El presidente estadounidense rechazó como noticias falsas un rumor sobre las tirantes relaciones que mantiene con los otros líderes del G7, especialmente Angela Merkel, Emmanuel Macron y Justin Trudeau.
El presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió este sábado en la Cumbre del G7 que se celebra en Canadá que Estados Unidos hará “lo que sea necesario” para que su país tenga relaciones comerciales “justas” con otros países.
Trump añadió que los días en que otros países se han aprovechado comercialmente de Estados Unidos “se acabaron”.
El presidente estadounidense mantuvo una rueda de prensa en la sede de la cumbre, en la localidad canadiense de La Malbaie, poco antes de que abandonara la reunión para dirigirse directamente hacia Singapur, donde este martes celebrará un encuentro con el líder norcoreano, Kim Jong-un.
Sobre ese encuentro, Trump afirmó que tardará sólo “un minuto” en saber si el líder norcoreano quiere negociar seriamente con Estados Unidos.
Preguntado sobre cómo lo sabrá tan rápidamente, Trump respondió que porque él es así, y aseguró que no perderá el tiempo con el líder norcoreano si cree que no está siendo honesto.
Sobre la materia comercial, que Trump admitió que se ha convertido en el principal tópico de discusión de la Cumbre del G7 en La Malbaie, insistió en que Estados Unidos está siendo tratado injustamente “por todo el mundo” y que va a acabar con esa situación.
Lea: Trump confirma su cumbre con Kim para el 12 de junio en Singapur
Trump amenazó con que Estados Unidos dejará de comerciar con aquellos países que mantengan aranceles a los exportaciones de su país, especialmente en el sector agrícola, y afirmó que ha lanzado la idea de eliminar “todos las barreras, todos los aranceles y todos los subsidios”.
Según Trump, “es muy injusto” para los agricultores estadounidenses que otros países como Canadá o India impongan elevadas tarifas a sus productos.
El líder estadounidense también volvió a repetir que sería bueno que Rusia se reincorporara al G7 y sostuvo que en la cumbre, “a algunos les ha gustado la idea”.
Trump afirmó que no ha hablado con Putin “desde hace tiempo” y justificó su propuesta porque la reincorporación de Moscú al grupo “sería bueno para el mundo, para Rusia, para Estados Unidos y para los países del G7”.
El mandatario no quiso entrar a discutir las razones por las que Rusia fue expulsada del grupo en 2014, concretamente la anexión del territorio ucraniano de Crimea, echó la culpa a su antecesor, Barack Obama, por “permitir” que ocurriese y aseveró que él habría hecho las cosas de manera “muy diferente”.
El presidente estadounidense razonó que la invasión y anexión había ocurrido “hace algún tiempo” y que el G8 (G7 más Rusia) “tiene más sentido” que el G7.