Existe una organización no gubernamental muy importante en los temas de formación e intervención barrial en Medellín llamada Sin Fronteras, su trabajo además de operar temas de educación regular y de primera infancia, es intervenir las realidades de los territorios más desprotegidos de la ciudad, a los que con dificultad los responsables de las carteras de educación o participación ciudadana van. Poco más de 20 años lleva esta entidad, siendo el paño de lágrimas de las comunidades y entregando un panorama esperanzador para cada colonia, para cada barrio en el que ha hecho presencia.

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La problemática de la inmigración en Suramérica a causa del inconveniente político de Venezuela, aunado al conflicto armado interno que se vive en Colombia, ha llevado a esta organización a pensar en hacer un gran evento para explicarle al mundo entero que las ciudades de frontera son espacios de mucha fragilidad, que hay que apoyarlos y acompañarlos, de lo contrario, el equilibrio social y económico de los países se desbalancea. El Presidente de Sin Fronteras, Carlos Andrés Pérez Díaz, con un palmarés importante en temas públicos, además de su experiencia académica, se desplazó a la ciudad fronteriza de Cúcuta, para adelantar reuniones con cada uno de los alcaldes del área metropolitana, la cancillería y algunas organizaciones y empresas para lanzar la Red Mundial de Ciudades de Frontera. Será el evento más importante que se haga en esa línea en el planeta, además de crear un escenario para que las ciudades conversen y se articulen, los observatorios de las economías de frontera dinamizarán las políticas publicas que se emitan en estos territorios y entregaran elementos objetivos a los dirigentes para poder convivir en armonía, independientemente de los esquemas de gobierno de cada país, de las monedas, de los partidos políticos.

Las necesidades de los seres humanos están por encima de todo formalismo; comer, estudiar, tener asistencia medica, entre otros, tiene que estar contemplado para entregarse al que lo requiera, pero cuando hay una avalancha de inmigrantes que en forma desmedida pasan de un lugar a otro, se desestabilizan las economías y las situaciones de orden público empiezan a complicarse, ya en ese punto nadie responde por eso. Ni el país que hospeda tiene con que, ni el país en crisis está interesado, generando un problema humanitario de proporciones imposibles de controlar. En todas las latitudes tenemos centenares de ejemplos de este tipo y que se socialicen las formas como se atendieron y las complicaciones a las que se tuvieron que enfrentar para estabilizarse es una excelente estrategia. Trabajar por la implementación de los objetivos de desarrollo sostenible en estos municipios, subrayar la importancia de hacer parte de esta gran red y buscar soluciones consensuadas son parte de la misión que tiene esta iniciativa, así que bienvenida esta red mundial de ciudades de frontera, los articularemos con mucho entusiasmo a nuestra red de ciudades por la construcción de ciudadanía y apoyaremos su trabajo con mucho compromiso. ¡En hora buena!, un ejemplo de acción y no de intención, un indicador más que es posible todos los días construir #CiudadaníaAntesQueCiudad desde nuestro que hacer.

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