Una bandera de Colombia en lo alto de una montaña preside el paisaje en la zona veredal transitoria de normalización (ZVTN) de Buenavista, en el municipio de Mesetas, departamento del Meta, donde la guerrilla de las Farc dejó este martes las armas.

Buenavista es una de las 26 ZVTN en las que desde febrero pasado están concentrados unos 7.000 guerrilleros de las Farc que ya dejaron sus armas en manos de la Misión de la Onu en Colombia para su posterior destrucción.

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Al acto asistieron el presidente Juan Manuel Santos, el máximo jefe de las Farc, Rodrigo Londoño, alias 'timochenko', representantes de la ONU y el enviado especial de la Unión Europea (UE) para la paz de Colombia, Eamon Gilmore, entre otros invitados.

"Colombianos: a partir de hoy, las armas que alguna vez se levantaron estarán selladas en contenedores a cargo de la Misión de la Onu en Colombia", expresó el gobernante antes de partir de Bogotá.

A Buenavista se llega por una trocha que parte de la cabecera municipal de Mesetas por una región montañosa que fue durante décadas uno de los fortines de las Farc y que este martes fue el escenario del acto esperado por los colombianos durante medio siglo, la dejación de armas de esa guerrilla.

En el camino, policías y militares vestidos con uniforme de campaña y armados con fusiles se encargan de garantizar la seguridad pues es sabido que con el fin de las Farc como movimiento armado se reducen notablemente pero no acaban los problemas de seguridad en la región, pues hay disidencias de esa guerrilla y otros grupos ilegales.

Los campesinos de la zona son tal vez los más ilusionados con la paz, y en algunas de las humildes casas a la vera del camino se ven banderas blancas que dan la bienvenida a la nueva época del país.

Dentro de la zona veredal donde están los guerrilleros hay numerosos carteles que invitan a la paz y la reconciliación, como uno que reza: "Cuando los procesos por la paz con reales, las ideas son inmortales".

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Patrullas conjuntas formadas por guerrilleros desarmados y policías recorren el lugar para mantener la seguridad y sobre todo el orden en una jornada en la que decenas de periodistas de todo el mundo acuden a presenciar el acto histórico en el que las Farc se despiden de las armas.

El acto central tiene lugar en un escenario montado especialmente para la ocasión en el que las Farc colgaron un cartel con la frase: "Nuestra única arma será la palabra", que llena de esperanza a los colombianos que durante 53 años fueron testigos y víctimas del conflicto armado.