Naciones Unidas aseguró que el brote de cólera en Yemen ha causado ya más de 2.100 muertos y casi 740.000 posibles casos desde que estalló a finales de abril. Más de la mitad de los casos registrados en el país hasta el 25 de septiembre corresponden a niños.
Los casos sospechosos de cólera en Yemen han superado los 755.000, en tanto que los fallecidos alcanzaron ya los 2.100, con lo que se ha convertido en el mayor brote de esta enfermedad en el mundo, desde que existen registros, según la ONG Oxfam.
En un comunicado difundido este jueves, Oxfam aseguró que, desde que se tuvo conocimiento de los primeros casos, hace cinco meses, el número de afectados por la epidemia en Yemen ha superado al número de personas que contrajeron esta enfermedad en Haití entre 2010 y 2015, donde hubo 754.343 posibles casos.
"Yemen es la peor crisis humanitaria del mundo y se está poniendo peor. Más de dos años de guerra han creado las condiciones ideales para que la enfermedad se extienda", dijo en el comunicado, el director humanitario de Oxfam, Nigel Timmins.
Timmins subrayó que el conflicto armado en el Yemen, donde se enfrentan los rebeldes hutíes y el Gobierno del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, "ha empujado al país al borde de la hambruna, forzando a millones de personas a huir de sus casas y ha destrozado virtualmente sus ya de por sí débiles servicios de salud".
La nota advirtió de que el número de casos sospechosos podría alcanzar el millón el próximo noviembre, a pesar de que la expansión de esta afección, que se ha cobrado la vida de 2.100 personas, ha disminuido "levemente".
El responsable humanitario apuntó que solo la mitad de las instalaciones sanitarias trabajan plenamente, que siete millones de yemeníes están "a un paso" de la hambruna y que unos 20 millones necesitan algún tipo de ayuda humanitaria.
"La tragedia de Yemen es una catástrofe provocada por el hombre en la que todas las partes son responsables y que está siendo avivada por decisiones políticas deliberadas tomadas en Londres, Washington y otras capitales del mudo", declaró Timmins.
Yemen sufre un conflicto armado desde hace más de dos años y los diversos focos de violencia en el país han sido uno de los mayores obstáculos para desplegar los medios sanitarios necesarios para contener la propagación de la enfermedad, que puede ser curada en el 99% de los casos en los que las personas logran recibir atención médica.