El proyecto de ley propone a los pequeños cultivadores de coca vincularse al Programa Nacional de Sustitución de Cultivos Ilícitos y suscribir un compromiso en el que renuncien a seguir sembrando o a mantener estas plantaciones.
El presidente Juan Manuel Santos salió este jueves en defensa del proyecto de ley que el ministro de Justicia, Enrique Gil Botero, radicó en el Congreso de la República y que contempla medidas para que los pequeños cultivadores de coca se acojan a programas de sustitución y no sean judicializados.
El jefe de Estado pidió darle la oportunidad a Colombia de encontrar, por primera vez y gracias al proceso de paz, una solución estructural y de largo plazo a los cultivos de hoja de coca en el país.
Por ello, precisó que dicha iniciativa solo beneficia por una sola vez a los pequeños campesinos que declaren que erradicarán el cultivo, para lo cual tienen un plazo de 45 días. Además, dispondrán de un año para acogerse a los programas de sustitución de cultivos ilícitos.
Santos también explicó que, según el proyecto, los beneficios no se aplicarán retroactivamente y que los campesinos deben comprometerse a no reincidir.
De acuerdo con el presidente, la iniciativa cobijaría a más de 100.000 pequeños cultivadores que hasta ahora solo tuvieron en el cultivo de hoja de coca una opción para alimentar a sus familias y que están deseosos de hacer el tránsito a la legalidad.
“No creo que ningún colombiano quiera ver a estos campesinos, que en el fondo han sido explotados por las mafias del narcotráfico y que hoy solo quieren una oportunidad, en la cárcel”, aseveró el mandatario.
Por último, cabe destacar que este proyecto hace una diferenciación cualitativa y cuantitativa en la medida en que busca perseguir a las organizaciones criminales que han generado problemas macro, algo que no corresponde a los pequeños cultivadores, por lo cual el Gobierno no quiere que se sancione el eslabón más débil de la gran empresa del narcotráfico.