un problema muy común que se puede presentar dentro o en los patios externos. Hay soluciones domésticas mientras se resuelve si es tema de impermeabilización o de enchape. Hoy día en cualquier supermercado puede conseguir productos a base de cloruro de calcio o esos cristales que absorben la humedad. Si tiene muebles o armarios que tiene que aislar de pared húmeda, algo efectivo son las láminas de icopor. Si tiene humedad en un empedrado y le está saliendo yerbas por los lados y quiere eliminarla del todo, lo primero arranque la yerba y pase una esponja mojada en vinagre y jabón, deje secar las piedras y rocíelas con sal. Santo remedio. Y si quieren eliminar el olor a humedad que es tan fastidioso, pongan un recipiente con harina de mostaza en la habitación o en el mueble en donde se ha concentrado el olor. Este es un tiempo perfecto para revisar los escaparates y closed de ropa para ver si hay humedad.
-El cuento de la humedad va muy unido al de la plomería. Unas góticas de agua pueden hacer un gran daño en casa y esa misma gótica nos puede inundar un día la casa y en estos días de “quédese en casa” no es fácil conseguir un plomero. Se nos pueden presentar cañerías ruidosas que nos despierten a media noche. Con tantos niños en casa puede pasar que un inodoro se tape, corra y busque la chupa. Cuidado con esos grifos que tienen fuga de agua, no puede forzar la llave o un grifo que gotea toda la noche y no se habían dado cuenta. Tengan cuidado que los niños no se pongan a jugar en los lavamanos y dejen objetos que se van por el desagüe. Tubos con escape, tanques de concreto que dejan filtrar el agua, sifones tapados… Respiren profundo los dos, calma, hay tiempo de aprender. Lo primero es tener conciencia en esta época de “cuidar” el agua, enseñarles a los niños que hay que bañarse en contados minutos. Sabemos que tenemos que lavarnos las manos con frecuencia, pero no hacerlo con la llave abierta. No se inunden de nervios.
Recuerden apagar el calentador.
-Un tema que nos toca aprender es el de limpiar los pomos de las puertas de todos los cuartos de la casa. Puede ser una tarea asignada a los niños con cada uno de sus dormitorios. Para esto tenga envases con un poquito de cloro más agua y con un pañito se pueden limpiar perfectamente. Pero tenga cuidado de advertir a los niños y jovencitos que no se pasen las manos por los ojos o el rostro.
-Así esté toda la familia reunida en casa, la seguridad es un tema que no se puede descuidar, nunca estamos seguros del todo. Las cortinas, las luces de casa, el teléfono y el sacar la mascota a su vueltecita de necesidades, son cosas que hay que revisar y poner en orden. No abrir la puerta sin averiguar quién es. Hay dos días de la semana en donde el cumplimiento de sacar la basura es infaltable. El tema de “basura” es otra disciplina de aprender a reciclar que hay que enseñarles a los niños. Papeles, residuos de comida, plásticos, todo debe depositarse en su lugar adecuado. De lo contrario vamos a tener insectos y moscas revoloteando impertinentemente. Por cierto… hay una planta que es el “paico” que años atrás las abuelitas la utilizaban para purgante, pues las hojas de paico tienen la virtud de espantar a las moscas, pero también las ramitas de lavanda y menta.
-No cuenten ni cuantos días llevamos, ni cuantos días nos faltan… simplemente cada día con buena salud es ya un tesoro de toda la familia.