Hace una semana el tenista colombiano Juan Sebastián Gómez sintió y vivió un resurgir en su carrera deportiva. Consiguió su primer título en el ámbito profesional, tras quedar campeón del Futuro de la ciudad de Pereira.
Y ayer en el Circuito Celsia Profesional que se juega en Medellín, siguió demostrando que pasa por uno de los mejores momentos de su carrera, tras ganarle al argentino Gregorio Cordonier, con parciales 6-3 y 6-2 en la segunda ronda de este certamen deportivo.
¿Pero por qué el resurgir? Porque han pasado seis largos años desde el momento en el que el deportista bogotano consiguió la medalla de oro en la primera edición de los Juegos Olímpicos de la Juventud, Singapur 2010. Un triunfo que lo llevó al primer lugar del ranking mundial juvenil y a ocupar las primeras planas de todos los medios. “Fue un año de muchas emociones y alegrías. Sin duda el mejor de mi vida. Comencé el año en el puesto 223 del ranking de la ITF y el 23 de agosto del mismo era número uno del mundo en la categoría juvenil. Algo que nunca olvidaré”, expresó el atleta.
Sin embargo, después de haber tocado la gloria, llegaron los tropiezos. En el año 2011 sufrió esguince de tobillo izquierdo, tendinitis de muñeca izquierda y bursitis de hombro derecho, lesiones que no le permitieron dar su cien por ciento y que lo alejaron en varias ocasiones de las canchas. 
“Fue el momento más duro de mi carrera deportiva, empecé a perder la confianza en mí pues veía cómo algunos de los compañeros a los que alguna vez vencí, comenzaban a jugar Grand Slams y enfrentarse a jugadores como Federer y Nadal, mientras yo me recuperaba”, recordó Gómez quien a pesar de los traspiés siente que gracias a la ayuda de su familia y su entrenador pudo salir adelante.   
Hoy, después de superar tantos obstáculos en su carrera, en compañía de su entrenador Cristian Borges, empieza a encontrar luz al final del túnel, viene mejorando día a día y es más consciente de lo que se necesita para subir de nivel, eso sí, nunca dejando a un lado su pensamiento: “De qué sirve tener el éxito exterior si no lo tienes interior” concluyó.