"Creemos que es positivo que platiquen, pero no debemos esperar acuerdos sustantivos", afirmó el canciller mexicano Luis Videgaray.
El canciller mexicano, confió este jueves en que la primera reunión entre el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, y el estadounidense, Donald Trump, mañana viernes en Hamburgo, se celebrará en un tono "amigable y respetuoso", pero descartó que de ella salgan grandes acuerdos.
Videgaray hizo estas declaraciones en el avión presidencial camino a París, donde Peña Nieto se entrevistará con el presidente francés, Emmanuel Macron, antes de viajar a Hamburgo para participar en la cumbre del G20.
En ese marco, este viernes será su primera entrevista personal con Trump, después de que Peña Nieto cancelara una visita a la Casa Blanca a comienzos de año por las tensiones sobre el muro que el presidente estadounidense planea construir en la frontera y hacer que México pague.
El mexicano confió en que el encuentro se conduzca en "tono amigable y respetuoso" y señaló que, aunque pueda haber diferencias en temas "sustantivos", lo importante es "que sea un paso más en la dirección de seguir trabajando juntos" en temas que unen a los dos países, como el comercio, la inmigración, los derechos de los migrantes o el combate al crimen organizado.
Tras recordar que ambos presidentes han hablado por teléfono en varias ocasiones, reconoció que una reunión de este nivel siempre es importante, pero pidió no tener expectativas demasiado elevadas ante el encuentro, que será corto, como todas las entrevistas que se organizan durante cumbres internacionales.
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El presidente mexicano mantendrá el sábado otras cuatro entrevistas bilaterales, entre ellas una con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, un "amigo de México desde hace muchos años", según palabras de Videgaray.