Durante esta segunda temporada de lluvias las autoridades recomiendan estar atentos ante la presencia de animales venenosos y ponzoñosos, como serpientes, alacranes, arañas, abejas, avispas y orugas, entre otros, es la mejor forma de prevenir un accidente que puede afectar la vida humana.

Alberto Aristizábal Ocampo, director de Factores de Riesgo de la Secretaría Seccional de Salud y Protección Social de Antioquia, explicó que estos accidentes son un problema de alto impacto en salud pública y que por este motivo, se les recuerda a las instituciones prestadoras de los servicios de salud públicas y privadas, a las direcciones locales de salud, a las Empresas Promotoras de Salud –EPS- del Régimen Subsidiado y Contributivo, y a las Administradoras de Riesgos Profesionales, la necesidad de dar un manejo y tratamiento oportuno de los pacientes que sufran accidentes con animales ponzoñosos o venenosos.

De acuerdo con la información suministrada por el funcionario, estos accidentes se reportan de manera recurrente en Urabá, Nordeste, Bajo Cauca y Suroeste. El sistema de Vigilancia en Salud Pública evidenció en el 2016, 778 eventos por accidente ofídico, con seis muertos reportados en los municipios de Amalfi, Necoclí, Remedios, San Luis y Valdivia.  En el municipio de Andes se presentó la muerte de una niña por accidente con serpiente coral.

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Con respecto a los accidentes ocurridos con alacranes, Aristizábal Ocampo, explicó que anualmente se presentan entre 150 y 200 casos, y las personas más afectadas usualmente son los niños y las mujeres.  Durante el transcurso del año han fallecido dos niños en los municipios de Caucasia y Dabeiba, como consecuencia de accidentes con este animal ponzoñoso.

Por eso, la recomendación de la Secretaría Seccional de Salud de Antioquia, es que las entidades territoriales deben verificar la existencia de sueros para el manejo del envenenamiento, en las instituciones de salud de su área de influencia.

El director de Factores de Riesgo les recomienda a las personas que puedan resultar afectadas con una eventualidad de este tipo, que recurran de inmediato a la red hospitalaria para que reciban pronta atención.

Recordó el funcionario que el agua no es el hábitat natural de los animales ponzoñosos y venenosos y durante las inundaciones provocadas por las lluvias, buscan lugares secos que los acercan a los seres humanos, generando accidentes que ponen en riesgo la vida de las personas.