Lavado de manos gubernamental

Autor: Juan Manuel Galán
1 junio de 2020 - 12:01 AM

En esta última semana se percibe que no estamos tomando en serio la covid-19. Muchas personas salen a la calle sin tapabocas ni respetan el distanciamiento, como si la emergencia se hubiese terminado

Medellín

El pasado 28 de mayo, el presidente de la República expidió un nuevo decreto que extiende la cuarentena preventiva obligatoria hasta el 1º de julio, alargando el confinamiento en todo el país por un mes más. Este decreto, sin embargo, extendió las excepciones en un intento de resolver el falso dilema entre salud y economía. De nuevo las medidas confunden a la ciudadanía, otra vez se presenta un enfrentamiento entre el Gobierno Nacional y la alcaldía de Bogotá. Estas contradicciones ocurren en el peor momento, cuando América Latina es el nuevo epicentro de la pandemia y la gente siente un desgaste físico, emocional económico y mental por el encierro prolongado. Además, el número de camas UCI y de respiradores reportado, indica que todo el esfuerzo de posponer a través de la cuarentena el pico de contagios se perdió. La lógica del confinamiento obligatorio es permitirle al sistema de salud ganar tiempo, aumentar su capacidad, para de esta forma evitar su colapso. Las cifras indican que eso no ocurrió, lo que nos deja en el peor de los mundos.

Lea también: A este virus lo mata la solidaridad

Justo el día en que Colombia reportó el récord de 1.322 casos, el gobierno se “lava las manos” y deja la facultad de restricción de actividades a los alcaldes y gobernadores. No es comprensible que en el momento en que la epidemia inicia una curva de ascenso hacia su pico, se permita la movilidad de la gran mayoría de la población.

Es cierto que las cifras muestran una situación económica cada vez más dura e insostenible para la mayoría de los hogares del país. Durante el mes de abril se perdieron 5,4 millones de empleos, alcanzando una tasa de desempleo del 19,4%. A lo anterior se suma la población laboral informal que vive del diario y que representa un porcentaje que supera el 50% en promedio. Lo más grave, las estimaciones apuntan a un retroceso de treinta años en materia de reducción de pobreza y pobreza extrema.

Tenemos que ser conscientes de que reactivar muy temprano la economía, significa asimilar con objetividad y fortaleza, dolor y pérdida para miles de familias. En esta última semana se percibe que no estamos tomando en serio la covid-19. Muchas personas salen a la calle sin tapabocas ni respetan el distanciamiento, como si la emergencia se hubiese terminado. El uso del tapabocas y la cuarentena son actos de respeto y empatía hacia los demás. Cuando yo uso el tapabocas, estoy protegiendo a quienes me rodean de un posible contagio. Si los que me rodean lo usan, me están protegiendo a mí del contagio. Si guardo la cuarentena, estoy protegiendo al sistema de salud de un posible colapso. Es importante entenderlo y cuidarnos entre todos, con disciplina y responsabilidad.

A pesar de lo anterior, se podría reducir el contagio y la mortalidad si aumentan las campañas de prevención y sensibilización a toda la población. Se debe hacer énfasis en que los empleadores pueden cuidar a sus trabajadores, porque ya muchas empresas exigen el desplazamiento al lugar de trabajo, por lo cual es necesario que los protocolos de bioseguridad sean asumidos con estricto rigor.

Le puede interesar: El covid-19 despertó nuestra conciencia colectiva

 

Por estos motivos, exhorto a que el sector público y privado cuiden su activo más preciado: los trabajadores. No cabe duda de que la “normalidad” como la conocíamos, no regresará en mucho tiempo, por lo menos hasta que la vacuna llegue a Colombia. Es la hora de ser disciplinados, constantes y perseverantes. Todos debemos asumir una cuota de sacrificio, sobre todo por la vida de nuestros ciudadanos más vulnerables.

Compartir Imprimir

Comentarios:

Edgar
Edgar
2020-06-01 15:24:18
Es obvio que el señor Galán no escatima esfuerzos para demeritar, aún con falsas premisas, todo lo que se pueda al señor Presidente. Sí hay dilema entre el bienestar de la salud y la economía, si no fuera así, pues que nos encierren a todos hasta el año entrante, ah? O, por lo contrario que se abran todos los negocios ya y salgamos todos a la calle, qué le parece? Y la alcaldesa de Bogotá, si no lo sabe, está edificando su candidatura presidencial, no lo sabía? Es tan torpe que , en lugar de dar salidas dosificadas a los bogotanos, como se hace en otras ciudades como el área metropolitana del Aburrá, dejando solo una quinta parte cada día, pues esa señora autoriza el 50%, qué tal! Y , claro, el crecimiento de contagios en Bogotá es superior a la media nacional. Pero ésto no lo dejan ver sus áulicos.

Destacados

Carlos Vives
Columnistas /

Para adelante y para atrás

El Mundo inaugura
Columnistas /

EL MUNDO fue la casa de la cultura de Medellín

Mabel Torres
Columnistas /

Firmas y responsabilidad

Guillermo Gaviria Echeverri
Columnistas /

La desaparición de EL MUNDO

Fundamundo
Columnistas /

Mi último “Vestigium”

Artículos relacionados

Recinto del senado
Columnistas

Semana Santa en ausencia

No es posible que el Congreso de la República pretenda sesionar el próximo 13 de abril de manera presencial para “instalar” el período legislativo. En un acto...

Lo más leído

1
Justicia /

La verdad de La Escombrera no está en agenda de la institucionalidad

Increíble. Alcaldía archivó información sobre La Escombrera de la 13 y Fiscalía extravió restos de...
2
Columnistas /

“Godos” y liberales

Nuestros partidos políticos se alejan de ideologías extranjeras al mismo tiempo que se dedican a ensalzar...
3
Columnistas /

Néstor Armando Alzate y su periodismo auténtico

Hablar de la vida y la obra del gran amigo y colega Néstor Armando Alzate, escritor, profesor...
4
Ambiente /

Aprenda a leer y a encontrar la información de calidad del aire

Estos son algunos de los pasos para comprender y hacer una lectura más técnica de la información...
5
Columnistas /

¿Dulcecito o dulcesito?

El elemento que agregamos al final de una palabra para cambiar su sentido se llama sufijo… Este sufijo...
6
Columnistas /

Buen político o político bueno.

Más allá de los ejemplos, pero con ellos, el desnudo del poder realizado por Maquiavelo, afana el...