Los dos últimos gobiernos, con cierto halo de irresponsabilidad, han dilatado la toma de una decisión sobre la explotación aurífera en el Páramos de Santurbán
Amigo lector no le ponga doble sentido al título del artículo, porque arrecho en Santander significa bravo, enojado, iracundo; nada que ver con el significado sexual en nuestra tierra.
Los bumangueses están arrechos con el presidente Iván Duque debido al nombramiento del ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, como ministro Ad hoc en el ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, para encargarse del caso la explotación minera en el Páramo de Santurbán, pulso con la empresa Sociedad Minera de Santander -Minesa-, empresa qué hace parte del grupo Mubadala Investment Company, de los Emiratos Árabes, las comunidades vivientes en la zona, los ambientalistas, la sociedad civil y los entes gubernamentales regionales, debido a la importancia que tiene el Páramo de Santurbán como proveedor hídrico de las Áreas Metropolitanas de Bucaramanga y Cúcuta, como de otros municipios de la zona.
La importancia del Páramo de Santurbán, radica en su biodiverisidad, aparte del rol de los páramos en el equilibrio ambiental. El Páramo está ubicado entre los 3000 y 4290 msnm, con una extensión de 80000 hectáreas, cobijando a 15 municipios de los departamentos de Santander y Norte de Santander, allí se encuentran 457 especies de plantas vasculares, helechos, entre otros, además de 293 especies de animales vertebrados.
La puja por la defensa del agua lleva más de dos años, en donde los dos últimos gobiernos, con cierto halo de irresponsabilidad, han dilatado la toma de una decisión sobre la explotación aurífera en el Páramos de Santurbán, pero, lo gota que llenó la copa de los bumangueses fue la designación del ministro Alberto Carrasquilla para entenderse del caso, máxime cuando el señor Carrasquilla tiene resistencia en la región gracias a los famosos Bonos del Agua, que condujo a 117 municipios colombianos a endeudarse para el desarrollo de acueductos con el compromiso de vigencias futuras del Sistema General de Participación -SGP-. El modelo fracasó y el gobierno nacional en 2014 debió ir al rescate de los municipios endeudados, además, en Bucaramanga, desde diversos actores institucionales como de la sociedad civil, reclaman que el ministro Carrasquilla no tiene las competencias requeridas para dirimir temas ambientales.
En la situación actual del país, en donde está clara la debilidad institucional para enfrentar la problemática social, el presidente Duque debe reconsiderar la designación del ministro Carrasquilla. Para los próximos se están convocando a marchas para presionar la revocatoria como de Alberto Carrasquilla como ministro Ad hoc.
Señor presidente Duque, ¿cuál es la necesidad de ser ciego, sordo y mudo ante las peticiones regionales?, recuerde que históricamente cuando los santandereanos se arrechan ponen en jaque la institucionalidad, no es sino hacer memoria de la Pola y el rol jugado por los santandereanos en los diferentes conflictos del país. ¿Para qué sumar otra tensión innecesaria a su débil gobernabilidad?