La revelación que hizo el medio universitario De la Urbe, sobre la creación de perfiles falsos en redes sociales por parte de la Secretaría de Comunicaciones de Medellín, como una táctica de manipulación de contenidos con el fin de defender la administración de Federico Gutiérrez, y atacar las campañas políticas de contradictores, dejó ver la importancia de las estrategias de marketing político en las campañas electorales y la necesidad de una vigilancia periodística minuciosa sobre la correcta inversión del dinero público en las Administraciones. 

Este medio universitario ha servido como plataforma del ejercicio periodístico de miles de estudiantes que han pasado por la Facultad de Comunicaciones y Periodismo de la Universidad de Antioquia, y ha sido referente en varias ocasiones para otros medios de comunicación masivos, en temas de investigación importantes, como la fatal operación Orión, aquel octubre de 2002.

Juan David Ortiz, profesor de periodismo de la Universidad de Antioquia, y quien publicó la investigación ‘La bodega de Fico’, recuerda cómo en aquel momento, semanas antes de la operación en la comuna 13, esos mismos estudiantes de periodismo se caminaron el sector para tratar de explicar el momento crítico por el que pasaba la comuna desde el año anterior.

Investigación, que al igual que la de ‘Fico’, se adentró a hablar de un tema que sirvió de referente investigativo para otros medios y develó un problema, del que tal vez, no hubiese sido posible saber a profundidad, sin el periodismo universitario. 

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“Para nosotros la enseñanza más valiosa que nos deja todo lo que pasó y seguirá pasando con ‘La bodega de Fico’ es el aprendizaje periodístico estudiantil y la importancia de la vigilancia al poder público, porque no sólo somos un laboratorio de enseñanza, somos un medio de comunicación que tiene incidencia y que puede poner agenda al igual que los medios masivos”, asegura Ortiz.  

Ortiz agrega que esta investigación no solamente puso sobre la mesa el manejo concreto de los perfiles falsos en redes, sino que ha abierto la discusión sobre la manera cómo la Alcaldía de Medellín maneja sus comunicaciones en todo lo relacionado a redes sociales; por tratarse además, de un alcalde que ha sido muy abierto al uso de estas plataformas para difundir su contenido. 

“Es claro que cuando se generan este tipo de movilizaciones y tendencias en redes, a partir de cuentas manipuladas, como lo muestra la investigación, se crea un ambiente generalizado de opinión alrededor de una u otra postura, y esto incide directamente en el pensamiento del ciudadano”, agrega el docente. 

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Estrategia política

Para Milton Rojas, magíster en Ciencia Política, docente en democracia, marketing político y opinión pública, es claro el impacto que tienen estas nuevas formas de comunicación en la reafirmación de las preferencias y los valores de las personas.

“La estrategia es sencilla y se trata de reafirmar las preferencias de la gente, y esto lo que hace es que se generen rechazos frente a lo diverso, y se creen menos posibilidades de aceptar al otro”, asegura Rojas. 

El docente agrega que es necesario que la ciudadanía se cuestione al consumir información política o de políticos, “no es una información crítica porque ya viene con una intencionalidad, ya tiene un propósito, y busca beneficiarse”, señala Rojas.

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“En este caso, la Administración no siente ningún tipo de responsabilidad política frente a sus actos, el ejemplo es que no han querido responder a las acusaciones y que no toman cartas en el asunto. Pero ahí entra la ciudadanía, que es pasiva para exigir ese tipo de rendición de cuentas a sus gobernantes. Siempre hay una exhibición de lo bueno, pero no nunca hay rendición de lo malo”, asegura Rojas.  

Para Ortiz, ‘La bodega de Fico’ sólo puso sobre la mesa los hechos verificados, el análisis posterior lo hizo la gente, “las conclusiones de los ciudadanos son las que han cuestionado una participación indebida en política de la Administración, y le corresponde a las autoridades competentes determinarlo”.  

El docente agrega que las investigaciones de periodismo universitario se hacen con la misma responsabilidad y rigurosidad que cualquier otro medio.

“No somos un simulador de periodismo, debemos ser vistos con otros ojos, tomamos decisiones editoriales importantes que, como en este caso, interpelan un poder y trabajan por la comunidad, además, generamos reflexión académica, y eso quedó demostrado con la trascendencia de ‘La bodega de Fico’”.