Presentamos un resumen y repaso, para actualizar, con su contexto y trasfondo político, de las más recientes novedades en los gabinetes departamental y de Medellín.
Comenzando abril, cuando ya llevábamos tres meses enjaulados, publiqué un trabajo, que redacto cada cuatro años, como servicio informativo al lector de EL MUNDO sobre quiénes hacen parte del poder en La Alpujarra, que incluye a todos los miembros de los dos gabinetes de Antioquia y Medellín, a los integrantes de las mesas directivas de la Asamblea de Antioquia y del Concejo de la ciudad, y a los titulares, tras sus respectivas elecciones, de las Contralorías regional y de la capital antioqueña, más el personero de Medellín. En los tres primeros meses de este 2020, año como para olvidar, se presentaron algunas y muy rápidas novedades en los equipos del Gobernador Aníbal y del Alcalde Daniel, que actualizamos en ese trabajo de abril. Pero tras el tenaz mayo, con ese covid acechando y la crisis social y económica azotando, volvieron a registrarse nuevos movimientos, y como que seguirán, en el sector público antioqueño y de su ciudad capital, ya sea por nuevos nombramientos, renuncias o destituciones, por lo cual hay necesidad de ordenar lo que ha pasado.
Recordemos que las últimas novedades en la burocracia parroquial comenzaron en mayo con la aún muy comentada y sorpresiva renuncia del médico y político Carlos Mario Montoya Serna en la gerencia de Savia Salud, sobre lo cual siguen preguntando y si era tan buen muchacho por que se fue, además que hay andando una tremenda película sobre su dimisión, en la que involucran hasta a Comfama, a rivalidades y conflictos añejos, etc., etc. Pero sigamos adelante y digamos que el relevo de Montoya fue el muy técnico, poco político, raro eso por haber estado muy vinculado a lo público en Bogotá, Luis Gonzalo Morales Sánchez, quien para más señas es familiar de nada menos que el hiperactivo oncólogo Jorge Morales Gil, quien recientemente se pegó aquí en El MUNDO tremenda despachada contra las muchas desafortunadas realidades que se viven en el sector salud colombiano. Tras este episodio los temblores en la gabinetología o burocracia doméstica se comenzaron a sentir en la Alcaldía de Medellín y terminando ese rarísimo mes de mayo, se confirmó la tirada de toalla de la secretaria de Desarrollo Económico, Paola Vargas González, también en circunstancias muy extrañas porque no fue bien explicado su adiós tan tempranero, y también fue rápidamente sustituida y en esa dependencia acaba de ser designado el administrador Alejandro Arias García, a quien trastearon dentro de la Administración Municipal de Medellín, pues era el titular de Control y Gestión Territorial, en cuya Secretaría el alcalde Daniel aún no ha nombrado que yo sepa o ellos hayan informado.
De Alejandro Arias se puede decir que hoy es de la cuerda del creo yo expolítico o por los laditos, pues está de lleno dedicado a la consultoría empresarial, Gabriel Jaime Rico, y no creo que regrese a la batalla electoral, puesto que le está yendo muy bien en lo privado y paralelamente ahora acompañado al alcalde Daniel, a quien conoció desde el 2007, cuando Rico se aventuró a ser candidato a la Alcaldía y Quintero se le midió al Concejo de la ciudad. Pero antes de ser del equipo de Rico, Alejandro Arias fue de la escuadra política de Augusto Posada dentro del Partido de la U, en cuya lista aspiró al Concejo de Medellín en el 2011, obteniendo casi 5.000 votos que no le dieron para superar a Chucho, al Santi y a Ramón, pero le sirvieron para ir a trabajar con Rico a Plaza Mayor, luego al Fondo Nacional del Ahorro otra vez al lado de Augusto Posada hasta que se terminó el gobierno de Santos, regresó con Rico, conoció al Alcalde, le cayó muy bien y ya va en dos secretarías, en sólo cinco meses.
Alejandro Arias, el nuevo secretario de Desarrollo Económico de Medellín.
Y cómo le caería de bien Alejandro Arias al alcalde Daniel o será que Rico es muy buena palanca, que le trazó la tremenda tarea desde la Secretaría de Desarrollo Económico de liderar la línea del plan de desarrollo enfocada en la reactivación económica y el Valle del Software, que contará con una inversión de $1.1 billones de pesos. El Gobierno de la ciudad espera desde dicha dependencia impulsar una transformación educativa para los empleos del futuro. En el corto plazo serán formadas más de 50.000 personas en talento especializado y competencias laborales para la Cuarta Revolución Industrial. Tenía que ser alumno de Rico, a quien le fascinan esos asuntos.
Siguiendo con los revolcones por la Administración Municipal de Medellín, mis gargantas profundas virtuales, una de ellas que anda escondido del covid por La Pintada, en estos tiempos de pandemia y de casa por “cárcel” preventiva, me aseguran que hubo sismo por tres subsecretarias. Dicen que renunció el Subsecretario de Formación y Participación Ciudadana, Fabio Ernesto Giraldo, también se marchó el subsecretario de Selección y Gestión de Proveedores, Edison Fredy Osorio al igual que la subsecretaria Vial y de Control, Viviana Tobón.
De esos tres marginamientos en igual número de subsecretarias, a ciencia cierta he confirmado hasta ahora la novedad en la de Formación y Participación Ciudadana. Y me alegra mucho por la persona que acaba de asumir ese cargo, pues se trata de Santiago Preciado Gallego, a quien tuve el gusto de conocer el año pasado en plena campaña electoral, cuando la directora de EL MUNDO, Luz María Tobón, me invitó a hacer parte de la Alianza Antioquia, una muy agradable comunión y ejercicio de integración del periódico con las universidades Nacional, de Antioquia y UPB, además del Consejo Territorial de Planeación y la Corporación Región, que este año se retiró, para la realización de una serie de foros y darle un muy diferente cubrimiento a las elecciones territoriales. Y pude hacer amistad con todo un bacán como es el profe Fabio Giraldo, familiar del búho senador y quien sabe de mis andanzas no muy santas por la amada U. de A. Precisamente a dicha Alianza y por la UN de Medellín asistía Santiago y también el colega Henry Horacio Chaves, coincidencialmente ambos, por diferentes caminos, en la actualidad en las mieles del poder en La Alpujarra. Santiago, gomoso como yo de la política, es historiador y magister en estudios políticos de la Universidad Nacional, me imagino que pasó por las clases del profe y parcero mío Édgar Ramírez. Fue asesor de la rectoría de la U. de A., exrepresentante estudiantil ante el concejo académico de la Universidad Nacional, UN, y tenía que tener algo malo, pues es líder social de la barra popular Los Del Sur, o sea, es verde. En esa Subsecretaría le corresponde, entre varias funciones, promover el control social y la rendición de cuentas como ejercicios responsables de participación ciudadana para garantizar transparencia en el manejo de los recursos públicos y en el cumplimiento de las alianzas y los acuerdos sociales. Implementar procesos formativos, mediante acciones estratégicas y propuestas pedagógicas, y a través del desarrollo de competencias, habilidades y destrezas, con incidencia en el desarrollo local, para la transformación de la cultura política y la participación democrática. Y proyectar al Municipio de Medellín y a las regiones en la formación política y en la participación ciudadana. Interesante. Y trabaja en llave con el secretario de Participación, Juan Pablo Ramírez, otro mano derecha del alcalde Daniel.
Y regresando y recapitulando por los lados de los movimientos burocráticos en la Gobernación de Antioquia, recordemos que el último fue el nombramiento de otro verde en partido político y en fútbol, como es Fabio Villa, quien es ya el director de la Escuela contra la Drogadicción, que comenzará a funcionar en las instalaciones de lo que fuera en Rionegro la deliciosa Hostería Llanogrande, donde yo pasé muy rico y bien atendido por quien fuera su gerente Martica Marina Múnera. Y la próxima pero inminente novedad será la posesión, seguramente la próxima semana, del abogado Unaula, pero muy y muy político conservador, de tendencia alvarista pero progresista, Lucas Cañas Jaramillo, el hijo de Gerardo. Lucas fue designado gerente regional para Antioquia y el Eje Cafetero de la Fiduciaria Central, otra de las grandes filiales del Idea. Cañas, quien anda muy juicioso, que lástima, aspiró el año pasado al Concejo de Medellín, quedando de cuarto en la lista azul y por fuera del Cabildo, pero hoy tiene demandada electoralmente la tercera curul de su partido y que ejerce Carlos Alberto Zuluaga, decisión que debe fallar en el segundo semestre de este año, si es que esta maldinga pandemia deja, en primera instancia el Tribunal Administrativo de Antioquia y de pronto y es lo más seguro en segunda ronda judicial el Consejo de Estado. De esa forma el Gobernador ha hecho recientemente dos nombramientos a la clase política parroquial en Fabio Villa y en Lucas, quien hoy es de la cuerda del senador Carlos Andrés Trujillo. Bien por Lucas que es muy piloso y también exparcerito nocturno en la agradable taberna “Los años 60” en la 70. Precisemos que el jefe máximo de la Fiduciaria Central es su presidente y el gran liberal socialdemócrata Oscar Marín, y muy merecido que siga ahí, pues es muy bueno y es el fundador junto con Eugenio Prieto del Liberalismo Socialdemócrata, organización liberal que con el diputado Luis Carlos Ochoa, en Antioquia, y el Flaco Mejía, en Medellín, le aportaron políticamente al Gobernador 50.000 votos o la mayoría de ellos.