Los cultivos de coca en Colombia aumentaron un 52% en 2016 al pasar el área sembrada de 96.000 a 146.000 hectáreas, informó este viernes la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc). "El mayor crecimiento se registra en zonas fronterizas, especialmente en Nariño, Putumayo y Norte de Santander, los mismos territorios con mayor número de hectáreas reportadas en el informe del 2015", señala el informe dado a conocer este viernes en Bogotá. Sobre la producción potencial de cocaína, el estudio calculó un aumento del 34% al pasar de 646 toneladas en 2015 a 866 en 2016.

La ONU también señaló que el precio del kilo de hoja de coca subió un 43% respecto a las estimaciones del 2013 "año en el que la tendencia empezó a ser el aumento del área sembrada". Si bien el documento alerta sobre el incremento de los cultivos de coca en Colombia, también destaca que las autoridades aumentaron las incautaciones en un 49%.

Según el informe, en 2015 fueron confiscadas 253 toneladas de cocaína y en 2016 ese volumen subió a 378 toneladas. La ONU considera que "aunque los datos indican una situación
preocupante, el escenario en Colombia se muestra propicio para una solución sostenible a partir de la transición de una estrategia centrada en los cultivos a una estrategia centrada en la transformación de los territorios y en las comunidades". 

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Destaca igualmente que comienza a consolidarse un panorama de confianza entre el Estado y las comunidades para la construcción conjunta de soluciones sostenibles. Asegura que en ese sentido serán necesarias acciones integrales que enfrenten las economías ilícitas y el crimen organizado para permitir que los cultivadores tomen decisiones "libres sin la presión de grupos armados al margen de la ley y promuevan en el territorio alternativas legales de desarrollo", especialmente tras la firma de la paz con las Farc. 

Hay solución 

El representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), Bo Mathiasen, afirmó  que pese al "panorama complejo" que se aprecia en Colombia debido al crecimiento de las hectáreas cultivadas con coca hay "un escenario que es propicio para una solución sostenible". "El informe muestra un panorama complejo, una situación preocupante pero también un escenario que es propicio para una solución sostenible", dijo Mathiasen en la presentación de este informe.

Para Mathiasen, aunque los datos apuntan a una ampliación del fenómeno", considera que empieza a consolidarse ese escenario que implica una transición estratégica hacia poner el objetivo estatal en "la transformación y desarrollo de los territorios".

"Es cada vez más evidente, aparecen muestras de confianza para una construcción conjunta entre Estado y comunidades en procesos de transformación territorial", agregó el funcionario de la ONU. 

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Para él, la estructura institucional que se refleja en el acuerdo de paz firmado entre el Gobierno y las Farc "está cada vez más consolidado", puesto que se han iniciado "procesos de concertación en zonas donde era prácticamente imposible el diálogo abierto con las comunidades".

Mathiasen calificó ese acuerdo como "una ventana de oportunidad" y aseveró que "es esperanzador" ver como hay muestras de la construcción de una solución sostenible "no solo en el discurso", sino también "en la realidad del territorio".

"Las acciones centradas en cultivos ilícitos satisfacen la inmediatez de las cifras y golpean la economía legal, pero si no conducen a transformaciones efectivas de los territorios de las comunidades que los habitantes están condenadas al fracaso o carencia de sostenibilidad", concluyó Mathiasen.