El juego de vuelta del repechaje entre Perú y Nueva Zelanda se disputará el martes 15 de noviembre en el estadio Nacional, de Lima.
Decenas de peruanos recibieron este lunes (martes en Nueva Zelanda) con música y bailes folclóricos a la selección de Perú en Nueva Zelanda donde se medirá el próximo viernes (sábado en Nueva Zelanda) ante los All Whites el partido de ida de la repesca del Mundial de Rusia 2018.
La delegación peruana llegó a Auckland en un vuelo chárter de más de catorce horas desde Lima en el que viajaron 21 jugadores, a la espera de completar el equipo con los futbolistas que militan en clubes europeos.
En el aeropuerto de Auckland los esperaban peruanos residentes en Nueva Zelanda y otros llegados a la ciudad desde remotos lugares como Hong Kong y California (Estados Unidos) para presenciar el partido.
Amenizaron la salida de los jugadores peruanos del aeropuerto con bailes típicos como la marinera y el festejo para hacerlos sentir como en casa.
El combinado dirigido por el argentino Ricardo Gareca se trasladó posteriormente a un hotel de Auckland, que será su lugar de concentración durante hasta el día previo al partido, cuando se trasladarán a Wellington, sede del encuentro.
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A su llegada, los jugadores realizaron un ligero estiramiento después de instalarse en sus habitaciones y realizaron un ligero entrenamiento para terminar de aclimatarse tras el largo viaje.
Los jugadores Jefferson Farfán, André Carrillo, Édison Flores y Renato Tapia, llegaron desde Europa en vuelos comerciales de alrededor de 20 horas de duración al tener varias escalas.
El partido se jugará en el estadio Westpac de Wellington el próximo sábado a las 4:15 p.m., hora local (10:15 p.m. de Perú y Colombia, el viernes), y para los peruanos supone la posibilidad de volver a jugar una Copa del Mundo después de 35 años.