Guía para la correcta expresión en lengua española.
1. Advirtió de que….
Leo esta información: “…la ONG advirtió de que ‘hay casos en que usuarios de la aplicación Pokémon Go …. “.
Aquí está el tan difundido error del dequeísmo; es el uso innecesario de la preposición o conector DE, delante del relativo QUE, el mayor y el más frecuente error que se comete en todas las esferas del saber y de la sociedad; de la cultura y de la educación.
Existe una forma simple para evitar el “dequeísmo”: Al formular la expresión y emplear el DE, convertirla en pregunta y ver si ese DE es necesario, ejemplo: ¿Qué advirtió la ONG? (NO: advirtió de que…) Y respondemos: nos advirtió QUE hay casos en que…
El DE no es necesario ni en la pregunta ni en la respuesta, por tanto, usar la preposición DE sin necesidad es el error llamado dequeísmo.
Con muy escasos verbos es necesaria dicha preposición, ejemplos: Estás convencido de que te quiere. - Acordarse de que los amigos nos necesitan. - Me doy cuenta de que no he leído el último libro. - Estás segura de que vendrá temprano, etc.
Al convertir estas expresiones en preguntas, veremos que es necesaria la preposición DE, delante de QUE. (De qué estás convencido…, de qué debemos recordarnos…, de qué me doy cuenta…. De qué estás segura…
a) Oraciones pasivas. En estas, el SE va delante de un verbo en tercera persona, o del singular o del plural, ejemplos: Se vende casa de campo / Se venden casas de campo. No está expreso el sujeto. Se buscan actores para la película. Se hacen fotocopias. Se produjeron irregularidades en el trabajo. Se reanudan los talleres de escritura. Se agotaron todos los ejemplares de la primera edición. (En estas oraciones se intuye el sujeto: alguien vende; alguien busca; alguien produjo irregularidades; por qué se agotaron los ejemplares).
En algunas formas de expresión, cuando se refieren a personas, es norma gramatical el empleo de la preposición A, ejemplos: Se entrevistó A los candidatos. Se les niega A los niños su derecho a soñar. No se les cree mucho A los mandatarios. Se busca A quienes presenciaron el asesinato.
b) Oraciones impersonales. Se llaman así por carecer de sujeto gramatical, y en ellas, la forma SE, precede siempre a un verbo en tercera persona del singular; en ellas no se sabe quién realiza la acción, quién es el sujeto; ejemplo: Se trabaja mejor en equipo. Se afirma que los colombianos no leemos. Se dice que es poeta. Se comenta que Colombia está cayendo en un caos. Se comprobó que cuanto nos dicen es mentira.
3. Empleo especial de tildes
En las formas verbales compuestas con pronombres átonos no hay tilde: deme, estate, miralo, decime, etc. .
Las formas verbales seguidas de pronombres átonos (me, te, lo, la, los, las, le, les, se, nos, os) se escriben y se pronuncian como una sola palabra. Desde la ortografía académica de 1999, estas palabras se someten como las demás a las reglas de acentuación del español, sin constituir ninguna excepción. Así, formas como: estate, deme, arrepintiose, se deben escribir sin tilde por ser palabras llanas terminadas en vocal; formas como riéndonos, míralas, cállate o decídselo se escriben con tilde por ser esdrújulas; oídle, subíos, sonríete, llevan tilde por contener hiatos.
Los hiatos son separaciones de diptongos, mediante la tilde, formados de una vocal cerrada tónica y una vocal abierta átona, (o a la inversa).
4. Formas del “voseo” (uso del pronombre “vos”)
Las formas de segunda persona gramatical, características del voseo deben someterse a las reglas de acentuación del español, tanto si se utilizan seguidas de pronombres como si no. Si estas formas se usan con el pronombre separado, llevan tilde por tratarse de palabras agudas acabadas en vocal, ejemplos: contá vos, pensá bien, mirá esa ventana, bebé vos, salí vos primero. Si se les añade el pronombre, dejan de escribirse con tilde por convertirse en palabras llanas acabadas en vocal o en S, ejemplos: contame, pensalo, miralo, salite; (pronunciadas con el acento en la vocal antes del pronombre (contAme, pensAlo, etc.). Pero, si se les añaden dos pronombres, es necesaria la tilde por convertirse en palabras esdrújulas, ejemplos: contámela bien, pensátelo antes de decidirte, bebételo todo.