La autoridad eclesial en Colombia ha desplegado una estrategia de ayuda y acompañamiento a las poblaciones vulnerables, y ante información falsa que circula en redes sociales, la Conferencia Episcopal hace la claridad de que no está solicitando dinero ni ayudas para su propio beneficio.
Si bien las parroquias de algunos barrios en ciudades del país están en crisis, pues viven de la ofrenda de sus fieles, la Iglesia Católica de Colombia hoy en día solamente hace colecta para ayudarle a las personas que más lo necesitan ante la crisis por el covid-19.
Lo cierto es que el aislamiento social frente a la pandemia y la toma de medidas como la realización de eucaristías a puerta cerrada y una Semana Santa sin procesiones, por ejemplo, tienen a muchos sacerdotes viviendo una crisis económica, lo que hace que la Iglesia se enfrente a un gran desafío por ello, pero, la voluntad de la Conferencia Episcopal de Colombia, CEC, es ayudarles a sus fieles y por ello, decidió direccionar todas las ayudas a la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes 2020.
De esta forma, la CEC desmiente la información que “personas inescrupulosas” andan circulando en redes sociales acerca de una comunicación de la Iglesia Católica colombiana en la que se solicitan datos personales y se prometen ayudas a todos, según informó a esta casa editorial el padre Jaime Alberto Marenco Martínez, director de comunicaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia.
Este es el falso comunicado de la CEC que se replica en redes sociales y al que usted no debe acatar.
Y siguiendo con la crisis económica en la Iglesia, por ejemplo, en Medellín, ya se han identificado casos de parroquias que están en crisis. El padre Samuel Galves, director de Pastoral Social de la Arquidiócesis de la ciudad, contó a EL MUNDO: “Sí, nosotros vivimos es de la ofrenda, hay algunas parroquias que se han contactado con Pastoral Sacerdotal y se les ha podido ayudar a algunos sacerdotes; pero, digámoslo así, la ventaja es que uno está solo en una casa, mientras hay familias con cinco o seis personas y están aguantando hambre, entonces, estamos es ayudando más a las familias”.
El mensaje de la Conferencia Episcopal Colombiana es claro, pide a sus fieles unirse “por las personas que más nos necesitan por estos días”, y deja a un lado sus propias necesidades.
Para solventar los problemas de techo y alimentación de sus fieles, la Iglesia Católica de Colombia inició una campaña para ayudar en la emergencia sanitaria causada por el covid-19.
Se trata de la Campaña de la Comunicación Cristiana de Bienes 2020, que ejecuta el Secretariado Nacional de Pastoral Social, y busca aportar en la crisis económica que atraviesan personas y familias en todo el territorio nacional, con ayudas como alimentos, auxilios para hospedaje, acceso al agua e higiene, y/o acceso a servicios de salud, los cuales les permitan enfrentar esta situación de crisis.
La campaña llama a la solidaridad de todo el pueblo colombiano que se puede unir con contribuciones de dinero en la cuenta corriente del Banco de Bogotá No. 081-52478-7.
Pero, al mismo tiempo, el propósito de la Iglesia Católica colombiana es contribuir a que se disminuya el riesgo de contagio de covid-19 en comunidades vulnerables y que no tengan que salir a la calle para buscar su sustento diario y exponerse así a la infección. Según expresó Monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, director de la Pastoral Social - Cáritas Colombiana.
“Es el momento de ayudar. Atravesamos por una situación de emergencia sanitaria que nos afecta a todas las personas, pero que es muy difícil de enfrentar para quienes no tienen trabajo, tienen un trabajo informal o independiente, tienen enfermedades previas, no tienen un techo, viven en la calle, han tenido que migrar, para los que perdieron su trabajo por esta emergencia y para todas las personas que se encuentran en una situación de vulnerabilidad económica y social”, relató monseñor.
Y como es riesgoso en este momento de la pandemia salir a entregar las ayudas para los ciudadanos, la Iglesia llama a que la colaboración sea monetaria y no física para no exponer a nadie al contagio.
La forma de solidarizarse con Pastoral Social de Medellín es con ayudas en alimentos, vestuario y dinero, a través de la cuenta de ahorros de Bancolombia No. 00608950168.
"Sabemos que la gente ahora no se debe movilizar, entonces nos ha sido difícil recaudar alimentación o ropa; por eso, estamos recibiendo más que todo dinero a través de esta cuenta de ahorros, pero si nos pueden ayudar con otras ayudas, también las recibimos", dijo el padre Samuel Galves, aunque, aclaró que en Medellín no se tiene la facilidad de recoger en las casas las ayudas de personas solidarias.
También, la Pastoral se alió con el Supermercado Euro y con el canal Cosmovisión, a través de los cuales se está realizando una colecta de dinero para hacer mercados que la Iglesia de Medellín entregará en parroquias de barrios vulnerables.
Y está, además, el Banco Arquidiocesano de Alimentos, que ha brindado alimentación para grupos focales de la Pastoral Social de Medellín, y a su vez, otra parte de los alimentos han sido entregados en el Hogar Monseñor Valerio Jiménez, un espacio que tiene la Iglesia de Medellín y en donde se atienden a habitantes de calles y a migrantes venezolanos, está ubicado cerca al centro comercial Villanueva.
"Nosotros allí estamos atendiendo a treinta habitantes de calle y a treinta venezolanos y los tenemos en cuarentena, así que esta ayuda ha sido un gran aporte”, explicó el director de Pastoral Social de la Arquidiócesis de la ciudad.
No obstante, si las personas tienen ayudas físicas, alimentos no perecederos que puedan aportar o, en su defecto, otras ayudas como ropa e insumos de aseo, lo pueden ofrecer al Fubam o Banco Arquidiosesano de Alimentos de Medellín, sitio web: https://bancodealimentos.co. Mail: donaciones@bancodealimentos.co. Dirección: carrera 52 No. 30A – 97, Medellín. Teléfono: 4483888.
Cabe destacar que, al día de hoy, el Fubam tiene vinculadas 221 instituciones y parroquias de Medellín y Antioquia, mediante las cuales puede atender alrededor de 70.000 personas en situación de vulnerabilidad. Cabe precisar que son a estas a quienes se les está dando prioridad en este tiempo de crisis. Además, el Banco Arquidiosesano de Alimentos está apoyando otras campañas igualmente a la de Pastoral Social, como Antioquia Solidaria, de la Gobernación de Antioquia, y las ayudas que está entregando la Alcaldía de Medellín, a través de la Secretaría de Inclusión Social y Familia, a personas priorizadas de la ciudad.
Hace una semana, la Conferencia Episcopal de Colombia, CEC, en comunicación firmada por Óscar Urbina Ortega, arzobispo de Villavicencio y presidente de la CEC; Ricardo Tobón Restrepo, arzobispo de Medellín y vicepresidente, y Elkin Fernando Álvarez Botero, obispo auxiliar de Medellín y secretario, expresó al pueblo colombiano: “Hacemos un llamado urgente a la solidaridad con los enfermos, los que están solos y olvidados, los más pobres y vulnerables. No nos dejemos llevar de la indiferencia; todos, inclusive desde las limitaciones que experimentamos, podemos hacer algo por los que tienen más carencias. Es necesario aprender las lecciones de esta emergencia, entre ellas la fraternidad como camino indispensable para superar la adversidad”.