Otros 3.000 migrantes venezolanos están en lista de espera para retornar a su país bajo la estrategia Corredor Humanitario que lidera la Secretaría de Inclusión Social de Medellín.
Engañados otra vez por personas inescrupulosas, que con falsos mensajes en redes sociales les prometen lo que no pueden cumplir sólo con el propósito de sacarles lo poco que tienen en sus bolsillos, por lo menos 1.000 venezolanos permanecen amontonados en los alrededores de la Terminal Norte de Transporte de Medellín, exigiéndole a la Administración Municipal que los envíe de inmediato a Cúcuta para retornar a su país, situación que va en contravía de los protocolos establecidos por las autoridades y de los esfuerzos que se están haciendo desde la Alcaldía para garantizar que los viajes humanitarios desde la capital antioqueña se realicen bajo estrictas medidas de seguridad y salubridad, a fin de que los migrantes puedan llegar en las mejores condiciones posibles junto a sus familias en el vecino país.
De hecho, los ciudadanos venezolanos que desean regresar a su tierra deben inscribirse primero en una lista de espera que la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos de Medellín, en articulación con Migración Colombia, las secretarías de Movilidad y Salud de Medellín, la Policía Nacional y la Policía de Carreteras, acompañan bajo la estrategia de un Corredor Humanitario para el desplazamiento de quienes esperan regresar voluntariamente a su país.
Lea: Falsa noticia provoca aglomeración de venezolanos en La Alpujarra
Por lo tanto, no es que de un momento a otro, y bajo presiones, las autoridades tengan que aceptar las exigencias de quienes se ven acosados en medio de las necesidades y la desesperación por la situación económica, social o familiar que les ha ocasionado la pandemia de la covid-19.
Algunos de los ciudadanos venezolanos que permanecen junto a la Terminal, y a quienes se han ido sumando connacionales desde distintas subregiones del departamento de Antioquia, aceptaron una falsa oferta que les llegó por redes sociales en la que les garantizaban un viaje rápido y seguro, pero una vez allí quedaron a la deriva.
Ante esa situación, desde la Secretaría de Inclusión Social se lideró un proceso de censo y caracterización de esa población, y se les ofreció albergue y alimentación mientras es su turno para el viaje humanitario, pero no aceptan esta ayuda y siguen exigiendo un viaje anticipado, en medio del riesgo de contagio al que pueden estar expuestos.
3.000 en lista
Debido a distintas situaciones generadas por la contingencia, económicas o familiares, unos 3.000 venezolanos están hoy en lista de espera para acceder a la estrategia Corredor Humanitario, con la cual la Alcaldía de Medellín ofrece acompañamiento hasta Cúcuta para un regreso voluntario a su país en condiciones dignas y seguras. De esa estrategia se han beneficiado 850 personas hasta el momento.
La Administración Municipal prioriza las solicitudes de mujeres embarazadas o con niños, niñas y adolescentes, personas mayores, con discapacidad y con enfermedades preexistentes. Y la prevalencia seguirá para quienes estén en lista de espera, con alto nivel de vulnerabilidad.
Antes de cada viaje, autorizado por Migración Colombia, se realiza la caracterización y el tamizaje de salud para descartar síntomas de covid-19. A esas personas no se les cobra el valor del pasaje, y además se les suministran refrigerios para el trayecto.
La secretaria de Inclusión Social, Mónica Alejandra Gómez, hizo un llamado a la población venezolana para que no crea en falsas promesas de particulares o entidades diferentes a la Alcaldía de Medellín, que ofrezcan servicios de transporte hasta la frontera. “Esta ruta es exclusiva entre Migración Colombia y el municipio de Medellín”, puntualizó la funcionaria.
La Policía de Carreteras revisa los buses para determinar que tengan los requisitos de circulación al día, las condiciones técnico-mecánicas en perfecto estado y una tripulación idónea. Además, con apoyo de caninos entrenados se inspeccionan los equipajes y compartimentos de los vehículos para evitar la presencia de sustancias o elementos prohibidos.
Una vez en Cúcuta, personal de Migración Colombia coordina con sus homólogos de Venezuela para que los ciudadanos puedan ingresar a su país, donde previamente deben pasar por un nuevo tamizaje de salud.
“Desde el 13 de abril a hoy se ha apoyado a unos 850 venezolanos, trabajando de la mano con Migración Colombia, para que estas personas puedan volver a su país en las mejores condiciones posibles y en una ruta segura para ellos”, precisó Mónica Alejandra Gómez al reiterar que la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos es la única dependencia autorizada para gestionar este acompañamiento ante las demás instituciones oficiales.