El trasegar de los humanos por el planeta, está lleno de vicisitudes. El camino no es precisamente un sendero de rosas, pero muchas de las veces, los humanos nos las sabemos complicar, pues luego de dar algunos pasos hacia adelante, salimos con las sorpresas de desandar los pasos y perder así el tiempo y la experiencia invertidos y adquiridos, en el entendido que cada cual, ve la realidad y se aproxima a ella, de acuerdo con sus intereses. Por lo tanto, los comentarios y reflexiones que vamos a plantear son obviamente, subjetivos.Después de varios decenios de ser declarada como Museo y además Patrimonio de la Humanidad, y después de haber sido aceptadas estas condiciones por todas las religiones interesadas, el controvertido gobierno turco de Erdogan, declara que Santa Sofía (Aya Sofya) en Estambul, vuelve a ser mezquita después de 86 años, volviendo a alborotar el avispero de los fanáticos de todas las religiones, fanatismo que siempre ha estado ahí y que no requiere sino de una buena excusa para explotar. La buena excusa está servida. ¡Amanecerá y veremos!En lo local, la nueva Constitución Política abrió la posibilidad de la dosis mínima de consumo de marihuana, el actual gobierno la frena a través del nuevo Código de Policía y hoy los altos tribunales vuelven a aceptarla. ¡Qué pérdida de tiempo y qué falta de sindéresis!Se anuncia por parte de EPM que su planta piloto Jepírachi en la Guajira, funcionará hasta el 2023, noticia, que nos deja apesadumbrados, ya que la energía eólica es una de las mejores alternativas para la producción de energía limpia. Razones técnicas y financieras debe tener EPM para tomar esta decisión que esperamos sea compensada con el montaje de un nuevo campo eólico ya no como piloto, si no como planta de producción de energía limpia en propiedad.Como periódicamente sucede, el actual contralor general de la Nación recorre el país “descubriendo” elefantes blancos, es decir, obras inconclusas que están ahí, a los ojos de todo el mundo, sin que hasta el presente se hayan tomado las medidas y las acciones necesarias para culminarlas, que sería lo obvio, o para tumbarlas.Debería existir un punto dentro de un Plan de Desarrollo serio, para destinar los recursos necesarios para que este tema sea resuelto y obviamente los responsables asuman las responsabilidades de todo orden que les competan. No es suficiente la alharaca mediática, si no se toman las decisiones apropiadas y oportunas dentro de la extemporaneidad.Un ir y venir de discursos se pronuncian por kilómetros, alrededor del problema de la deforestación y de los programas de reforestación. Lo cierto es que a la fecha no hay un control efectivo contra la deforestación generada por parte de cualquiera de los varios actores involucrados que la provocan, como tampoco un proyecto serio y continuado para recuperar y ampliar la extensión forestal en el país.Ojalá aprovechemos la nueva producción de nuestro grande Carlos Vives, CUMBIANA, para volver los ojos hacia la Ciénaga Grande de Santa Marta y hacer lo que haya que hacer para intervenir las infraestructuras viales mal diseñadas y volver a permitir mediante obras apropiadas, la circulación de las aguas del mar y del Magdalena para que renazcan los manglares y reviva ese maravilloso ecosistema destruido por imbéciles.Por último, ya aparecen las pilatunas legales para evitar o demorar la demolición del Edificio Aquarela construido cerca al Castillo de San Felipe en Cartagena, el cual no debió haber recibido nunca licencia de construcción, entregada en su momento por otros imbéciles. Ya la UNESCO dio como plazo hasta el 2021 para que la construcción sea demolida, o sino Cartagena y Colombia perderán la calidad de Patrimonio de la Humanidad que hoy posee el Castillo de San Felipe.Excelente el programa que ha emprendido la Alcaldía de Medellín para aprovechar estos nuevos días de cuarentena para intervenir zonas en estado de deterioro y recuperar el espacio público que se había perdido. Las acciones inicialmente emprendidas en los sectores de La Bayadera y el Sagrado Corazón o Barrio Triste, son ejemplarizantes y deben servir de estímulo y de ejemplo para intervenir otras zonas en franco deterioro. ¡BRAVO!Como una cosa es planear y otra planificar, y otra cosa es no planear y no planificar, es prudente que aquellas construcciones de vivienda subsidiada que se entregan en obra negra después de muchos trámites y una alta dosis de paciencia por parte de los beneficiados, -que en la mayoría de los casos se originan por una tragedia previa como un derrumbe, una inundación, un incendio, un temblor u otra calamidad-, sean dotados de los servicios públicos elementales, entre ellos, ya no como cosa marginal, sino estructural, la conexión a INTERNET. Pongo como ejemplo la urbanización La Cabañita en San Cristóbal, una Unidad de 9 bloques de 6 pisos ocupada recientemente por sus nuevos dueños, un poco más de 50 familias cuyos niños no tendrán como acceder a la educación virtual forzada, a la cual nos tiene sometida la bendita pandemia.NOTA 1: Mi completa solidaridad con el Señor Gobernador Aníbal Gaviria Correa y su distinguida familia.NOTA 2: Mis agradecimientos a la casa EL MUNDO por haberme permitido comunicarme con ustedes a través de las 900 columnas que ajustamos hoy y que coinciden con la suspensión de actividades para el Periódico y mil gracias a ustedes por tomarse el tiempo para leer esta Columna de Opinión.Es un golpe duro para el fortalecimiento democrático y para el ejercicio de la pluralidad y la tolerancia, pero esta es la realidad que nos corresponde enfrentar, en un país como el nuestro. Una última invitación, a que vayamos siempre, con prudente optimismo, ¡DE CARA AL PORVENIR!
Puede ser que algunos de los escritorios en los que nos sentábamos quienes trabajamos en el Periódico EL MUNDO hayan estado ahí desde siempre, desde que lo crearon, a finales de la década de 1970. Sí, caminar hoy por su sala de redacción es como si se apreciara una instalación de Doris Salcedo, la melancolía de esos muebles parece decir que se apaga un sueño que comenzó el 20 de abril de 1979, cuando empezó a circular en Antioquia un diario con ideas fundamentales, como la de la libertad. Esa libertad no podía escapar de la cultura. EL MUNDO fue pilar del inicio de proyectos culturales que transformarían la vida de la ciudad, del departamento y del país. Basta con entrar al Archivo, buscar los folios del Pequeño Teatro, el Matacandelas, el Taller de Artes, La Fanfarria y darse cuenta cómo el Periódico de logo rojo, liberal, entrevistó a miles de artistas, entonces emergentes, creyendo en que nuestra realidad podría existir un sector cultural que se hiciera preguntas importantes.Lea también: Un sector que sigue sacando el sombreroAna María Cano, quien después fundaría La Hoja de Medellín, fue la primera periodista cultural de EL MUNDO. Después la reemplazó Ana Piedad Jaramillo, directora de los Eventos del Libro y exdirectora del Museo de Antioquia y el Teatro Colón. Vino entonces el tiempo de Maryluz Vallejo, hoy doctora en Ciencias de la Información, profesora Titular de Tiempo Completo del Departamento de Comunicación y jurado del Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar este 2020. Cuenta Carmen Vásquez, periodista de moda, que cuando Darío Arizmendi era el director de EL MUNDO le dio a cada una su “reino”, le dijo a la periodista cultural que ella se encargara de lo artístico, mientras a Vásquez la mandó a los cocteles, a buscar a la “gente linda”, le permitió tener la primera página exclusiva de moda en estas tierras, guiado en lo que hacía la Revista Hola en España, para que así estuviera clarísimo qué era cultura, qué era entretenimiento, qué era moda y qué era sociedad.Desde sus inicios, EL MUNDO dedicó páginas enteras a la agenda cultural, que eran las más difíciles de editar, porque tenían la agenda de cine, la de teatro, los conciertos, los recitales, las presentaciones de libros, todo, independiente de los artículos periodísticos de una y dos páginas que hacía la sección de cultura.Antes de que su experticia fuera el periodismo político y de opinión, Luz María Tobón, directora de EL MUNDO, fue periodista cultural. Todavía tiene en su oficina una foto de su entrevista a un joven Fernando Botero. Ella, de mamá artista, de familia siempre amante de la cultura, defendió el periodismo cultural hasta el cierre, influyendo, de alguna manera, en que siguiera con cada cambio de dirección. Con la llegada de don Guillermo Gaviria Echeverri, quien respetó lo que hacía el Periódico en este campo, se dio vía libre a que ese saber no se apagara.Nombres como el de Pilar Velilla, exdirectora del Jardín Botánico y el Museo de Antioquia; María del Rosario Escobar, exsecretaria de Cultura Ciudadana de Medellín y actual directora del Museo de Antioquia; la maestra Patricia Nieto, quien guía la Editorial Universidad de Antioquia y es docente de la Alma Mater; o el crítico de cine Pedro Adrián Zuluaga, escribieron una historia cada día, por varios años, en la redacción de EL MUNDO, cubriendo cultura.El Mundo Semanal, el Imaginario y Palabra&Obra fueron los tres suplementos culturales que dijeron cosas muy importantes a la ciudad, al país. Óscar Valencia, jefe de diseño de EL MUNDO, contaba que Imaginario fue osado, despertando muchas molestias en algunos “paisas de Medellín”, cuando su editora puso en la portada la foto de dos hombres homosexuales, desnudos, después de una Marcha del Orgullo. Sus contenidos hablaban de la cultura como lo que somos, reflexionaban sobre la ciudadanía cultural. Palabra&Obra, por su parte, buscaba hacer reportajes de largo aliento con personajes que se destacaban en el campo cultural, teniendo en su portada a importantes creadores como Débora Arango, Gilberto Martínez, Víctor Gaviria, Fernando Botero, Félix Ángel, Cristóbal Peláez, Beatriz González, Alberto Sierra, Antonio Caro, Dora Ramírez, Leonardo Padura, René Uribe Ferrer, entre muchos otros. Una vez, el artista Richard McGuire, reconocido por ilustrar publicaciones como The New Yorker, nos hizo el honor de hacernos una edición especial de Palabra&Obra. Publicamos un especial completo sobre la salvaguarda del patrimonio de Frida Kahlo y Diego Rivera, hecho en Ciudad de México, analizamos muchas veces lo que hacían en el Ministerio de Cultura, cubrimos la Bienal de Venecia, la Feria Internacional de Arte de Madrid (España), Artbo, el Salón Nacional de Artistas, el MDE, la Fiesta de las Artes Escénicas, el Festival de Tango, los diez años de la Fiesta del Libro con edición especial, siempre estuvimos ahí, en cada evento, en cada lanzamiento, en cada nacimiento.Y cometimos errores, muchos, porque EL MUNDO siempre fue una escuela de periodismo cultural. Cómo les parece que una vez, matamos a alguien que revivió. Olga Elena Mattei estuvo muerta durante unos minutos, nos llamaron directamente desde la clínica a contarnos tal suceso. Lloramos, planeamos un especial, llamamos a Héctor Abad Faciolince, él nos dio su declaración sobre la importancia de Mattei para la literatura nacional y corrió a publicar en su Twitter que había muerto.Hasta que, de esas cosas que pasan, los médicos la revivieron, la reanimaron y no se murió. Desde entonces, Faciolince ha sido muy lejano. Es que en el Código Caracol, María Lucía Fernández publicó lo que pasó, en la edición de las 7:00 de la noche: “la inmediatez de las redes sociales le jugó una mala pasada al escritor Héctor Abad Faciolince”. Casi nos ahorca, publicó en su cuenta en esa red: “serán imbéciles los de EL MUNDO”...Vale la pena decir que defendimos causas importantes. Hay que agradecerle a Irene Gaviria y Luz María Tobón que nos permitieron ser autónomos en el contenido cultural. Fuimos nosotros quienes cuestionamos el cambio de vestido que les hicieron a los Silleteros, desconociendo que eran un patrimonio, con lo que hubo polémica nacional, cuando Aníbal Gaviria era el alcalde. No nos censuraron.Fuimos nosotros quienes iniciamos a hablar de los “hipster”, cuando todavía esa manifestación cultural era bastante desconocida.Gritamos duro con investigaciones. Nosotros nos dimos cuenta de que las Bibliotecas Públicas de Medellín habían sido cerradas por el gobierno de Federico Gutiérrez, desconociendo su importancia en la transformación social, con la excusa de ahorrar recursos del presupuesto público. Vaya error de visión política, por eso insistimos con varios artículos en que los Parques Bibliotecas eran la opción que tenía un niño de cualquier comuna de no caer en las redes de tráfico, su puerta de escape muchas veces a la violencia física y sexual. Incomodamos a Sergio Fajardo sobre la responsabilidad en las fallas en la fachada de la Biblioteca España, tanto que salió en portada diciendo “voy a hablar de la Biblioteca España, cuando yo quiera”, los memes no se hicieron esperar en las redes sociales.Cuando iban a sacar al maestro Alberto Correa de la Filarmónica, nosotros lo contamos. Insistimos en que el presupuesto para cultura siempre debía subir en el gobierno nacional, el departamental y el local. Y, sobre todo, le dimos voz a un sector que no encontraba en otros medios un espacio que valorara sus obras, que escuchara sus demandas, que necesitaba, en pleno siglo XXI, más que nunca, una presencia en la agenda pública.EL MUNDO insistió en la importancia de la formación artística para la infancia. Con su proyecto Educar Mientras se Informa y su Concurso Personitas de Colores, invitó a que los niños pintaran sus sueños. Otra cosa que hizo fue premiar con el Mundo de Oro a quienes durante decenios trabajaron por el sector, entre los ganadores estuvieron Graciliano Arcila Vélez, la Emisora HJCK de Bogotá, Guillermo Abadía Morales, Fanny Mickey, la Orquesta Sinfónica de Antioquia, la Cámara de Comercio de Medellín, la Biblioteca Pública Pilotoy la Emisora Cultural de la Universidad de Antioquia, Débora Arango, la Biblioteca Central de la Universidad de Antioquia, Carlos Castro Saavedra, el Instituto de Integración Cultural Quirama, Luis Alberto Correa, Rafael Sáenz Moreno, el Museo de Arte Moderno de Medellín, Luis Alberto Álvarez y la maestra Cecilia Espinosa, su última galardonada.En los comités de redacción, muchas veces nos peleamos con quienes nos preguntaban “y ese, ¿a quién le ha ganado?”, poniendo en duda la idoneidad de los artistas emergentes, peleamos por ellos como el futuro del sector y del arte nacional. La cultura también era un tema para abrir el Periódico, nosotros le dimos la portada al Salón Nacional de Artistas, cuando volvió a Medellín, en su edición 43. Juliana Restrepo y Jaime Cerón, sus directores, llegaron con la edición impresa de EL MUNDO a la apertura de aquel certamen, que durante sus tres meses contó con un cubrimiento diario, detallado, sobre lo que intentaban decir los curadores, que propusieron como tema el oxímoron “Saber-desconocer”.Cuando la notoriedad no abarcaba la obra de Pablo Montoya, cuando parecía que a la crítica local y nacional le faltaba creen en tal talento, nosotros reseñamos su Tríptico de la infamia, sin necesitar que el Premio Rómulo Gallegos nos validara lo grande el autor, porque pudimos verlo.Le puede interesar: ¿Seguro les hace falta la crítica?Que sea el momento para decirles gracias a los cientos de artistas, gestores, investigadores, profesores, curadores, comunicadores y colegas que nos buscaron para pedirnos una opinión, para ofrecernos sus contenidos, así como para criticarnos. Aprendimos juntos, crecimos juntos, hicimos historia juntos.EL MUNDO fue y será la casa de la cultura de Medellín, como quedará para la historia en su archivo, porque aquí pasaron hitos como que Gabriel García Márquez quisiera que la redacción del medio que soñó fundar se pareciera a la del diario liberal de Medellín, donde estuvo dando talleres y compartiendo con los periodistas.Gracias, EL MUNDO, gracias porque nos dejaste soñar que esa utopía que adoptamos, la de cambiar el mundo haciendo periodismo cultural, podía ser posible.
Con todo respeto, no comparto el criterio de quienes han venido criticando a la Corte Constitucional por haber declarado la inexequibilidad del Decreto Legislativo 580 de 2020, por el cual se dictaban medidas en materia de los servicios públicos de acueducto, alcantarillado y aseo, por el motivo que condujo a la adopción del fallo y que también expuso la Secretaria Jurídica de la Presidencia de la República: aunque, según el comunicado de la Corte, se dictó y promulgó en desarrollo del Estado de Emergencia Económica, Social y Ecológica, se expidió dentro del término de vigencia del estado de excepción y se encuentra brevemente motivado y lleva la firma del Presidente de la República, no fue suscrito por todos los ministros del despacho. Faltaron las firmas de los ministros de Salud –lo cual llama la atención en cuanto la emergencia fue provocada por la pandemia- y de Ciencia y Tecnología.Lea también: Cumplir la ConstituciónComo señala la providencia,” el mandato constitucional referente a que los ministros suscriban los decretos legislativos que se expiden en virtud del estado de emergencia económica, social y ecológica constituye una condición indispensable de validez de dichas normas, en la medida en que con este se garantiza, el principio democrático, durante el estado de excepción, pues se contrarresta el déficit de deliberación y se limita la facultad discrecional del presidente”.La exigencia constitucional de que estos decretos, además de las firmas del presidente, lleven las de los ministros –todos- no corresponde simplemente a un requisito de forma y sin mayor trascendencia. Por una parte, cuando hablamos de los estados de excepción –entre ellos el de emergencia- aludimos al ejercicio de una potestad extraordinaria del Ejecutivo, que normalmente no tiene a cargo la función de expedir las leyes –atribución que, por cláusula general de competencia, corresponde al Congreso-. Por otro lado, la Constitución es clara cuando expresa (art. 115) que las firmas de los ministros en los decretos los comprometen y por medio de ellas asumen una responsabilidad por las medidas y decisiones que adopta el Gobierno Nacional. Y, además, las normas superiores relativas a los estados de excepción exigen expresamente “las firmas de todos los ministros” y subrayan su responsabilidad. El 215, para el caso del Estado de Emergencia Económica, Social, Ecológica o por calamidad pública, estatuye: “El Presidente de la República y los ministros serán responsables cuando declaren el Estado de Emergencia sin haberse presentado alguna de las circunstancias previstas en el inciso primero, y lo serán también por cualquier abuso cometido en el ejercicio de las facultades que la Constitución otorga al Gobierno durante la emergencia”.Le puede interesar: Sobre las sesiones virtualesDe manera que no estamos ante un mero formalismo. Ni se puede sindicar a la Corte Constitucional de haber sacrificado el fondo de la medida en aras de la forma, o de no haber hecho prevalecer el derecho sustancial, como lo exige el artículo 228 de la Carta. Ella tiene a cargo la guarda de la integridad y supremacía de la Constitución, que exigió, en estados de excepción, las firmas “de todos” los ministros, no de algunos.Y el vicio no era subsanable, toda vez que al momento del fallo el decreto ya había sido promulgado y había entrado a producir efectos. En estas materias no se puede improvisar.
Duele la desaparición de EL MUNDO, después de más de 40 años de actividad ininterrumpida, con periodismo de calidad informativa y pluralidad de opinión. Desde hace dos años, cuando la publicación impresa diaria le dio paso a una semanal, el diario quedó herido de muerte porque había perdido su esencia. La desaparición de los periódicos impresos es una de las consecuencias nefastas de llamada revolución digital; nefasta porque los ha destruido sin sustituirlos por nada mejor.Lea también: Harry Sasson, la renta del suelo y las sopas MaggiLa prensa impresa, que resistió los embates de la radio y la televisión, agoniza en todos los países. Se cuentan por centenas los diarios desaparecidos y los que subsisten lo hacen en formatos cada vez más escuálidos y pobres en contenido. Sin la palabra impresa, la fuerza de la vieja sentencia, “lo escrito, escrito está”, se desvanece y con ella las exigencias del rigor informativo y de la clara separación entre la opinión y la noticia.Estas dos fueron las características señeras de EL MUNDO que nunca ocultó su carácter de diario liberal militante, pero abierto siempre a una amplia diversidad de opiniones, tanto en la época de Don Guillermo Gaviria, como en los últimos años bajo la orientación de su hija Irene y de mi querida amiga Luz María Tobón.El de Don Guillermo fue un liberalismo doctrinario, más bien clásico, cuya orientación intervencionista no lo apartó nunca de la defensa de la iniciativa privada como fundamento de la actividad económica en una sociedad verdaderamente libre. Por supuesto que, como periodista, fue también un liberal en el sentido partidista, aunque, el gran hacedor de empresas que fue, seguramente se habría sentido contrariado por la orientación anti-empresarial que aqueja a sectores amplios del que fue siempre su partido.Quizás a causa de la bancarrota ideológica del Partido Liberal, el liberalismo de EL MUNDO de los últimos años perdió su matiz partidista y se hizo más conceptual y de principios, buscando irradiar los valores de la democracia liberal y la iniciativa privada con responsabilidad social a las gentes de todos los partidos y la sociedad entera.Esa defensa de la democracia liberal se expresó en sus cuestionamientos al proceso de paz por su indiferencia frente a las víctimas de la Farc y las grandes concesiones hechas a lo que no era más que organización criminal que no representaba a nadie, como quedó en evidencia con las paupérrimas votaciones recibidas en las dos elecciones en las que ha participado.Su reconocimiento de la iniciativa privada como fundamento de la actividad económica y de la creación de riqueza, se manifestó recientemente en su insistente reclamo de la reactivación de la economía acompañada de la flexibilización de la contratación laboral.Pero quizás la más firme posición de EL MUNDO en los últimos años fue su incansable y persistente reclamo al gobierno a cumplir su misión fundamental de proteger la vida de los ciudadanos. No importa lo que el gobierno haga en cualquier ámbito, si no protege la vida de las personas está incumpliendo gravemente su obligación constitucional y lo que es en definitiva su razón de ser.Muchos años atrás, cuando, por incompatibilidad con mi actividad profesional, decliné la invitación que me hiciera a escribir en el periódico que acababa de adquirir, Don Guillermo, insistente, me dijo que escribir en EL MUNDO sería un honor.Le puede interesar: Una propuesta ilegal, inconveniente y peligrosa, pero imparableHace algunos años, por invitación de Luz María Tobón, EL MUNDO acogió generosamente mis artículos. Me sentí cómodo y complacido de hacer parte de tan noble empresa periodística y muy honrado, como había anticipado Don Guillermo.
Hoy he recibido la noticia: EL MUNDO, después de una tarea periodística de 41 años, ha decidido cerrar su fase de periodismo impreso. El entorno es cambiante, la evolución de hechos, tecnologías, épocas, conduce a decisiones y nuevas direcciones en los caminos que nos presentan horizontes distintos y nos hacen dejar atrás paisajes familiares a los cuales habíamos tomado un cariño como el del poeta cartagenero a los zapatos viejos. Algo diferente se abre en las perspectivas del futuro inmediato. Mis mejores deseos para FundaMundo, para la querida y admirada familia Gaviria Correa, y para la buena ventura de sus proyectos y su liderazgo, siempre inspirados en el bien para la comunidad y para Antioquia. Algunos de estos cambios son dolorosos, como lo es, en lo personal, este: se trata de una pérdida para el periodismo escrito en la región, y en Colombia. Pero EL MUNDO cierra este ciclo, como lo manifiesta su directora Luz María Tobón Vallejo, con la satisfacción del deber cumplido.Lea también: Alatriste: la punta de su espadaTermina para Antioquia una tribuna de decencia, de buen periodismo, de compromiso con la verdad. Se culmina la etapa de un esfuerzo colosal en pro de los intereses sanos de nuestro departamento, pionero para Colombia en tantos aspectos de progreso, de desarrollo, de apertura al futuro. EL MUNDO ha cumplido y constituye un gran honor ser parte, modesta y pequeña, de esta locomotora de la honradez y de la opinión crítica y creadora.Después de escribir la columna “Vestigium” durante veinte años -un total de 492 columnas, de periodicidad quincenal, casi ininterrumpidamente- vienen a mi teclado unas palabras que no puedo evitar, pues las asocio necesariamente a esta tribuna periodística: agradecimiento, aprendizaje, disciplina, creatividad.Cada uno de mis textos fue acogido respetuosamente por parte de los editores y de la dirección en estos años. Nunca he recibido la más mínima interferencia respecto a los temas y enfoques para los cuales con total libertad se me ha cedido el espacio. Siempre he sentido la presencia viva y efectiva de un genuino respeto por el diálogo inteligente, por el ir y venir de ideas ordenadas y rigurosas, expresadas dentro del marco de la consideración hacia la verdad y hacia el lector como un interlocutor merecedor de un trato digno y humanizante. Por parte de la dirección del periódico siempre recibí palabras de aliento, de buen criterio, de magnífica atmósfera de ejercicio de la inteligencia.Escribir Vestigium, con la variedad de tonalidades presentes en el entorno de las realidades contemporáneas, fue un hábito de disciplina, de investigación, de contrastes, de búsqueda de fuentes verificables. Una tarea constante de enriquecimiento y educación personal que tuvo que pasar por el tamiz del lector crítico y exigente, a quien también debo expresar agradecimiento. Mi padre, Hernán Gómez Atehortúa, fue el mejor lector, crítico y corrector que tuve. También asumí una tarea constante de aprendizaje en cuestiones de estilo y de forma periodística. No puedo olvidar las didácticas exposiciones de Arturo Giraldo Sánchez.Un “Vestigium” es la señal, la huella, la marca que deja el pie de un viajero sobre el camino. Hay algo relacionado con la memoria, con el registro de los datos de alguien que ha pasado por un lugar y ha dejado su impronta. Es el indicio de que por allí ha estado un “homo viator”: un viajero, frágil, perecedero, fugaz. Es también el rastro de un caminante que se esfuerza por perfeccionarse en una tarea que se ha impuesto. También el investigador es un sujeto que anda tras las huellas; la realidad -variada y múltiple- ofrece ante sus ojos algunas facetas, y es su tarea, la del investigador, hallar la parte de verdad que está inscrita en esas huellas. Para mí ha sido culminación de un rasgo esencial de mi vida: la búsqueda de explicaciones a las cosas que pasan, y de las cuales apenas tengo un entendimiento parcial en un entorno de asombro constante, infinito, inacabable. Mis columnas fueron posibles por aquella conversación inicial con Luz María Tobón Vallejo, cuando acogió, con tolerancia y generosidad, mis imperfectos intentos de practicar el arte de la columna.Le puede interesar: Incertidumbres y certezasTodos somos viajeros. También las instituciones dejan su huella: EL MUNDO deja un vestigio, una huella de decencia, de amistad, de buena escuela periodística: mi abrazo y mi voz de agradecimiento.
Y como se ensombrece su interior, se ensombrece también el mundo externo.Stefan Zweig. Magallanes.Un viaje al finalEn la promoción de la película Das Wunder von Bern (El milagro de Berna), se lee: Jedes Kind braucht einen Vater Jeder mensch braucht einen Traum. Jedes Land braucht eine Legende (Cada niño necesita un padre, cada hombre necesita un sueño, cada país necesita una leyenda). Antes de suicidarse, esta frase bien la pudo pensar Stefan Zweig. En 1942, en Brasil, el escritor y biógrafo estaba huérfano de patria, había perdido los sueños porque antes que grandeza lo que veía era una decadencia terrible y ya no había opción de leyenda, pues los escritores e intelectuales de la tierra que lo había acogido lo acusaban de estar colaborando con la dictadura. Y si bien esto nunca fue una realidad, como bien lo denunció Jorge Amado, ya que antes que pruebas lo que sentían sus acusadores era envidia y odio, pues Zweig, aún en el exilio, seguía produciendo y vendiendo sus libros en tirajes de más de cien mil ejemplares, lo cierto es que la acusación entró en su corazón sensible como la puñalada que narra la letra del tango: con rabia de esta vida.Lea también: Patrick White y la tierra de Voss O la vida como esEsos días de exilio y huida, de muerte cercana y lejana, donde uno también se muere cuando los propios están muertos o confinados en campos de concentración y exterminio, de tanta soledad y tanto miedo, tanta premonición terrible y tanta exclusión, llevaron a escribir a Zweig, antes de suicidarse con Lotte, su mujer: “Antes de partir de la vida, con pleno conocimiento, y lúcido, me urge cumplir con un último deber: agradecer profundamente a este maravilloso país, Brasil, que me ofreció a mí y a mi trabajo una estancia tan buena y hospitalaria. Cada día aprendí a amar más este país, y en ninguna parte me hubiera dado más gusto volver a construir mi vida desde el principio, después de que el mundo de mi propia lengua ha desaparecido y Europa, mi patria espiritual, se destruye a sí misma. Pero después de los sesenta se requieren fuerzas especiales para empezar de nuevo. Y las mías están agotadas después de tantos años de andar sin patria. De esta manera considero lo mejor, concluir a tiempo y con integridad una vida, cuya mayor alegría fue el trabajo espiritual, y cuyo más preciado bien en esta tierra estuvo en la libertad personal. Saludo a mis amigos. Ojalá puedan ver el amanecer después de esta larga noche. Yo, demasiado impaciente, me les adelanto”. La nota es de 1942 y tiene fecha del 23 de abril. Para el suicidio usaron un desinfectante casero, eso dijeron los envidiosos y enemigos, entre ellos, Laureano Gómez.Stefan Zweig era un hombre impaciente en los viajes (no así en el mundo de su jardín), quizá porque se movía sin poder hacer nada importante, como no le pasaba en la quietud. Pero en los viajes se piensa (el encierro obliga) y, en lo que pensó en el mar (iba a Brasil), nació lo que Zweig llamó un libro nacido de la vergüenza: Magallanes, la historia de la primera vuelta al mundo y de un gran confinamiento intensivo en medio de mares desconocidos.Magallanes, el libro de la vergüenzaCuando se escribe un libro acerca de alguien no se está escribiendo sobre ese personaje determinado sino sobre el mundo. Como se lee en el Talmud, lo que toca a un hombre toca a la humanidad entera. O, en términos de Giordano Bruno, lo que es una flor también es un cielo estrellado. Esto lo tenía claro Stefan Zweig. Sus libros no se suscriben a un solo hecho, sino que se amplían como un paisaje de verano y el lector, además de recibir la historia que se promete en el título, también recibe detalles sobre el mundo circundante, acerca de los preámbulos y lo que fue necesario para que esa historia se diera. Como decía don José Ortega y Gasset, el hombre no es él solo (como unidad que aparece por generación espontánea) sino que nace de unas circunstancias que no sólo lo hacen posible sino un hecho necesario. La historia, entonces, es atómica y caótica, pero al momento de conectarse, precisamente por ley de caos, configura un sistema y de allí sale la grandeza o la miseria, la tragedia, la comedia o los inicios del Apocalipsis.Magallanes, obra de ZweigEn su primer viaje a Brasil, en 1936 y en trasatlántico de lujo, Stefan Zweig está impaciente por llegar. Lo cansan ese mar siempre igual, las noches sin cambios, la gente que se mueve a su alrededor, los que leen y bailan, los que comen a la carta y los que van por el barco como si estuvieran en tierra, pero encerrados. Y como está aburrido en ese viaje que pareciera no terminar, trata de pensar en algo y de repente, como él mismo lo escribe en el prólogo de Magallanes, siente una inmensa vergüenza. Ese viaje que él hace es un paraíso, dos paraísos, tres paraísos (imposible encontrar el sustantivo) en comparación con el que hicieron los navegantes del siglo XV y XVI que atravesaron el océano Atlántico. Ellos no sabían a dónde iban a llegar ni en qué día, comían las mismas galletas y el mismo pescado todo el tiempo, resistían el calor y el frío sin más que quitarse la camisa o ponerse una manta sobre los hombros. Y nadie sabía dónde estaban. Su única conciencia era el hacinamiento en medio del mar. No iban como él, perfumado y bien vestido, con posibilidades de leer o bajar al salón a conversar o jugar a las cartas, listo a pedir una copa o una comida especial o irse a dormir al camarote en el que hay calefacción o ventiladores, según sea el clima. Zweig sabía para dónde iba y tenía un día de llegada, ellos no. Pensando en esos hombres que se apiñaban en pequeños barcos y no tenían más ruta que el azar, Stefan Zweig se siente avergonzado y, como escritor, en obligación de reparar ese pecado de la impaciencia y la ignorancia.Magallanes, libro que le demandó casi dos años hacerlo, fue su gran homenaje a América del Sur, aunque no el único, pero si el más amplio, como el mar que se extendía, como la selva en crecimiento. Sabemos que mientras estuvo en Brasil, donde hizo amistad con el historiador colombiano Germán Arciniegas (el más grande investigador sobre Américo Vespucci), Stefan Zweig escribió Brasil país del futuro y alentó a Arciniegas para que escribiera El caballero del dorado, la historia del conquistador Gonzalo Jiménez de Quesada. O sea que antes de morir, el escritor judeo-austriaco se fue llenando de Sudamérica, de sus posibilidades y del lugar destacado que tendría en el futuro de geopolítica de la Tierra, algo que no creyeron en 1940 (y creo que todavía no lo creen) los mismos sudamericanos, tan propicios (muchos) a las emociones tristes (la rabia es una, la credulidad otra), la traición y el ejercicio continuado del rencor y codicia. Y a no ver más que de la cintura hacia abajo, envidiando.En este libro de Magallanes, Zweig hace un canto a las especias, denuncia el papel de los intermediarios en el comercio y entra en el espíritu de los portugueses y españoles que se dieron a la mar desconocida alentados por las posibilidades de comercio con el oriente porque, y en esto es claro el libro, no les interesaba ni D-s ni el rey sino el dinero y la aventura. Y poblar la tierra con su simiente. O sea que los movió el intercambio, la necesidad de mezclarse y de ese mestizaje lograr un pueblo nuevo. Como Brasil, país en el que Stefan Zweig se asombraba con la multiculturalidad, la tolerancia religiosa (por esos días), los colores variados y la alegría de vivir aún bajo condiciones políticas y económicas extremas.En este libro de la vergüenza, Magallanes, en el que se manifiesta entre líneas una crítica severa a los estados nacionales y totalitarios y a la tecnología que se usa para someter al hombre y, como sucedió con el nazismo, para exterminarlo, Stefan Zweig plantea la teoría del valor frente al azar, de la solidaridad en el peligro, de la amistad y el sentido de estar vivo, no como un objeto que se exhibe sino en calidad de ser con pasiones y virtudes, en movimiento, dispuesto a sentir más que a tener. Diría que Brasil, y por extensión Sudamérica, lo ha tocado mucho y el escritor judío-austriaco se embriaga con sus imágenes.Le puede interesar: Giovanni Bocaccio y la peste de FlorenciaHoy se sabe que Stefan Zweig no sólo era amigo de Sigmund Freud sino un apasionado de las teorías psicoanalíticas de éste. Y no por el carácter intelectual y científico que encerraban sino porque allí aprendió que, para entrar en el alma de un personaje (como hizo Zweig en todos sus libros), es necesario desnudarse de prejuicios y tocar lo más sensible del sujeto tratado, llegando incluso al dolor y a las pasiones más desmesuradas. De esta manera no se está creando una figura de cera sino un ser humano digno de ser amado y odiado, respetado y burlado, y no alguien que deba ser visto como una pieza de museo. De aquí la grandeza de las biografías y novelas de Zweig, que engrandecen al idioma alemán como lenguaje de escritura profunda, acreditándolo como una lengua de conceptos y más sustantivos que adjetivos. Alguien decía que Stefan Zweig no es fácil de leer porque su escritura es fría y no alegre como la de los escritores españoles o latinoamericanos. Yo diría que lo que carece es de adjetivos, o sea de mentiras.Pequeño final:En el libro Momentos estelares de la historia, Zweig cuenta la historia de los trece del Perú, esos hombres que sin saber qué les esperaba siguieron a Pizarro atravesando una línea que éste dibujo con la espada sobre el suelo. Quizás Zweig pensó en esta historia cuando decidió matarse. Quizás pensó en Magallanes, que buscando darle la vuelta a la tierra no lo logró y fue asaetado por los hombres de las Malucas. Quizás pensó que Brasil era una oportunidad pero que la política y los intereses creados de los intelectuales locales (que negaban perniciosamente ser lo que eran) no la permitían. Supongo que se piensen muchas cosas antes de suicidarse, en especial todo eso que duele. Y en el caso de un judío (Zweig nunca renegó de su condición), en que no debe matarse. O en que ya estaba muerto.En el prólogo de El caballero de el dorado, Germán Arciniegas dice que Cervantes tomó como modelo de Don Quijote a Gonzalo Jiménez de Quesada. Este dato se lo dio, como reconoce Arciniegas, Stefan Zweig. Ya, en El caballero de El dorado, el modelo a tomar por Arciniegas son los libros de Zweig, su profundidad, su amplitud, ese amor libre de moralismos por los personajes. A partir de ahí, Stefan Zweig se integra al sentir Sudamericano, que unos toman y otros dejan. Y algunos traicionan, en especial los que tienen miedo de ser lo que son: una aventura.El Kadisch es una oración hebrea que se le reza a los muertos. Le canta a la vida. Y la huida de Zweig, su última vida (huyó de Austria en 1934), pudo terminar en Inglaterra, en Los Estados Unidos, en Cuba, pero escogió Brasil. Un Kadisch allí es más sonoro, se rodea de verde y le hacen coro los pájaros, el horizonte es más amplio y el aire más limpio. Y partir hacia la nada no da tanto miedo. Hay más miedo en el mundo.
Tres goles del argentino Giovanni Simeone acabaron casi definitivamente este domingo con el sueño de lograr el Scudetto del Nápoles, que naufragó en su visita a Florencia (3-0).Tras 30 partidos ligueros sin derrotas como visitante, Nápoli se hundió ante Fiorentina, en un duelo en el que jugó en inferioridad numérica desde el minuto 8, y se quedó a cuatro puntos de distancia del líder Juventus a falta de tres jornadas para el final.Fue un domingo perfecto para Simeone, quien disputó un partido de máximo compromiso y que arrolló al Nápoli con un gran triplete para alcanzar los 13 goles en esta temporada.No es un número intrascendente para el Cholito, quien igualó, con tres partidos todavía por disputar, el registro goleador obtenido por su compatriota e ídolo, Gabriel Batistuta, en su primer año con la camiseta de la Fiore.La victoria 3-2 conseguida el sábado por Juventus en el Giuseppe Meazza ante Inter, con gol decisivo del argentino Gonzalo Higuaín, vale ya gran parte del Scudetto para los turineses, que están a dos victorias de conquistar su séptimo título consecutivo.Los napolitanos se quedaron a cuatro puntos de distancia del Juventus y solo la matemática los mantiene vivos en la pelea por el título.Los azzurri terminarán su Serie A ante Torino, Sampdoria y Crotone, pero al Juventus le bastará sumar seis puntos frente al Bolonia, Roma y Verona para conseguir el trigésimo cuarto Scudetto de su historia.Lea:Barcelona se proclamó campeón de LaLiga, Deportivo descendióResultados de la fecha 35SábadoRoma 4 - 1 ChievoInter 2 - 3 JuventusDomingoCrotone 4 - 1 SassuoloAtalanta 3 - 1 GénovaBenevento 3 - 3 UdineseBolonia 1 - 2 MilánVerona 1 - 3 SpalSampdoria 4 - 1 CagliariFiorentina 3 - 0 NápoliTorino 0 - 1 LazioPrimeros diez puestos1. Juventus 882. Nápoli 843. Roma 704. Lazio 705. Inter 666. Atalanta 587. Milán 578. Sampdoria 549. Fiorentina 5410. Torino 47
El Gobierno Departamental de Antioquia por intermedio del secretario General de la administración seccional, Juan Guillermo Usme Fernández, reafirmó el absoluto respeto por las decisiones de la diputación y descartó todo tipo de tensiones y confrontaciones con los corporados, luego que la Asamblea Departamental no aprobó en el primer periodo de sesiones regulares, que acaba de concluir, dos importantes proyectos de ordenanza para la marcha del Gobierno y que fueron radicados por el Ejecutivo seccional.Como es obvio en estos casos, la decisión de los diputados originó inmediatamente en el mundo político y periodístico interpretaciones sobre una supuesta crisis política entre el Gobierno y la Asamblea, pero el abogado Usme Fernández salió al paso al decir que respetan el disenso y la votación de la corporación, aunque no la comparten por tener argumentos suficientes que respaldan la viabilidad de las dos iniciativas.“Los diputados saben del espíritu democrático del gobernador Aníbal Gaviria en sus relaciones con los políticos y el respeto por sus actuaciones en los cuerpos colegiados. El permanece este lunes en la subregión de Urabá y a su regreso se analizará la situación que se registra y el camino a seguir, como por ejemplo convocar a unas sesiones extras”, dijo el secretario General.El presidente de la Asamblea, el abogado liberal Rubén Callejas dijo que los diputados están cumpliendo con su labor y fue enfático en confirmar el clima de respeto y de consideración que ha reinado en las relaciones con el gobernador.La primera temporada de trabajo de los diputados, de enero y febrero, se clausuró el pasado sábado 29 de febrero, en una sesión durante la cual se tenía programado el debate en tercer debate a un proyecto en el que el gobierno seccional solicitaba vigencias futuras para la gestión administrativa en materia de contratación para los años 2021, 2022 y 2023 y de otro para introducir una reforma administrativa a la estructura de la Gobernación de Antioquia, que implica la creación de nuevas dependencias.En el primer año del cuatrienio de un nuevo gobierno departamental y de su correspondiente asamblea, las sesiones de la diputación se realizan durante los meses de enero y febrero, pero en los tres restante años se llevan a cabo en marzo y abril, para seguir luego con el bimestre junio y julio, y terminar con el de octubre y noviembre, que son los seis meses en que legal y ordinariamente laboran la Asambleas Departamentales en Colombia, sin contar el tiempo de sesiones extras, de dos meses, a que tienen derecho anualmente.Políticamente la diputación antioqueña, de 26 corporados, quedó conformada por una coalición de quince diputados, cuyos partidos se declararon de gobierno. Entre tanto, los ocho corporados del Centro Democrático tomaron una posición de independencia, mientras que otros tres restantes quedaron excluidos del bloque gobiernista, que fue el que no aprobó en tercer debate las dos iniciativas y que es lo que ha causado suspicacia y comidilla política y periodística.No obstante ninguno de los quince diputados ha salido a esgrimir argumentos políticos para no dar vía libre a los dos proyectos y se limitan a dar explicaciones de técnica jurídica, como dudas o vacíos, para no darle por ahora vida jurídica a sendas iniciativas.“Lo que los diputados de la coalición hicieron fue mandarle un mensaje político al gobierno para que sean tenidos en cuenta”, se escucha y se especula por los mentideros y los pasillos de La Alpujarra. Consultados algunos diputados sobre estas conjeturas, se abstienen con nombre propio a ratificarlas y por el contrario reafirman los motivos de orden jurídico.El hoy más veterano diputado, el abogado Rodrigo Mendoza, quien no hace parte de la alianza gobiernista, pero quien tampoco ejerce una postura oposicionista, recordó que le han tocado siete gobernadores y que a ninguno se le negaron al principio de sus administraciones proyectos de ese calado.Lea:Con muchos cambios despegó la AsambleaLas diferenciasEl secretario Usme Fernández declaró que comprende que las Asambleas Departamentales son corporaciones netamente políticas y toman decisiones en ese sentido, pero insistió desde el lado del gobierno de Antioquia en sustentar los dos proyectos como valiosas herramientas para la labor del Ejecutivo. En el caso de las vigencias futuras para agilizar y facilitar el trámite de nueve contratos que se requieren para el desarrollo de la administración y en el concerniente a la reforma administrativa para modernizar la estructura de la Gobernación.Mientras que la diputación alega en el primer caso que se necesita de un nuevo plan de desarrollo para aprobar vigencias futuras, el Ejecutivo aduce que está vigente el anterior del gobierno de Luis Pérez y que hay claridad para ello en sentencias de la Corte Constitucional.Y en el asunto de la reforma a la administración, los corporados hacen ver que suspendieron su aprobación en tercer debate hasta tanto el gobierno presente los estudios técnicos que sustenten su aplicación. A ello el Ejecutivo respondió que lo que se pide es que la Asamblea se desprenda de sus facultades y se las otorgue al gobernador para realizar la remodelación de la arquitectura administrativa y cada vez que se vayan expidiendo las resoluciones, se presenten los estudios hechos para ello y también sujetos a análisis por parte de una comisión conjunta del gobierno y la Asamblea, que se propuso para que haga seguimiento permanente a la reforma.Para Usme Fernández el proyecto de las vigencias es subsanable, mientras que el de la reforma es una iniciativa sustantiva, por lo cual habrá que esperar qué decide el gobernador Aníbal Gaviria sobre la hoja de ruta a seguir una vez regrese de su periplo por Urabá.Pero el primer periodo de la Asamblea no se reduce solo a las diferencias en torno a esos dos proyectos, pues la diputación también le dio luz verde a otros asuntos de la administración.Fue así como se llevaron a cabo nueve sesiones descentralizadas en igual número de subregiones del departamento para la construcción del Plan de Desarrollo. Además fueron aprobados cuatro proyectos de ordenanza, entre los que se destacan la prohibición de compra y distribución de plásticos de un solo uso en la Gobernación y sus entidades y también la creación del Consejo Departamental de Paz, Reconciliación y Convivencia. Y se realizaron doce debates de control político.
El título de este informe lo publicamos a modo de pregunta porque hoy en Bello el gran interrogante para el nuevo gobierno del alcalde Óscar Andrés Pérez Muñoz es en qué estado recibió la administración municipal tras más de 20 años de manejo de la denominada Casa Suárez que perdió el poder.Y aunque este mandatario hizo parte del suarismo conservador y ya fue alcalde a nombre de esa tendencia entre el 2008 y el 2011, hace rato rompió políticamente con la forma de hacer política de ese clan, liderado por el excongresista Óscar Suarez Mira, y emigró al uribista Centro Democrático dentro del cual ha sido dirigentes de uno de sus tantos matices, el denominado “Equipo de todos”.Por tal motivo, el compromiso adquirido por este alcalde es mayúsculo, pues además de ganar en las urnas con un amplio y legítimo caudal electoral, él sabe y también todo su equipo que deben hacer un gobierno totalmente distinto al manejo del desmoronado suarismo, que marque la diferencia con el pretérito inmediato lleno de líos judiciales, escándalos y unas pésimas administraciones, que no han logrado que Bello de verdad asume un papel preponderante como la segunda ciudad de Antioquia.Pero además de establecer cuál es la realidad administrativa y financiera con la cual recibieron la alcaldía municipal de Bello, otro detalle también se destacó en la reciente posesión de Pérez Muñoz.Y fue que asumió el cargo en las antiguas instalaciones de los talleres de los Ferrocarriles Nacionales, con lo cual el nuevo alcalde mandó un mensaje contundente sobre la destinación que se le dará en su gobierno a esos valiosos terrenos.Tras su posesión como alcalde de Bello, Óscar Andrés Pérez ahora espera el informe de la situación real de este municipio.Cierre financieroPero volviendo al asunto central del decolaje de la era de Óscar Andrés Pérez hay un enorme interés, pero más preocupación sobre la situación y el futuro de Bello como municipio viable.Esa incertidumbre se palpa en el joven dirigente político y nuevo concejal Daniel Villa, de la estirpe de su abuelo el exalcalde Rodrigo Villa y sobrino del exministro Armando estrada Villa, figuras de un extinto liberalismo bellanita.Precisamente este joven profesional tuvo que emigrar del liberalismo de su ciudad, pues hace rato se convirtió en un cartel familiar y de intereses particulares, que no aporta nada a Bello, sino más problemas.También las dudas sobre la viabilidad económica de Bello embargan al nuevo secretario de Hacienda, el estudioso académico y exconcejal Francisco Echeverri, también exliberal por las mismas razones de Villa, y quien prefiere esperar el cierre financiero del 2019 para saber con qué no cuenta y tratar de darle respiración financiera a su caótica ciudad.Entonces, para no caer en especulaciones y cifras erróneas, fue el propio alcalde entrante quien le puso la cara a la situación en que encontró a la administración municipal.Un revelador informe lo comienza con las expresiones “con decencia, con madurez y con responsabilidad”, para revelar en su reciente posesión que en un mes entregará un informe muy detallado sobre qué recibieron y qué no recibieron, además de lo que deberán remitir a los diferentes órganos de control.Pérez Muñoz develó que recibieron un déficit financiero de 40.000 millones de pesos, una deuda pública de 76.000 millones, un debido cobrar de predial por 140.000 millones de pesos, un debido cobrar de industria y comercio por 90.000 millones de pesos y un debido cobrar de tránsito por 92.000 millones de pesos.También encontraron que 1.200 comerciantes no declaran en industria y comercio, además que urge una revisión de las obligaciones urbanísticas por la bonanza en construcciones que se están llevando a cabo en esa ciudad.En los antiguos talleres de los ferrocarriles se posesionó el alcalde de Bello.Emergencia educativaPero lo que más le preocupa a este alcalde es que van a tener que pedir a la ministra de Educación que les permita decretar la emergencia educativa en todo Bello.El motivo para semejante medida lo origina el hecho de que hoy hay una intervención en infraestructura en 24 instituciones que no va a permitir iniciar oportunamente el calendario escolar este 20 de enero.“Es muy lamentable, quizás irresponsable porque si no hay tiempo para ejecutar la plata no pueden destinarla sólo por gastarla, sacrificando incluso el estudio de los jóvenes”, comentó el alcalde.Entre tanto, la escogencia de los viejos talleres de los Ferrocarriles, tiene como mensaje que en esos terrenos se van construir la escuela de artes y oficios, y las nueva alcaldía, y no vivienda y menos centros comerciales.De otro lado, el alcalde, que es del Centro Democrático logró en el Concejo el apoyo de once cabildantes de 19, cuatro de ellos de su partido, tres liberales, dos de Cambio Radical, uno de Aico y otro del Partido de la U.Independientes se declararon los tres concejales suaristas y uno de ADA, mientras que a la oposición se fueron los tres concejales verdes y uno de Unidos por Bello.La novedad es que este Cabildo se quedó sin vocero de la oposición en la primera vicepresidencia, a la que se postuló Felipe Restrepo, el candidato a la alcaldía que quedó de segundo, pues sólo sacó cinco votos, mientras que el resto de corporados votaron en blanco.Lea:Girardota quería un cambioEl Gabinete de BelloEl siguiente es el equipo de gobierno en esta ciudad:*Secretaría de Servicios Administrativos: Julio Eduardo Muñoz Espinal.*Secretaría de Gobierno: Isabel Daniela Pérez.*Secretaría de Recaudos y Pagos: Eliana Restrepo Herrera.*Secretaría del Adulto Mayor: Óscar Hernán Orrego Gutiérrez.*Secretaría de Medio Ambiente y desarrollo Rural: Juan David Casas.*Secretaría de Planeación: Carlos Alberto Pinto Santa.*Secretaría de Educación: Nubia Valencia Montoya.*Secretaría de Cultura: Johana Andrea Martínez Orjuela.*Secretaría de Salud: René Omar Jiménez Arango.*Secretaría de Movilidad: Rigoberto Arroyave Acevedo.*Secretaría de Deporte y Recreación: Yulieth Andrea Sánchez Carreño.*Asesor de Gestión de Riesgo: Uber Zapata.*Gerente de Proyectos Especiales: Estefan Valencia Palacio.*Gerente de Progreso e Inclusión Social: David Lopera.*Secretario Privado: Juan Arango.*Secretario General: Geovanny Arias.*Secretario de Hacienda: Francisco Echeverri.*Asesor Jurídico: César Vesga.*Secretaría de Obras Públicas: John Harold Muñoz.
“Es preocupante la situación”: dijo la Personería de Medellín en cuanto a la elevada cifra de desplazamientos en la ciudad durante el último año.La situación que se vive en algunas comunas ha generado denuncias de desplazamiento intraurbano, que corresponden a casos de extorsión y amenazas por parte de grupos al margen de la ley.En lo que va de noviembre, han sido reportados 3 casos, en el sector de La Loma de la Comuna 13 y en el barrio 20 de Julio.153 familias han reportado esta situación el el transcurso del año, dondelas comunas 7, 13, 16 y el corregimiento de Altavista son los sectores que más afectados.Juan Fernando Gómez, personero delegado de Derechos Humanos de Medellín, aseguró: “Tenemos un total de 2.300 personas que han tenido que salir de su lugar de residencia habitual por motivos directos que tienen que ver con amenazas y extorsión”.Lea también:Corte Constitucional ordenó devolver tierras a 120 familias en TurboA los hechos se suman los casos que no han sido denunciados por temor a las represalias, por eso, la Personería insiste en la protección y el conocimiento de la ruta de atención para darle más tranquilidad a los afectados.“Consiste en un albergue temporal por si no tienen a donde más ir y la extensión de medidas de protección para que se les garantice, no solo la vida, sino su integridad personal”, precisó Gómez.De acuerdo con la Personería, este año se ha registrado 810 declaraciones por desplazamiento, y durante los recorridos que realiza han encontrado viviendas abandonadas donde vecinos aseguran que se debe al desplazamiento.Ante esto, la Administración Municipal ha adelantado estrategias para garantizar la seguridad de los ciudadanos, sin embargo, insiste en que es importante denunciar la extorsión y otros delitos, pues el no pago de las llamadas vacunas es la principal causa del desplazamiento.
La Policía colombiana detuvo en el aeropuerto El Dorado de Bogotá a una ciudadana venezolana que pretendía transportar a España cocaína oculta en seis candelabros, informó este sábado esa institución. La mujer, de 31 años de edad y cuya identidad no fue facilitada, fue identificada por los agentes del aeropuerto después de observar un comportamiento extraño al llegar a El Dorado, indicó la Policía en un comunicado.Puede interesarle: Policía capturó a diez personas por hechos vandálicos en Remedios Tras inspeccionar su equipaje, encontraron los candelabros con un peso superior al frecuente y con un fuerte olor, lo que alertó a los agentes, agregó la información. En su interior transportaba la cocaína en una cantidad que no fue informada por las autoridades. La mujer fue puesta a disposición de las autoridades competentes y acusada del delito de porte, tráfico y fabricación de estupefacientes.