La Alianza del Pacífico -Chile, Colombia, Perú y México- confía en que el nuevo ejecutivo español del socialista Pedro Sánchez mantendrá las políticas que favorecen la inversión, el acercamiento y buen entendimiento entre Iberoamérica y la Unión Europea (UE), como los gobiernos anteriores.

El embajador de Colombia, Alberto Furmanski, está seguro de que el próximo presidente seguirá la actual senda comercial del país, y cree que la actitud de EEUU abre caminos para buscar nuevos socios, posiblemente en Asia.

El presidente del Capítulo Colombia del Consejo Empresarial de la alianza, Martín Carrizosa, indicó que los empresarios prefieren consolidar una mayor integración regional antes de ampliar la alianza, mientras que la figura de los estados asociados es muy interesante para acuerdos concretos.

Los respectivos embajadores en España, que analizaron la situación de esta zona de libre comercio, son partidarios de una integración regional mayor y de la diversificación comercial, por ejemplo en Asia, para reducir el impacto del proteccionismo y las guerras arancelarias originadas por el presidente de EEUU, Donald Trump.

También coincidieron en que los cambios políticos en Colombia y México, inmersos en procesos electorales, no tienen por qué afectar a su compromiso con la alianza.

Igualmente, apuntaron la conveniencia de constituir una "secretaría técnica" de seguimiento de los acuerdos de la alianza, pero evitando la "burocratización".

El embajador de Perú, José Antonio García Belaunde, pidió avanzar en el comercio de servicios y libre circulación de capitales, dadas las dificultades para unificar las cuatro bolsas, y de trabajadores y reconocimiento de títulos académicos, y de una presencia institucional mayor en el Foro Asia Pacífico, Apec.

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Sobre la ampliación de la alianza, comentó que se fundó según criterios de "afinidad, no de vecindad" entre economías parecidas, que tienen acuerdos de comercio internacionales similares. 

El embajador del Ecuador, Cristóbal Roldán, replicó que su gobierno ha dado por superado el modelo económico anterior del país, con un "firme interés" por adherirse a la alianza. 

La embajadora de México, Roberta Lajous, apuntó que, seguramente, el próximo presidente de México tendrá el mismo entusiasmo por el proceso de integración comercial que hasta ahora. Cuanto mas suba la retórica proteccionista de EEUU, apuntó, más acercamiento debe haber entre países de la alianza para facilitar el intercambio y defensa del sistema multilateral. Pidió que Europa "no absorba demasiado" el interés del nuevo gobierno español y se mantenga la "relación privilegiada" con España y la UE.

El embajador de Chile, Jorge Tagle, comentó que cualquier alteración internacional y una guerra comercial les afecta de manera "importante" por una mayor inestabilidad de mercados y precios. 

También cree necesario limar y despejar cualquier desconfianza con el Mercosur y acercar posiciones. 

El presidente del Capítulo Chile, Bernardo Larraín, cree que la guerra comercial es una "oportunidad" para foros alternativos al predominio de EEUU, como Apec.

El encuentro fue organizado por la Fundación Iberoamericana Empresarial y Europa Press, e inaugurado por la exministra española de Exteriores Trinidad Jiménez.