Parece que hay dos clases de habitantes: el que roba y el que no roba, este frecuentemente es robado.
¡Ladrones! Es un grito muy conocido en Colombia, lo estoy oyendo desde que nací y entendí qué era a mis 7 añitos cuando conseguí el escaso Uso de Razón.
Aprovecho esta oportunidad para comentar cosas que pueden sucederle a cualquiera, y que seguro le han sucedido a la mitad de la población.
Parece que hay dos clases de habitantes: el que roba y el que no roba, este frecuentemente es robado.
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Como fui maestra de castellano pienso que todo el mundo entiende el castellano, el español, el colombiano-También pienso que como dizque estamos en un país católico, apostólico y romano, cristiano, que cree en Jesús que murió en la cruz para abrirnos el cielo a los humanos que no sabemos qué es qué. Ni qué es bueno ni qué es malo.
Algunos de los que fuimos a algún colegio católico como lo eran todos, estudiamos Los Diez Mandamientos de la Ley de Dios, que, como lo dijo un “cura” para mí sabio:
-Si se practicaran los diez mandamientos, se evitaran los Pecados Capitales y se hicieran las Obras de Misericordia, no habría necesidad de constituciones.
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Entiendo que lo que hoy llamamos Constitución se inventó en varios países en cuanto se tumbaba y cortaba la cabeza a cesares, a reyes que por algo estaban allí trepados y que daban órdenes a su gusto, amaño y percepción.
En este siglo XXI, ni siquiera es que “se desee la mujer del prójimo" (sino que se la toma, lo mismo que al hombre de la prójima). Ni "se codician los bienes ajenos" (sino que se agarran y embolsican. Luego se venden por precios despreciables.)
Y a lo mejor pocos saben cuál es el 7° mandamiento: "No hurtar" hurtar significa robar, o sea apropiarse de las cosas de otras personas, y gozarlas, hasta que tarde o temprano sean detectados por las cámaras, las huellas de lágrimas, orinas y babas, por los que los vieron entrar, y salir ca(r)gados, y al fin cuentan lo que saben y, finalmente, los aplicables polígrafos.
Además, claro que las personas robadas saben dónde habían dejado cada cosa, ejemplo una jarra de plata en un patio con una planta, y no en una caja entre un closet.
Al salir de la casa con su jefe, el curtido ladrón va preparando el camino, diciendo: - “No diga al portero que se va de viaje, así le siguen poniendo cuidado al apartamento." (¿?) “No deje Tv ni radio prendidos, se le dañan”.
Total que los dueños van saliendo de su casa y cuando regresan se encuentran con que las joyitas que quedaban, han desaparecido aunque la gente de hoy ignore el nombre y el valor de las cosas antiguas, tampoco se encuentran las cositas de plata, las de lata sí.
Lo que más se aprecia es lo primero que se llevan. Tengo que contar que vi al sobrino de uno de mis primeros ladrones, cantando en el Coro con medio collar de mi madre ajustado a su muñeca derecha en el Teatro de Sk. en la capital.
Y muy hábiles aquellos bandidos que saben cómo se copian firmas con perfección, y con cheques robados desocupan cuentas, por las que nadie responde. Lo que en un extracto se presenta como pagado, sin un destinatario exacto, tiene un nombre: "débito genérica", y con eso parece que se puede entregar todo lo que existe en la cuenta corriente en un lapso de 37 minutos. Sin ocurrirse llamar a informar al propietario, que nunca ha hecho ese tipo de gastos.
La comedia ha terminado. Así dijo Dante Alighieri cuando decidió morirse, seguro de la aburrición.
*Psicóloga UJ Filóloga UdeA