Iván Duque expuso sus condiciones para avanzar en las conversaciones con el Eln.
El presidente de la República, Iván Duque Márquez, afirmó que un proceso creíble con el Eln “debe cimentarse en el cese total de acciones criminales, con estricta supervisión internacional, y tiempos definidos”.
El mandatario agregó que “queremos avanzar, pero para avanzar hay que dejar la impronta de que el pueblo colombiano no se va a dejar intimidar por la violencia ni presionar por la violencia en ninguna forma”.
En su discurso de posesión denominado “El Pacto por Colombia” anunció que “durante los primeros 30 días de nuestro gobierno vamos a realizar una evaluación juiciosa, prudente, responsable, y analítica, en detalle, de lo que han sido los últimos 17 meses de conversaciones que ha adelantado el gobierno saliente con el Eln”.
En ese orden de ideas, indicó que sostendrá reuniones con Naciones Unidas, con los países que han venido apoyando ese proceso y con la Iglesia Católica, para que “en el marco de la independencia institucional nos den su opinión sobre el mismo”.
Construcción de la paz
Con respecto a la construcción de la paz, el Jefe del Estado manifestó en la parte de su discurso denominado “Pacto por la Legalidad”, que desea terminar “esas divisiones falaces entre amigos y enemigos de la paz, porque todos la hemos querido y todos queremos construirla. Por el respeto a Colombia y por el mandato ciudadano que hemos recibidos, desplegaremos correctivos para asegurar a las víctimas verdad, justicia proporcional, que reciban también la reparación efectiva y que no exista repetición en ningún lugar del territorio”.
Afirmó que también “corregiremos fallas estructurales que se han hecho evidentes en la implementación. Las víctimas de Colombia deben contar con que habrá verdadera reparación moral, reparación material y reparación económica por parte de sus victimarios y que nunca serán agredidas por la impunidad”.
Dijo que cree en la desmovilización, en el desarme y en la reinserción de la base guerrillera, pues muchos fueron reclutados de manera forzada, y expresó que “estoy convencido y comprometido con buscar todos los días, para las bases de esas organizaciones, oportunidades productivas y velar por su protección”.
Igualmente “nos esforzaremos por la provisión de bienes públicos en todas las regiones del país, empezando por las que han sido golpeadas de manera dolorosa por la violencia”.
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Narcotráfico y secuestro no conexos
En torno de los grupos armados ilegales que secuestran y se dedican al narcotráfico y “pretenden ganar beneficios mimetizando sus actividades con perfumes ideológicos, sencillamente que a partir de ahora vamos a declarar ante el Congreso de la República -con una reforma constitucional- que ni el narcotráfico ni el secuestro serán reconocidos como un delito conexo al delito político”.
Advirtió que tales delitos no podrán argumentarse como mecanismos para financiar o promover ninguna causa.
Puso de presente que la construcción de paz “significa que derrotemos los carteles de la droga que amenazan distintos lugares del territorio nacional. Vamos a ser efectivos en la erradicación y sustitución de cultivos ilícitos de la mano con las comunidades, en la puesta en marcha también de proyectos productivos y vamos a romper las cadenas logísticas y de abastecimiento de las estructuras del narcotráfico”.
“No vamos a permitir que los “disidentes”, que los “combos”, que los “clanes”, las mal llamadas “oficinas” sigan haciendo de las suyas en la Costa Pacífica, en nuestras fronteras y en ningún lugar del territorio. Velaremos por la sanción efectiva de quienes pretendan reincidir o burlarse de las víctimas ocultando bienes o recursos necesarios para la reparación, agregó.
Aseveró que en su condición de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y de la mano de las autoridades judiciales “vamos a actuar en todo el territorio nacional y vamos a desarticular esas redes de crimen organizado y llevarlas a la Justicia haciendo valer ese principio: el que la hace, la paga”.
Tras agradecer el apoyo de los países a esa agenda, agregó que valora muchísimo el respaldo de Estados Unidos para derrotar el crimen transnacional.
El Presidente invitó a trabajar por la seguridad ciudadana y a perseguir a las estructuras criminales, y dijo que los jíbaros que inducen a los niños a las drogas deben ser judicializados.
“Sancionemos con cadena perpetua a los proxenetas, a las madame, a los violadores y asesinos de menores y de mujeres”.
Contra la corrupción
El nuevo mandatario invitó a que “formemos una sociedad de valores, que desde edad temprana formemos en cívica, urbanidad y respeto; significa que creemos una muralla ética que blinde a los colombianos y en estricto apego a los valores de familia.
“Endureceremos las penas a los corruptos y les aplicaremos que no tengan casa por cárcel ni reducción de penas, vamos a sancionar severamente a las empresas, sus dueños y sus gestores que corrompan funcionarios, prohibiendo, además, su contratación con el Estado”, anunció.
En el mismo tenor sostuvo que como lo dijo en campaña se promoverán los “pliegos tipo” en todos los sectores del Estado y “vamos a limitar a no más de tres períodos la presencia en cuerpos colegiados de elección popular, pero también vamos a hacer imprescriptibles los delitos contra la administración pública y vamos a hacer de la publicación de la declaración de bienes un deber consignado en la Constitución”.
Indicó que este 7 de agosto “con agrado, con amor y complacencia les anuncio que hoy mismo radicamos este paquete anticorrupción ante el Congreso de la República, porque la defensa de la ética pública es de todos y juntos la vamos a construir”.
Explicó que el camino de la legalidad demanda que “trabajemos entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Poder Judicial en una reforma a la Justicia que la haga más eficiente, más cercana al ciudadano, más confiable y que nos permita garantizar oportunamente los derechos de todos los colombianos”.
Y subrayó que la reforma a la justicia no da espera, porque “la mora judicial, el hacinamiento carcelario, los procesos interminables, o la precaria tecnología con la que operan nuestros despachos judiciales, ha hecho que sencillamente los ciudadanos pierdan la esperanza”.
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Añadió que un propósito es fortalecer las primeras y las segundas instancias, que haya expediente electrónico y que en todo el país “los colombianos sientan que la justicia es su mayor garantía”.
Igualmente, dijo que legalidad también es mejorar las condiciones de la Fuerza Pública, “brindarles acceso de calidad a bienes y servicios, significa que presentemos rápido la Ley del Veterano y que, además, se traduzca esa ley en un mejor tratamiento por parte de la sociedad a quienes dan vida por nosotros”.
Les manifestó a los integrantes de la Fuerza Pública la promoción de un marco jurídico serio y riguroso para que “puedan cumplir su deber constitucional en estricto apego a los derechos humanos”.
Líderes políticos y sociales
El presidente Duque Márquez señaló que legalidad “significa defender la vida de todos los colombianos y proteger la integridad de los líderes políticos y sociales y de nuestros periodistas. Nos duele cada homicidio, nos duele cada ataque, nos duele cada amenaza”.
En ese orden de ideas manifestó que trabajará con la Defensoría del Pueblo, con la Procuraduría General de la Nación y con la Fiscalía para “prevenir la violencia contra ellos y sancionar ejemplarmente a quienes han obrado como los autores intelectuales y materiales de esos crímenes que enlutan, que duelen, que carcomen el sentimiento de amor patrio”.
“Esta tarea es de todos, sí, es de todos, y todos los colombianos debemos rechazar cualquier forma de violencia que pretenda acallar las voces libres de nuestros ciudadanos”, puntualizó el Jefe del Estado.