El cuerpo físico en el ser humano tiene su historia a través de los siglos. Ha pasado de la adoración al descuido, de ser delgados a ser robustos. De la adoración de la belleza al castigo de ser feos. Y en todo esto hay dos palabras que tienen la esencia y la razón: los alimentos y comer.
PUNTO UNO: La filosofía popular dice que tú eres lo que tú comes. Y es filosofía porque esto viene desde las páginas del Génesis con el origen de los primeros alimentos, el pan sin levadura, el pescado fresco, los frutos secos, las frutas de cosecha, el cordero, el trigo, el vino. Y no se enfermaba, se nutrían. Han trascurrido miles de años y es mucho lo que se ha escrito y se sigue escribiendo sobre los alimentos y el comer. Hay escuelas, tendencias, modas, médicos, empresas, marcas y muchísimos charlatanes en trabajar y comercializar estas dos palabras: alimentos-comer. La esencia no está en solo comer. Está en qué y cómo estamos comiendo. Son muy pocos, se podría decir que contados los profesionales serios nutricionistas que tienen el conocimiento, estudio y acierto de saber que la verdadera salud está en lo que comemos.
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PUNTO DOS: En este punto de llegada a los 90 días de confinamiento por un virus que nos tiene la vida en un cambio total, el comer es bien importante por la parte que toca la salud y el bolsillo. Por el no salir, las compras al supermercado o plazas de mercado se han visto afectadas al pedirlas a domicilio. Y se está notando mucho una tendencia a escuchar eso de: “que pereza no quiero comer carne”. En este punto escogimos dos palabras bien interesante: Ser vegano. Ser vegetariano. Consulta que hicimos con la doctora Nathalia Rodríguez, nutricionista dietista de la Universidad de Antioquia, especialista en Nutrición funcional y en la actualidad cursa estudios superiores en Medicina biorreguladora y bases de la homotoxicología en la Universidad Javeriana. Tiene diez años de experiencia en nutrición clínica hospitalaria y es fundadora del programa Nutrición con el alma.
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PUNTO TRES: Ser vegano es no consumir ningún alimento animal, nada de carnes, pero además abstenerse del uso de productos y servicios de origen animal. Su alimentación se basa en vegetales y frutas. Los vegetarianos no consumen carnes, pero pueden decidir comer otros productos de animales.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS
1-¿Ser vegano o vegetariano tiene algún origen en alguna religión? ¿En dónde nace su origen y moda?
Creo que son diferentes las corrientes que han evocado el vegetarianismo y veganismo a lo largo de la historia. El origen del veganismo surge más o menos en la década de los 40 por Donald Watson para diferenciarse del vegetarianismo, haciendo de su convicción un estilo de vida que derivó en la fundación de uno de los movimientos sociales más importantes en el siglo XXI.
Pitágoras abogaba por la compasión hacia el resto de especies (animalismo) y seguía lo que podría ser descrito como una dieta vegetariana. Buda solía debatir sobre este tipo de dieta y la incluía dentro de su doctrina “ahimsa” (no violencia) como paso fundamental para lograr la elevación de la conciencia. Genios como Albert Einstein, Nikola Tesla, Leonardo da Vinci e importantes figuras literarias de la talla de Margaret Fuller o el dramaturgo y poeta español Miguel de Cervantes también practicaban el vegetarianismo y condenaban el sacrificio de animales como forma de alimentación.
En 1949, Leslie Cross publica el artículo In search of Veganism, en la que lograba establecer una definición del veganismo. Sugería que este fuera entendido como “el principio de la emancipación de los animales de la explotación a la que les somete el hombre”.
En 1986, finalmente, la definición de la palabra vegan es incluida en el Oxford Dictionary como “aquella persona que se abstiene de consumir cualquier producto de origen animal (vegetariano estricto)”.
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2-¿Por qué una persona escoge ser vegana o vegetariana?
Bueno, creo que a mi modo de ver no supone una respuesta concreta. Hay posibles razones, muchas; desde una sensación de fastidio asociada a una emoción, hasta un cambio de religión o un deseo por cuidar el medio ambiente y los seres vivos de determinado ecosistema, estas pueden ser razones que impulsan en el ser humano una decisión tan radical como esta.
3-¿Que influencia tienen las harinas y los dulces en el organismo al no comer ninguna proteína animal?
A ciencia cierta no existe una correlación que demuestre que la falta de consumo de uno, afecte el metabolismo o aprovechamiento de los otros, sin embargo es posible que un individuo que no consume ningún tipo de proteína animal sobre todo al principio de dicha práctica pueda experimentar mayor deseo de consumir harinas y dulces para favorecer la saciedad. De no ser guiado por un experto esta práctica antinutricional podría desencadenar en una malnutrición, que favorece la ganancia de peso corporal, el aumento de los porcentajes de grasa e incluso abona el desarrollo de enfermedades crónicas.
Uno de los beneficios más importantes que promueve el consumo de proteína de fuentes animales es la saciedad.
4-¿Se puede escoger ser vegano por un determinado tiempo para adelgazar?
Ser vegano no es una práctica dietética, es un estilo de vida, en ningún caso debería ser asociado el veganismo a la pérdida saludable de peso. En el caso de que se llegue a presentar pérdida de peso, será en consecuencia de una mala práctica del estilo vegano, este peso perdido sería a expensas de masa magra (muscular), e incluso esquelética y puede suponer un riesgo para la calidad de salud de la persona.
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5-¿Hay alimentos específicos que suplen la carne roja de res?
Yo diría que ningún alimento por sí solo logra suplirlo, principalmente porque la carne de res se considera fuente de nutrientes como el hierro, del cual es importante saber que el hierro de carnes y pescados se absorbe cinco veces más que el de legumbres y verduras. El hierro se encuentra presente en muchos alimentos y se encuentra en dos formas químicas, el hierro hemo y el hierro no hemo. El hierro hemo es exclusivamente aportado por alimentos de origen animal (carnes, vísceras, pescados, huevos) y el hierro no hemo está presente en alimentos de origen vegetal. El hierro hemo (procedente de alimentos de origen animal) se absorbe del orden de 25 por ciento de lo que ingerimos, mientras que el hierro no hemo (procedente de alimentos de origen vegetal) se absorbe en función de las reservas corporales en torno al 3 o al 5 por ciento de lo ingerido. Las personas que se inclinan hacia el estilo vegetariano o vegano presentan niveles más bajos de ferritina que las no, lo que indica que tienen menos reservas de hierro.
El motivo parece estar relacionado con la baja ingesta de proteínas en planes de nutrición mal estructurados. Con pocas reservas de hierro, se reduce la capacidad de hacer frente a la disminución sanguínea de hierro (producida por cualquier causa) aumentando así el riesgo de padecer anemias nutricionales.
6-¿El organismo se acostumbra a ciertos alimentos?
Absolutamente y el hecho indiscutible de que así sea, puede acarrear consecuencias dramáticas para el estado nutricional de un individuo, ya que se estaría pasando por alto uno de los principios de la alimentación saludable que es la variedad, principio que garantiza obtener de diferentes tipos de alimentos los macronutrientes, vitaminas, minerales y oligoelementos necesarios para mantener un correcto estado Nutricional, que nos permita el funcionamiento de sistemas, órganos y funciones vitales.
7-¿Un vegano puede donar sangre?
Por supuesto, siempre que sus niveles de hierro en sangre así lo permitan, de lo contrario sería contraindicado, como en cualquier persona independientemente de su práctica alimentaria.
8-¿Qué tan recomendados son los deportes y ejercicios en los veganos?
Para conseguir un buen rendimiento, hay que llevar una alimentación rica en proteínas (cereales, legumbres y frutos secos), minerales (frutas y verduras) y carbohidratos (legumbres, cereales, frutas y verduras).
Uno de los grandes mitos que existen en el veganismo es que la proteína que se ingiere no es completa, lo cual es falso. Cabe tener en cuenta que la soja, la quínoa o el amaranto tienen todos los aminoácidos esenciales. La soja aporta una gran cantidad de aminoácidos. Siendo cierto que el resto de proteína no contiene todos los aminoácidos esenciales, es posible obtenerla combinándola, como por ejemplo combinando legumbres con frutos secos, o legumbres con cereales.
Así que si eres vegano, también puedes ser un excelente deportista.
PUNTO CUATRO: Nuestro cuerpo es una red que se comunica físicamente con todos sus órganos integralmente. En el interior de esta red está la conciencia, el pensamiento, los sentimientos, el razonamiento. Todo es parte de un “yo” único. El alimento completo es de alma y cuerpo. Comer es un arte que se complementa con el conocimiento de los alimentos.