El Área Metropolitana ya procedió por la vía judicial a tramitar la expropiación de las fajas de terrenos que se requieren para avanzar en la construcción de la vía Regional Oriental Norte en Bello.
No es la falta de recursos, ni de diseños y tampoco de voluntad lo que se requiere para despejar el futuro de la principal obra metropolitana en el Valle de Aburrá, como es la vía Regional Oriental que unirá a Sabaneta con Bello.
La construcción de este crucial corredor vial está afectado por la postura de las empresas Interactuar, Incametal y Jorge Mario Uribe de no ceder los derechos de ley sobre los terrenos que necesita el Área Metropolitana para ejecutar los trabajos en el trayecto entre Uniminuto y la Planta de Tratamiento (Ptar) de Bello. Ante ello se procedió a tramitar la expropiación.
La revelación lo formuló el director de esa entidad Eugenio Prieto Soto tras ser consultado sobre la forma cómo marchan las grandes obras de infraestructura que adelantan para garantizar la conectividad metropolitana.
Durante sus tres años y medio en la dirección en el Área Metropolitana se metió de lleno a realizar una serie de grandes obras de infraestructura que le cambiarán la cara a la movilidad de todo el Valle de Aburrá. ¿Recordemos cuáles son?
En el sur estamos mejorando la vía Regional Oriental, concretamente la vía Distribuidora entre Mayorca y La Ayurá, de 4.2 kilómetros, de tres carriles y de 10.5 metros de ancho, que amplía la vía Regional a seis carriles con ocho metros de ciclocaminabilidad, con árboles a lado y lado.
En el sur también está el intercambio vial de Induamérica, en la glorieta de Pilsen. Y otra obra que será clave para toda la integración es el intercambio vial de La Ayurá, que descongestionará su homólogo de La Aguacatala.
Las obras para el norte del Aburrá comienzan en Medellín y concretamente desde el puente de la calle 77 o del Mico cerca a la Terminal de Transportes. Se amplía la 77 hasta el Jardín Botánico y se va por todo Carabobo, que será ampliada a tres carriles hasta llegar al intercambio vial de Acevedo, son más o menos ocho kilómetros, con ciclocaminabilidad.
A partir de allí arranca la fase dos de la Regional Oriental Norte, que es desde Uniminuto hasta la Ptar Aguas Claras en Bello, por todo el lado oriental del río y de unos cuatro kilómetros.
Allí se conecta con la fase tres que es el intercambio vial que ya estamos construyendo sobre el río, que se monta sobre la quebrada La Seca y que une la Regional Oriental con la doble calzada Bello – Hatillo.
Y hay una fase cuatro, que es pequeña y es para descongestionar a Copacabana.
¿Entonces estamos hablando para todos estos proyectos de mucha plata?
De más o menos 700.000 millones de pesos. De 100.000 que nos vale la fase uno en Medellín, de 300.000 que son las vías de las fases dos, tres y cuatro en el Norte y 300.000 que nos valen las obras del sur.
¿Qué se busca con todo esto, el área metropolitana estaba atrasada en estas obras y para cuándo estarán listas si no hay líos?
No estamos inventando nada, estas obras están pensadas desde hace mucho rato, pero no se habían diseñado.
Parte del problema cuando uno llega a una gestión pública, o un alcalde o un gobernador es no encontrar diseños.
Yo propuse cuando fui congresista y durante la conciliación de la ley de las APP (asociaciones público privadas) que los territorios hicieran unos inventarios de proyectos de interés público, para que se volvieran un acuerdo de la sociedad y los empresarios comenzaran a hacer diseños de esas obras y a promover las concesiones o las APP.
Que los gobernantes cuando lleguen encuentren proyectos diseñados, para ejecutarlos desde que se inicien sus gestiones, obviamente de acuerdo con los programas de gobierno que vote la ciudadanía y con los planes de gobierno que aprueben los concejos.
El problema ahora es que los nuevos gobernantes o ejecutores no encuentran diseños.
¿Todas estas realizaciones estaban frenadas?
La vía Regional por el lado oriental del Río está pensada desde hace unos 50 años y lo único que se había hecho en el sur es la vía Regional y los cinco kilómetros que tiene Medellín entre La Ayurá, en los límites con Envigado, hasta la calle 30, que es la vía Distribuidora. Nosotros allí estamos haciendo 4.2 kilómetros.
En el Norte y quien quiera ir a Bello, Copacabana, Girardota, Barbosa, al Nordeste, Magdalena Medio o al norte del país, tiene que irse por el lado occidental del Río. Entonces todo lo que se está ejecutando en el Aburrá Norte permitirá descongestionar todo el lado occidental del río y a la glorieta de Niquía que se mantiene demasiado congestionada. También recogerá la mayor parte del tráfico de sur a norte, pero la concesión vial ya tiene planeado en el diseño que quedará hecho, coger un lazo que recoja el tráfico que viene del norte al sur y lo lleve a la Regional Occidental sin necesidad de ingresar a la glorieta de Niquía, la cual al final de estas obras quedará sólo para el servicio de Bello.
¿Para cuándo estarán listas todas estas obras en caso que no haya problemas?
Las obras están completamente financiadas con recursos del Área Metropolitana. En el norte el Gobierno Departamental concedente con el Área Metropolitana nos acompaña y la concesión vial hace un aporte importante de unos ingresos futuros de 2020 y 2021 vía peajes, que los trae a valor presente, hacemos un crédito con el Idea y está aportando un poco más de 100.000 millones de pesos.
Los municipios aportan la parte de predios y el Área Metropolitana aporta los otros recursos que son de buena cuantía, pero la Junta Metropolitana nos autorizó ampliar la capacidad presupuestal con apalancamiento financiero y Findeter nos está financiando gran parte de estas obras, además de vigencias futuras porque unas obras las entregaremos a finales del año, pero la gran mayoría en el 2020 y en el 2021.
Obra por obra. ¿Cómo va la vía Distribuidora en el sur?
Tuvimos unos problemas más o menos hace un mes con unas redes de alcantarillado, ya se solucionó con Integral que eran los diseñadores y con EPM que nos ha acompañado en todos estos procesos.
Ya están colocando capa asfáltica en muchos tramos y lo que pedimos es que el tramo que vamos a entregar entre Viva Envigado y La Ayurá también entre en servicio con ciclocaminabilidad.
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¿Pero cuál es el problema que existe en jurisdicción de Sabaneta?
La obra está completamente diseñada desde la entrada a Ancón Sur hasta La Ayurá, que son unos siete kilómetros. Y los dos kilómetros que nos quedan faltando se deben a problemas prediales en Sabaneta, porque hay unas empresas que tienen allí sus procesos productivos y como hay que trasladar las plantas, entonces se nos va a demorar un tiempo mayor, pero el municipio de Sabaneta le está trabajando al asunto que en concreto es un tramo de 2.5 kilómetros, pero quedan los diseños y las futuras administraciones del Área asumen el compromiso de construirlo.
Hablemos del puente de Induamérica. ¿Qué hay de nuevo?
Era una obra muy compleja de hacer por la gran urbanización del sector con vivienda, edificios y centros comerciales. Pero el alcalde se comprometió a hacer unos aportes importantes en el tema de prediación, en lo que ya se ha avanzado en un 95%, ya se iniciaron demoliciones y la adjudicación de esta obra se hace el 25 de julio.
¿Comenzaron a construir el intercambio de La Ayurá?
Ya comenzamos, están instalando los campamentos en la Ptar de San Fernando, pues se comenzará del lado occidental del río. Pero el anuncio del comienzo de obra lo hicimos por el lado de Envigado, porque era muy importante que este municipio hiciera parte del Área Metropolitana para hacer este intercambio.
¿Qué se ha hecho para darle vía libre a la Regional Oriental en el sector norte de Medellín?
Ya se tiene el convenio entre Medellín y el Área para la construcción de un trayecto de ocho kilómetros entre el Jardín Botánico y Acevedo por todo Carabobo.
Al municipio le corresponde enfrentar la protección de moradores en el tramo de Carabobo y se está dando garantías con la política pública en esta área. Medellín entregará la licitación de este trayecto que se hará en dos o tres tramos y ya los recursos están listos.
¿Y qué tal les ha ido de Uniminuto a la Ptar, ya en jurisdicción de Bello?
Hemos tenido dificultades porque hay unos conflictos jurídicos que tienen unas empresas y unas organizaciones entre sí. Cuando se canalizó el río había allí unos meandros y entre ellos se están reclamando la parte de un predio.
Nosotros les mostramos a ellos la norma nacional para obra de infraestructura de transporte, en lo que la Corte Constitucional ha sido reiterativa en esas prioridades.
Hicimos el trabajo de acuerdo al POT de Bello, que dice que esa vía es obligada para los que están instalados en las vías Regional, la Distribuidora y la de Servicio.
Hicimos las propuestas del Área Metropolitana con los avalúos. Hemos encontrado receptividad, debo reconocerlo, de empresas como Argos y TCC que nos dieron el permiso de intervención.
¿Pero cuáles empresas han puesto problema?
Nos faltan unas empresas. Estamos trabajando con el ICA que ya nos dio la cesión anticipada del predio y nos faltan Interactuar, Incametal y otra que se llama Jorge Mario Uribe.
Con todas hemos conversado, pero le hemos dicho con respeto que esta es una obra que lleva más de 50 años pensada, que es una vía que la va a servir a Bello, al Aburrá Norte y a todo el país.
Le hemos recalcado que esta es una obra de impacto nacional y regional y por eso nosotros estamos procediendo con el proceso de expropiación de acuerdo con lo que nos permite la ley.
Hemos buscado hacer los acuerdos con toda la disposición, pero también les dijimos a ellos con respeto que no íbamos a frenar, con los que nos diera la posibilidad jurídica, y esa posibilidad es que la obra hay que hacerla y por eso ya procedimos a instaurar los trámites de expropiación.
¿Y están construyendo ya el puente de la Ptar de Bello?
Se llamará el puente de La Seca que caerá a la doble calzada Bello – Hatillo. Esta obra cuenta con recursos de la concesión vial Aburrá – Norte, que aporta más de 100.000 millones de pesos, obra que ya está contratada.