El exmandatario aceptaría cargos como parte de un proceso de colaboración con la justicia a cambio de recibir rebajas en su condena y devolver los dineros del departamento.
La Fiscalía General de la Nación le imputó cargos este martes al exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, por los delitos de concierto para delinquir, interés indebido en celebración de contratos, celebración de contratos sin cumplimiento de requisitos legales, peculado por apropiación y falsedad en documento público y privado.
Lyons, quien se presentó a la audiencia vía teleconferencia desde el Consulado de Miami, lugar en donde se encuentra como testigo protegido de la DEA, aseguró que sólo iba a aceptar el delito de concierto para delinquir, explicando que ya realizó un preacuerdo con el ente acusador para recibir un principio de oportunidad por los demás cargos y así pagar sólo cinco años y dos meses de prisión.
Por su parte, la defensa del exmandatario manifestó que la negociación con la Fiscalía se adelanta desde hace cuatro meses y que el principio de oportunidad está en proceso de aprobación por un magistrado de Control de Garantías.
Según la investigación, Lyons y el senador Musa Besaile hicieron un pacto para cometer irregularidades con dinero del departamento de Córdoba, las cuales iniciaron el segundo semestre del 2011 y le habrían costado al erario público al menos 80.000 millones de pesos.