Le agradecemos a Sigrid, el haber traducido al danés la carta ganadora del concurso LA MAS BELLA CARTA DE AMOR, y haberla hecho circular en Copenhague donde Jorge Holguín vivió y trabajó
Este recuerdo de Jorge Holguin Uribe y de su vida en Dinamarca, lo envío ahora en su aniversario para que lo recordemos y lo podamos conocer más en Colombia: www.jorgeholguin.com.
Así que rememorando este mes de su partida hacia un mundo mejor, sugerimos abrir la Pág. Web mencionada y leer en CARTAS, las que aparecen bajo el título POST MORTEM.
Allí sale una de Runa Damsager, pastora del Hospital de Hvidovre, cerca de Copenhague, donde él estuvo y nos recuerdan. Allí estábamos con él, su amiga K., su hermana y su madre, cuando él murió.
En aquella época en que no había celulares ni nada por estilo, dejamos como recuerdo un teléfono inalámbrico portátil que se pudiera llevar a las habitaciones de los enfermos. El aislamiento era terrible. Eso sí, circulaban inagotables cartas y fotos.
Ahora la Pastora Runa Damsager acaba de escribir que su maravillosa hija Sigrid Damsager, que vivió en Colombia y aprendió español, ha tenido su primer bebé.
Le agradecemos a Sigrid, el haber traducido al danés la carta ganadora del concurso LA MAS BELLA CARTA DE AMOR, y haberla hecho circular en Copenhague donde Jorge Holguín vivió y trabajó durante sus últimos años.
La pastora sugiere releer esa “CARTA A DIOS EN LA MUERTE DE MI HIJO”, que ganó el Primer Premio a la Más Bella Carta de Amor en el 2008.
Los que tengan tiempo y paciencia podrán abrir la mencionada Pág. www.jorgeholguin.com y leer allí en CARTAS: Brev til Gud (Carta a Dios).
Verán también lo que es un hospital inteligente y acogedor, en ese civilizado, educado e igualitario país. Allá se aprenden muchas cosas. No hay mendigos en los semáforos, ni muchachos cuidando carros. Hay cantantes y músicos en las calles peatonales.
Hay lugares donde se puede vivir a lo hippie sin servicios y sin pagar impuestos, lugares como un gran parque por donde pasa una quebradita, y hay ranchitos en plena capital frente al mar.
Un colombiano jardinero, casado con danesa, se quedó sin trabajo, el gobierno le pasó pensión y le dio trabajo provisional como cuidador de parques. Su inteligente esposa sin brazos trabajaba como dactilógrafa con sus cortas manos. Le agradezco la traducción de los libros de mi hijo al danés. Están en su Página.
Si Ud. va a cruzar una calle y mira para los lados, la gente se reirá. Todos los carros paran al llegar a cada esquina.
Si Ud. quiere dar una fiesta en su casa, prepárese, como se consume bastante licor, dizque para combatir la timidez, todos los invitados dormirán en sus alfombras y sofás. Ah y aliste el baño.
¿Quiere mercar algo un sábado o un domingo? Busque alguno de los kioscos que ponen los inmigrantes turcos, mercados normales abiertos no encontrará.
¿Piensa sentarse a ver TV? Creo le gustarán los programas de la única TV Nal. Y recuerde que ésta sólo trabaja de 5 pm hasta media noche, para que la gente duerma, y trabaje. Varias obras de Jorge Holguín pasaron por ella.
Si usted visita amigos daneses, no se sorprenda de que no tengan adornos ni antigüedades en la casa. Pues allá los impuestos se pagan así: un encargado visita las casas y avalúa lo que hay, según lo que se tenga, se debe pagar el impuesto. La mayor parte de la gente recoge sus bellas antigüedades y las vende donde un anticuario. Si usted es turista podrá comprar allí cosas que no había imaginado existieran aún.
Lo que no es recibido por el anticuario se pone en una mesita sobre la acera, Ud. se acerca educadamente, toma lo que le gusta y da las gracias.
Pocas construcciones nuevas existen y nadie puede tener más de una casa o apto. Pueden alquilar cuando se van a trabajar a otro país, frecuentemente al África, como cuenta la escritora Sigrid Undset en su Obra “Africa".
Personajes importantes: Hamlet, año 1.200, el príncipe sobre el cuál escribió Shakespeare hacia 1.600, de donde sale la famosa frase: SER O NO SER, ESA ES LA CUESTIÓN.
Los astrónomos Tycho Brae y Copérnico son daneses. El famoso cuentista Christian Andersen y el filósofo existencialista Soren Kierkegaard.