El sistema financiero del país continúa manteniendo indicadores sólidos de solvencia y liquidez, pese a factores como la desaceleración de la economía y la materialización del riesgo de crédito en algunos sectores económicos.
El Banco de la República informó a través del reporte de Estabilidad Financiera del segundo semestre de 2017, que con corte al primer semestre del año en curso, los establecimientos de crédito mantienen indicadores sólidos de solvencia y liquidez, pese a factores como la desaceleración económica observada desde 2014. Lo anterior, en un contexto donde el volumen del crédito registra un crecimiento bajo, acompañado por una menor rentabilidad de las entidades.
Como es usual en un ambiente de crecimiento económico relativamente bajo, la estabilidad financiera enfrenta riesgos que es necesario monitorear y mitigar. Al respecto, el Emisor considera que las principales vulnerabilidades para la estabilidad del sistema financiero están asociadas con el riesgo de una desaceleración económica más acentuada o una recuperación más débil que la esperada en lo que resta de 2017 y 2018. Como se ha venido señalando en los informes sobre inflación, un escenario de debilidad económica podría ser plausible en el caso de una menor confianza de las firmas o los hogares, un crecimiento económico de los socios comerciales más débil que el proyectado o incrementos súbitos y no anticipados en el costo del financiamiento externo.
Si se materializara tal escenario, la estabilidad financiera podría verse afectada principalmente por medio del riesgo de crédito. Esto adquiere relevancia en la medida en que desde 2015 se han observado deterioros en los indicadores de calidad de cartera por riesgo y por mora de la deuda de los hogares colombianos (tanto de consumo como de vivienda), acompañados por aumentos en las medidas de carga financiera.
Por su parte, durante lo corrido de 2017 se han registrado deterioros rápidos en los indicadores de calidad de la deuda del sector corporativo colombiano. Si bien estos últimos han correspondido principalmente a eventos asociados con un conjunto específico de firmas, en sectores económicos como el de la construcción el deterioro ha sido relativamente general, de manera consistente con la desaceleración económica reciente.
Con el fin de adoptar un enfoque prospectivo de cara a estas vulnerabilidades, este reporte presenta un ejercicio de sensibilidad que evalúa la resiliencia de los establecimientos de crédito ante un escenario hipotético extremo que supone una desaceleración profunda de la economía colombiana durante lo que resta de 2017 y que seguiría en todo 2018. Los resultados indican que en este escenario hipotético se observarían importantes efectos negativos sobre el volumen de la cartera, su calidad y la rentabilidad del negocio de intermediación. Al mismo tiempo, en el escenario no habrían efectos negativos sobre la solvencia total de los establecimientos.
En lo relativo al riesgo de mercado, tanto el mercado de renta fija como el de renta variable han presentado valorizaciones durante lo corrido del año. En este caso, las vulnerabilidades provenientes de una débil recuperación económica podrían manifestarse en eventuales desvalorizaciones en los mercados de renta fija. En materia de fondeo, si bien el indicador de riesgo de liquidez (IRL) sugiere que los establecimientos cuentan con niveles suficientes de recursos líquidos para cumplir con sus obligaciones de corto plazo, se observa un débil crecimiento de las fuentes de financiamiento tradicional (depósitos de ahorro y a término) que podría profundizarse en un escenario de mayor desaceleración económica.
En relación con las Instituciones Financieras No Bancarias (Ifnb), durante este año se continuó observando un crecimiento relativamente rápido del tamaño de sus portafolios tanto en posición propia como administrados, acompañado por una mayor rentabilidad. Lo anterior es consecuencia de la mayor exposición de estas entidades a los mercados de renta fija y variable, los cuales han presentado un comportamiento reciente más favorable que los mercados de crédito.
El análisis de las vulnerabilidades presentado en este reporte llama a los participantes en los mercados financieros a cerciorarse de que los riesgos a los que se encuentran expuestos se evalúen y administren apropiada y prudentemente.
El Banco de la República, en cumplimiento de sus objetivos constitucionales, continuará monitoreando de cerca la evolución de la situación de las entidades financieras y buscará tomar aquellas decisiones que garanticen un retorno oportuno a las sendas de inflación y crecimiento consistentes con la estabilidad macroeconómica y el desarrollo económico de largo plazo. Ello contribuirá a mitigar los potenciales efectos negativos de las vulnerabilidades aquí identificadas sobre la estabilidad financiera de la economía.