Una desconcertante noticia dieron los residentes del departamento de medicina interna de la UdeA el pasado lunes 16 de marzo en las clínicas e IPS en donde prestan sus servicios, “luego de una deliberación extensa y racional, hemos tomado la decisión como grupo de suspender las actividades asistenciales en los respectivos centros de rotación”, el cese se aplicaría hasta el día 23 de marzo.
Eso ha caído muy mal en la comunidad académica universitaria y en el gremio de la medicina local, porque es inherente a la profesión la vocación al servicio, y más aun teniendo en cuenta que se trata de médicos que están haciendo una especialización en medicina interna y precisamente, en este momento que se atraviesa con la pandemia del Covid-19, el personal de la salud se necesita.
EL MUNDO conoció que el decano de Medicina de la Universidad de Antioquia autorizó al personal del semestre once hacía abajo, es decir, a estudiantes de pregrado fundamentalmente, para que hicieran estudio virtual en estos días ante la importancia del aislamiento social; no obstante, los internos y los médicos graduados, quienes son residentes, estudiantes de especialización, deberían continuar rotando. Lo cierto es que evidentemente se negaron a esa directriz, pero, según la carta, lo están haciendo bajo el amparo de la misma facultad.
“Lo anterior a partir de nuestra convicción de que en nuestro rol de médicos residentes contribuimos significativamente por el momento con el aislamiento social a evitar la propagación del Covid-19”, dicen los residentes en su carta.
Los hospitales se quejaron
La suspensión de las actividades asistenciales la hicieron los residentes de forma inconsulta, simplemente notificando a hospitales donde rotan sobre su determinación. Por ejemplo, en el Hospital San Vicente de Paúl ellos anunciaron que se acogían al aislamiento social y para este martes 17 de marzo. Allí no se cuenta con sus servicios en las especialidades de medicina interna, pediatría, toxicología ni tampoco de médicos generales residentes en el área de urgencias y en cirugía general.
Ante la situación, como era de esperarse, los hospitales se quejaron ante la Universidad, recibiendo la respuesta de que el jefe de departamento "concilió" con los estudiantes y les permitió reemplazar la presencialidad en los hospitales, por telemedicina.
Lo que no ha calmado el malestar en los hospitales, antes bien, ha mantenido el disgusto porque se trata de una actuación que no daña lo asistencial pero sí lo afecta en su conjunto, desdiciendo su condición de médicos.
EL MUNDO también conoció que en el Hospital Pablo Tobón Uribe se van a pedir procesos disciplinarios a quienes tomaron esa actitud, que en medicina interna en ese lugar son 36 estudiantes.
“El grupo de residentes decide sumarse de forma unánime a la estrategia de telemedicina y queda a disposición de la facultad de medicina de la UdeA para rodear y fortalecerla permanentemente. Se acuerda que estaremos en comunicación para definir ajustes a este plan inicial y una monitorización del comportamiento de la pandemia”, se informa en una carta firmada por los residentes de medicina interna UdeA, Carlos Atencia, jefe de Sección, y Julián Humberto Ramírez Urrea, jefe del Departamento de Medicina Interna.
Por su parte, Santiago Patiño, profesor de medio tiempo de medicina interna, expresó: “Les decía a residentes que con los eventos cuando uno no está preparado, uno debe ser ponderado. A ellos no se les pide que atiendan a contagiados. Es la balanza: lo que se debe hacer socialmente, frente a su riesgo por algunos pacientes”.
También consideró el profesor Patiño que, por fortuna, en las instituciones prestadoras, la carga asistencial no recae sobre residentes, sino sobre profesionales. “No es dramático como en Bogotá o Barranquilla donde la carga recae sobre residente".
Las implicaciones legales
Cuando hay un cese de actividades, de la forma de una suspensión de los servicios de salud, que en la práctica es un paro, cualquiera que sea, siempre va a haber una ilegalidad, explicó a EL MUNDO, Clarita Mira, abogada y profesora de la Universidad CES, ya que este caso no tuvo el trámite, el procedimiento de una huelga, que se hace una vez se inicia un proceso de negociación colectiva en cada uno de los centros de trabajo.
El cese de actividades asistenciales no se puede ejercer cuando se trata de un servicio público esencial, que en varias sentencias de la Corte Constitucional se define como esencial porque está protegiendo el derecho a la salud de la población y el bienestar de la misma, por lo tanto, no se puede suspender.
“No tienen la posibilidad de hacer ceses de actividades, porque están afectando con ello el derecho de toda la sociedad, en este caso del municipio de Medellín, que atraviesa por un mal momento debido a la pandemia del Covid-19. En este momento, el servicio de salud tiene unas características que no permitirían suspensión de la prestación del mismo”, precisó la abogada Mira.
Pero, al tratarse de un aval de la facultad, que “concilió” con los residentes, el caso es aún más alarmante. EL MUNDO buscó respuesta del decano de la Facultad de Medicina a este asunto, léala en ElMundo.com.
Comentarios:
Sara
2020-03-19 15:55:14
Suficientes mensajes con cifras se han enviado como para replicar cifras que ni siquiera caben en mi cabeza. No se necesita saber mucha matemática o estadística para entender que si hay menos gente en contacto con otras personas, hay menos gente en peligro de contraer o contagiar el virus. Por esto se ha pedido que las personas solo salgan de sus casas para lo estrictamente necesario, y todas las personas que han podido trasladar su puesto de trabajo a sus casas lo han hecho. Todos sabemos que los médicos generales y especialistas que están contratados por un hospital tienen el deber legal y moral de continuar con sus labores asistenciales. Sin embargo, existe personal en formación, que sin estar laborando en áreas relacionadas con la contingencia, se está exponiendo a contraer y contagiar el virus. Casi todo el personal de salud tiene el sistema inmune lo suficientemente fuerte para no tener una infección grave por Covid-19. Por eso, si no ha quedado claro con lo expuesto en otros medios, quisiera aclarar que esta no es una medida egoísta sino una medida de Salud Pública. Quiere decir que lo que menos nos preocupa o escandaliza a muchos, es el propio contagio. Si los médicos estuviéramos muy preocupados por la “Autoprotección” no veríamos pacientes con tuberculosis y otros enfermedades contagiosas, y aún más ilustrativo, no montaríamos en metro a hora pico conociendo la alta incidencia que tenemos de Tuberculosis en algunas zonas de nuestra ciudad.
En el momento algunos residentes nos aislamos porque queremos protegernos como comunidad y hay actividades en los hospitales para las que no somos indispensables en este momento. Ojalá cuando el número de contagiados crezca, lo haga lo suficientemente lento como para poder brindar atención a cada uno con los recursos que requiere, y no con los que nos quedan. Ojalá cuando necesiten más médicos generales (aún no ha llegado ese momento como en España) , podamos ayudar en la contingencia porque nos mantuvimos sanos, y no tengamos que rechazar esa posibilidad porque nos contagiamos mientras jugábamos a ser especialistas imprescindibles. En unos años, si algo así se repite, tendremos que ser nosotros quienes permanezcan en el hospital, mientras mandamos a todo aquel que se está exponiendo (y exponiendo a muchas otras personas) innecesariamente a donde le corresponde: su casa. Todo debe analizarse en el contexto y en el tiempo pertinente. Nuestro situación en este momento no es la de España y no queremos que lo sea. Aplaudo el valor de los médicos españoles que están actuando coherentemente con su vocación de acuerdo a la situación tan triste que están viviendo, y estoy segura de que nuestra comunidad médica también estará a la altura cuando nuestro número de enfermos crezca.
Invito al periódico El Mundo, y en especial a sus editores, a que analicen muy bien el contenido de lo que están publicando. Todos tenemos derecho a expresar nuestro concepto frente a diferentes situaciones pero para eso existe un lugar: las columnas de opinión. A esta sección deben pertenecer los dos artículos cargados de juicios parcializados, publicados lamentablemente en la sección de Salud de su periódico por la misma periodista.
Tatiana
2020-03-18 17:22:39
Buenas tardes Giselle, soy Orgullosa residente de la UdeA. Van dos artículos en los que solo desprendes odio, e incitas a las personas a indignarse con la situación actual por la que yo y mis compañeros estamos pasando. Si eres una escritora profesional, debes de ver la noticia desde todos los ángulos de vista. Sabía usted que uno de los paradigmas fundamentales del periodismo es buscar las dos versiones de una información y no emitir juicios parcializados. y estoy segura que no has hablado con ningún representante estudiantil de los residentes. TU NO SABES QUE PASA! No entenderás que estamos en diferentes fases de la pandemia en Europa y aca, no entenderás que las decisiones tomadas son para crear frentes de apoyo ante la emergencia, no entenderás que nos estamos retirando de puestos de servicios electivos y enfrentandonos de manera cíclica el los servicios esenciales. Y eso amiga mía, es lo que se ha echo en otras partes del mundo con buenas respuestas, nosotros no tomamos decisiones por simple "creencias o supuestos". tomamos decisiones en base a los contactos que tenemos de paises como brasil, españa, italia y estados unidos. Pero jamas entenderás la verdadera razón de las cosas mientras en medio de una crisis te sientas detrás de un computador en la comodidad de tu casa o tu oficina, a crear escritos de odio y de reproches contra un personal que en este momento es el que mas apoyo necesita, que somos los médicos, en un momento de crisis donde crear odio es muestra de la clase de personas que somos. Asi que compañera, te invito a reflexionar, y que si querés hacer algo bueno por el informar a la gente, antes de sacar ese tipo de artículos hables con la gente directamente implicada y te crees un mayor entendimeinto de las cosas para no ir a sacar semejantes falacias. gracias amiga, por hacer de los momentos más difíciles algo peor. Espero que cuando te enfermes tu, tus hijos o tus abuelos quede algo de personal que atenderlos, ya que nos querés mandar a todos alla para que caigamos ante la enfermedad todos a la vez.
Edgar
2020-03-18 09:18:31
Claro que, como nadie está obligado a enfermarse y , mucho menos acabar con su vida, admito que tienen ésos residentes el derecho a guardarse. El problema es eminentemente ético, pues suponemos un grado especial de altruismo en el personal médico y paramédico, de tal manera que vale felicitar de corazón, mejor, a quienes en éstos mismos instantes están entregados en cuerpo y alma a quienes sufren cualquier dolencia, incluido el tal covid19.
Edgar
2020-03-18 07:49:33
Porqué cubren el cese de actividades de los residentes con tanto eufemismo? Las cosas se llaman como son: salieron de huida cuando más se les necesita, como las ratas cuando el barco se hunde.
Felipe
2020-03-17 17:35:55
Como persona que trabaja codo a codo con los médicos, puedo decir que los médicos residentes (médicos graduados estudiantes de una especialidad médica) pueden ser el personal más abusado del sistema, con horarios larguísimos y muchas veces cubriendo a sus profesores y firmando por ellos (cosa que es ilegal) en rondas en las cuales ni si quiera les pagan (al profesor si) solo por aprender y para cubrirle las espaldas al jefe. A pesar de todo esto y muchos otros vejámenes a los que son expuestos, ellos siempre están ahí con su deseo de aprender y ayudar. Jamás llamaría a un medico residente cobarde en su labor de médico, sin embargo, esto que está ocurriendo si es producto de su cobardía como personas que siempre bajan la cabeza cuando son insultados, vilipendiados y abusados física y verbalmente; y a veces hasta sexualmente, por sus profesores. Ellos y ellas simplemente se quedan callados porque saben que si hablan pueden echarlos o tener dificultades más adelante para conseguir trabajo. Esto es solo un reflejo de ese juego de poderes que existe en la facultad de medicina de la Universidad de Antioquia liderada por un Decano con la desfachatez de nombrar vicedecano a su pareja que ni siquiera es médico, hombre sin ética que la exige de los demás.
Este artículo es probablemente la respuesta de poder dada por el Dr. Luis Felipe Gómez al verse retado por sus colegas más jóvenes, tras insultarlos y disminuirlos por no doblegarse a sus mandatos, porque esto es lo que pasa si retas al poder, terminas siendo destruido por él usando los medios de comunicación como martillo. Esto, para los que no están en el mundo médico, es pan de cada día en las especialidades médicas. Desafortunadamente muchos (no todos) de los profesores médicos Especialistas, a pesar de ser excelentes profesionales, son personas déspotas, ruines y egocéntricas que tratan mal a todo aquel que ellos creen no están a su nivel, incluyendo a sus colegas estudiantes o médicos no especialistas. Quizás este no era el momento, pero las cosas se dieron como se dieron y quizás es hora de que los residentes se cojan las güevas o los ovarios y no se la dejen montar más de estos h.p. mal llamados maestros.
Juan
2020-03-17 16:59:19
Mal periodismo... Mala investigacion... Acaso un pescador sale a a pescar cuando le avisan que hay alarma de tsunami....
Los estudiantes son estudiantes... Sean de pregrado posgrado o maestrias, aca lo hay que entender es que el profesional en ciencias de la salud tiene el deber ser y de estar presente en donde la situacion lo amerite, eso no significa que vallan a la guerra sin armas, sin equipamiento??
El periodismo es comunicativo, informativo, no señalador de defectos o malas intensiones, menos provinie do de un sector tan golpeado como lo es el sistema de salud y de recurs sanitario de la costa(el universal) donde se por experiencia , que a sus propios residentes no se les brindan las condciones minimas de prteccion para el evento actual. Quieren mas numeros positivos de portadores y enfermos?
Juan Diego
2020-03-17 16:48:52
PREOCUPA LA CALIDAD PERIODÍSTICA EN COLOMBIA.
Preocupación deber suscitar el producto de informativo que se está ofreciendo al público ya suficientemente alarmado por la coyuntura mundial.
La OMS, ha resaltado el importante rol que los medios de comunicación tienen en esta crisis, en función del suministro de información oportuna.
Es preciso aclarar, ya que el artículo no es lo suficientemente explícito con ello, el valor epidemiológico de la medida tomada por los residentes. La pandemia por el virus SARS-COV-2 tiene un comportamiento exponencial que precisa de medidas de aislamiento poblacional para contener el número de infectados y por ende, el colapso de los sistemas de salud. Los residentes (personal en formación) cumplen funciones en la mayoría poco o nada relacionadas con los pacientes afectados por este virus. En este orden de ideas, su circulación libre por entornos de riesgo los hacen buenos fómites para llevar el virus a personas propensas a complicaciones por el mismo.
Por lo anteriormente expuesto, preocupa más que la idea principal del artículo no esté destinada a interrogar el por qué los hospitales no han emprendido las medidas para sacar de circulación parcialmente al personal no indispensable, el cual si será de mucha utilidad en virtud de sus conocimientos en medicina general cuando la crisis se desborde y se requieran médicos sanos para hacer frente.
Finalmente, este es un llamado a la prudencia a la necesidad de buscar asesoría cuando se van a tratar temas fuera de la competencia nuestra, pues información incompleta puede llevar a conclusiones imprecisas en el público.
Fernando
2020-03-17 16:00:14
La Universidad tomó la decisión de proteger la vida de su comunidad, por esto suspendió las clases. Los estudiantes de especializaciones médico-quirúrgicas son estudiantes de posgrado y por lo tanto tienen derecho a esa misma protección. Se trata de su vida y, bajo su condición actual de estudiantes, no están dimitiendo el cumplimiento de una obligación laboral, simplemente están aspirando a que se les respete el derecho a la vida y a la igualdad con sus compañeros de otros posgrados.
Por otra parte el heroísmo es admirable y en el caso de personas que han hecho votos para ofrecer su vida, es irrenunciable, pero esto no aplica a estudiantes, aplica a profesionales en servicio y los estudiantes no son profesionales en ejercicio (aunque tengan un título de pregrado).
En una situación como ésta la continuidad de la sociedad, y quizás de la especie, esta en juego y la Universidad y la ciudad deben cuidar a sus hijos. El cumplimiento del deber está en primera instancia en la cabeza de quienes están empleados para hacerlo, a los residentes ya les llegará su turno y, como dirá su juramento de grado, la sociedad y Dios los premiarán o los demandarán por su juicioso ejercicio. Entre tanto, los empleados son empleados y los estudiantes siguen siendo estudiantes así que no deben ir al cadalso a morir por nadie. Además esos estudiantes son hijos, esposas, esposos y familiares y nosotros que los amamos y los queremos vivos no estamos dispuestos a ofrendar sus vidas bajo ningún concepto y menos una imposición arbitraria.
natalia
2020-03-17 14:37:27
Debemos de proteger a nuestros médicos mayores, esto no se trata de primera linea, segunda línea y tercera línea, se trata de que aún no ha empezado los verdaderos estragos y nosotros los médicos jóvenes estamos huyendo, no cómo ratas, las ratas son las que nos han brindado la mayoría de los avances en medicina, estamos huyendo como lo que somos humanos deshumanizados en dónde lo más importante es el yo, tenemos que ir a proteger a nuestros maestros, ir a educar y aislar a los pacientes, tomar muestras, ir a revisar pacientes en casa, llamarlos y cuidarlos e insistirle con los cuidados, debemos ingeniarnos como agilizar las tomas de muestras y organizar desde ya como vamos a improvisar cuando se nos venga la avalancha encima de personas infectadas, dado que el aislamiento ya fue inútil, es realmente desmotivante como nuestros impuestos se fueron en ustedes, cómo los pacientes se prestaron para que aprendieramos, cómo el estado confío en nosotros y los hospitales universidades permitieron que crecieran nuestras mentes y aprendieramos, ahora que realmente nuestro país necesita imaginación para salir de esta tragedia, lo único que se nos ocurre es escondernos y después cuando la primera linea muera mis maestros, mis enfermeras, mis auxiliares, mis abuelos, mis padres, emerger de mi escondidate para salvar a los más fuertes. Los invito a todos a qué realicemos estrategias de optimizacion del recurso, utilicemos el dinero que el estado invirtió en nosotros en generar soluciones, eso sí más útiles en este momento de crisis, que el escondernos, cómo especialistas y médicos residentes ya tenemos que estar de la mano del estado preparando en dónde vamos a atender a los pacientes q esperamos, no es ver sobre el camino, ya sabemos que va a.pasar por qué ya pasó en Italia, Madrid y china no es.ir viendo cómo se comparta el virus. Ya lo sabemos, en vez de estar autoaislandose respetados médicos residentes los invito a montar las unidades respiratorias en universidades hoteles de la.mano del estado, la industria y la comunidad, por favor respetemos a nuestro prójimo y no seamos ridículos. Propongamos alternativas, no esperemos a que nos lleguen las soluciones del cielo por qué nos vamos a.morir todos, por qué cuando ustedes queridos médicos residentes se.enfermen ya no tendremos ni camas de UCI, ni insumo y mucho menos tocilizumab, por qué muy seguramente se la abre dado a mi profesor médico mayor que se enfrentó a la "primera linea de defensa". Aún estamos a tiempo para ser líderes como gremio médico y es la oportunidad de demostrar por qué amamos a nuestra profesión.
natalia
2020-03-17 14:18:46
Debemos de proteger a nuestros médicos mayores, y como médicos