La segunda temporada de lluvias que se presenta de fuerte manera en la zona ha provocado el desbordamiento de varios ríos, por lo cual, según informes del Dapard, Vigía del Fuerte se encuentra inundado en un 90% de su territorio y Murindó en un 100%.
Complicada situación atraviesan los municipios de Murindó y Vigía del Fuerte, en el Urabá antioqueño, debido a las miles de personas que se encuentran damnificadas por las inundaciones que ha provocado el desbordamiento los ríos Atrato, Archía y Murrí.
La segunda temporada de lluvias que se presenta de fuerte manera en la zona ha provocado el incremento de estos ríos, por lo cual, según informes del Departamento Administrativo del Sistema de Prevención, Atención y Recuperación de Desastres en Antioquia (Dapard), Vigía del Fuerte se encuentra inundado en un 90% de su territorio.
“Además, debido al fuerte terremoto que destruyó Murindó en el año de 1992, este municipio tuvo que ser reubicado temporalmente, razón por la cual, cuando el río Atrato crece, ocurren este tipo de escenarios que hoy tienen a Murindó inundado en un ciento por ciento de su zona urbana y alrededor de seis o siete comunidades indígenas y afrodescendientes que están sobre la rivera del río”, explicó el capitán René Bolívar, coordinador de la Unidad de Manejo de Desastres del Dapard.
Por ello, según explicó el funcionario, este miércoles se desplazó una comisión del Dapard, acompañada por la Secretaría de Salud y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, en el helicóptero del Programa Aéreo de Salud para brindar asistencia en la identificación de los afectados por estas inundaciones.
“En estos momentos los consejos municipales de gestión del riesgo de ambos municipios vienen haciendo un estudio de acciones y necesidades que serán enviadas a la Gobernación de Antioquia y al Dapard para poder mirar de qué manera entramos a intervenir”, destacó el capitán Bolívar.
Asimismo, aseguró que en cuanto tenga este reporte comenzarán la búsqueda inmediata de sitios secos para poder reubicar a los damnificados mientras baja el nivel del río.
Finalmente, el funcionario del Dapard reconoció que gracias a la cultura de estas comunidades para hacerle frente a estas situaciones, las cuales son recurrentes, las inundaciones hasta el momento no han dejado ninguna víctima mortal.