No renovar el convenio de contratación de técnicos con Fedelian, que además debe reintegrar más de mil millones de pesos de unos dineros sin soporte de ejecución, ni el contrato de alimentación con Metroparques en la Villa Deportiva Antonio Roldán Betancur, son las primeras decisiones que se anuncian luego de la auditoría que realizó la Oficina de Control Interno de Indeportes Antioquia tras las graves denuncias y reclamos que a comienzos de este mes llegaron a la entidad y al gobernador Luis Pérez Gutiérrez por supuestas tramas y redes de corrupción en el manejo de los recursos públicos en ese ente deportivo.

A través del “convenio 157 de 2017 con Fedelian -Federación de Ligas Deportivas de Antioquia-, por medio del cual se contrataba el pago de unos entrenadores” para diferentes ligas, “se logró identificar que se hicieron los pagos mensuales de acuerdo a lo presupuestado inicialmente, pero el supervisor del contrato no realizó la verificación de lo realmente ejecutado durante esos periodos mensuales y eso ocasionó que mes a mes se fuera generando un saldo a favor de Indeportes”, explicó este lunes José Nicolás Arenas Henao, gerente encargado de Indeportes Antioquia tras la renuncia del entonces titular Hernán Elejalde López, quien dejó el cargo hace una semana, según explicó, para no inhabilitar a su hermano en la aspiración de ser alcalde del municipio de Frontino.

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Por esa razón, afirmó Arenas Henao, “en la mañana de hoy radicamos un documento en Fedelian en el que le estamos solicitando la devolución de $1.048.689.041”, que es la diferencia entre los pagos realizados por Indeportes y el verdadero número de técnicos que aportaron sus conocimientos y trabajo para el beneficio de las ligas y concretamente de los deportistas en ese proceso de preparación con miras a los Juegos Nacionales 2019. En concreto, esos que en las denuncias llamaron “técnicos fantasmas”.

Además, por obvias razones, se tomó la decisión de que no se hará ningún desembolso más a Fedelian hasta tanto se tenga completa claridad en cuanto a los recursos entregados por Indeportes Antioquia y lo efectivamente ejecutado.

Toda esa información, aclaró el gerente encargado, se remitió a los entes de control, Contraloría, Procuraduría y Fiscalía, para que sean ellos los encargados de investigar qué es lo que pudo haber ocurrido y de comprobarse las irregularidades descubrir a los responsables.

Pero antes, precisó, “esta misma semana vamos a definir con Fedelian cómo se hará el reintegro de los dineros”, que si no es voluntario, “se hará a través de instancias legales”.

De momento, para no frenar los procesos deportivos, Indeportes pondrá en ejecución un nuevo contrato con la UdeA, que va del 1 de noviembre al 30 de diciembre, en el cual se van a incluir a todos los entrenadores que se requieran para no descuidar el trabajo con miras a los Juegos Nacionales, tal y como se hacía antes, con lo que se pretende trasmitir tranquilidad a deportistas, entrenadores y en general a la afición antioqueña.

Cambia la estrategia

Pero como las quejas no sólo apuntaban “a los técnicos fantasma, a la precarización y tercerización de su trabajo en las ligas”, sino también a un supuesto mal manejo de los recursos destinados a la alimentación de los deportistas, de igual forma se conminó a Metroparques, que es la entidad contratista de esos suministros, para que “rinda explicaciones pertinentes sobre esta situación”, además de que tampoco se le renovará el contrato que termina este miércoles 31 de octubre.

“El objetivo de esa contratación era el suministro de la alimentación para los deportistas en la Villa. En reunión sostenida con los representantes de los atletas, decidimos entregarles un apoyo de sostenimiento para que ellos mismos puedan acceder a esa alimentación, obviamente con el apoyo y vigilancia de las minutas por parte de los profesionales de Indeportes. De esta forma, lograremos que los recursos lleguen directamente a los deportistas y optimicemos su utilización”, precisó el gerente (e).

Sin duda, un momento coyuntural para el deporte antioqueño frente al amenazante fantasma de la corrupción, y por eso, aseguró Arenas Henao, “estamos aquí en defensa de lo público, para revisar y evaluar qué es lo que estaba ocurriendo”.

La instrucción, dijo, es “que se haga total claridad frente a cualquier asomo de duda” sobre la actividad contractual que viene realizando, “y no vamos a permitir que ninguna situación atente contra el buen nombre de Indeportes y mucho menos que afecte los procesos de formación de deportistas y el desempeño general en Juegos Nacionales”.