El inicio de la evacuación de los asentamientos en Amoná, construida en tierra palestina, dejó a 20 agentes heridos y trece personas detenidas a pesar de un fallo del Tribunal Supremo en contra de la reubicación.
Israel inició ayer la evacuación forzosa de la colonia judía de Amoná, en Cisjordania, en cumplimiento de una orden del Tribunal Supremo, que volvió a dar la espalda al Ejecutivo de Benjamín Netanyahu al revocar su plan de reubicación de los evacuados en unas tierras aledañas palestinas.
El Supremo falló ayer mismo en contra del plan de reubicación propuesto por el Gobierno israelí por tratarse también de tierras privadas, argumento que planteó en la orden judicial para la evacuación de Amoná.
El plan fue la última propuesta del primer ministro Benjamín Netanyahu para reconciliarse con los colonos después de haber intentado detener una evacuación que lleva años de litigios y aplazamientos, el último solicitado por el Ejecutivo en diciembre para llevar a cabo este plan.
El polémico traslado quedó por ahora abortado después de que la ONG israelí Yesh Din presentara una demanda en representación de palestinos que reivindican la propiedad de los terrenos donde se pretendía recolocar a varias de las familias colonas.
“Esta tierra es sólo para los judíos y para nadie más, no nos vamos a rendir, vamos a seguir aquí”, dijo Eliza Ofán, una joven de la colonia cercana de Ofrá que acudió a Amoná para mostrar su apoyo.
Como ella, cientos de israelíes llegaron al asentamiento para poner resistencia a las fuerzas de seguridad, levantando barricadas y encendiendo hogueras.
Sobre las 10:30 a.m. (8:30 GMT), 3.000 policías llegaron al perímetro de la colonia pero fueron recibidos a pedradas.
La evacuación alcanzó su momento más tenso cuando los agentes, seguidos de una excavadora, se desplegaron por las calles y se toparon con jóvenes encadenados para impedirles el paso, lo que terminó en un forcejeo cuerpo a cuerpo.
“No está siendo una evacuación pacífica. Arrojaron piedras, líquido abrasivo y hay policías heridos”, declaró el portavoz policial Micky Rosenfeld, quien informó que 24 policías habían sido heridos de carácter leve.
En total, trece jóvenes fueron arrestados por desórdenes y por interferir en el trabajo policial y 400 personas fueron alejadas del lugar.
La jornada continuó durante la tarde con un total de 22 familias desalojadas y 28 viviendas clausuradas y, según el portavoz policial, seguirá hoy hasta la demolición de los habitáculos móviles en los que vivían los colonos desde 1996.
A modo de compensación a la derecha más nacionalista, Netanyahu y el titular de Defensa, Avigdor Lieberman, aprobaron horas antes del inicio de la evacuación 3.000 nuevas viviendas en colonias del territorio palestino ocupado de Cisjordania, que se suman a las 2.500 casas autorizadas la semana pasada.
Junto a las 566 aprobadas en Jerusalén Este la misma semana, el Gobierno israelí relanza así su política de colonización con motivo de la llegada de Donald Trump a la presidencia de EEUU.
La comunidad internacional condena la edificación por parte de Israel en todos estos territorios ocupados desde 1967 y la resolución 2334, aprobada el 23 de diciembre de 2016 por el Consejo de Seguridad de la ONU, instó a paralizar esta actividad.