Tras una caída en sus utilidades, la famosa empresa de juguetes tomó esta decisión.
El fabricante danés de juguetes Lego anunció este martes que despedirá a 1.400 empleados, un 8 % de su plantilla, para reorganizar la compañía tras registrar en el primer semestre una caída en su facturación y en sus ganancias.
Lego, cuyas ventas y beneficio neto cayeron un 5 % y un 3 % interanual, respectivamente, pretende que la mayor parte de las bajas se efectúen antes de final de año. Más de un tercio de los despidos, entre 500 y 600 empleados, afectarán a Dinamarca, donde se encuentran 4.500 de los 18.000 trabajadores de la juguetería.
La compañía resaltó en un comunicado que en los últimos cinco años ha construido una organización más compleja para sostener un crecimiento global de dos cifras y que es necesario simplificar su estructura para mantener la tendencia. "Significa que construiremos una organización más pequeña y más sencilla que la que tenemos hoy, lo que simplificará nuestro modelo de negocio y nos permitirá llegar a más niños", señaló el presidente del consejo de administración, Jørgen Vig Knudstorp.