De la mano del narcotráfico, las minas antipersonal siguen siendo uno de los grandes obstáculos en la construcción del camino hacia la paz. Así lo hizo saber el Alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, con ocasión de la 49ª Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), que se cumple en Medellín.

“Hoy no hay un cálculo de minas sembradas, pero sí ha crecido el número de accidentes”, denunció Ceballos al señalar que el Eln y el clan del golfo son los grupos que están sembrando de nuevo estos artefactos en varias zonas del país, especialmente en poblaciones del Chocó y en la zona del Catatumbo.

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“Desde 1990 a hoy, en Colombia se han presentado 11.753 afectaciones a personas por accidentes con minas antipersonal, es decir casi dos víctimas diarias, y de ellas 2.295 han muerto. Una cifra dolorosa en la historia de Colombia. Estamos hablando de que en promedio una persona muere cada semana en esta clase de accidentes”, dijo Ceballos al precisar que, además del dolor que causa, “volver a sembrar minas también impide la implementación adecuada de los acuerdos de paz, porque impide también que las poblaciones regresen a sus territorios”.

Según el alto Comisionado, “entre los afectados por estos accidentes figuran 448 erradicadores, de ellos tristemente 46 muertos, pero el mayor número de víctimas son civiles”.

Este año, entre el 1 de enero y el 31 de mayo, 60 personas resultaron afectadas por accidentes con MAP, entre ellas 59 hombres y una mujer; un niño y 59 adultos; 55 sufrieron heridas y 5 perdieron la vida; 28 fueron civiles y 32 miembros de la Fuerza Pública.

Sin embargo, destacó que el desminado humanitario ha venido arrojando una gran cantidad de buenos resultados y que el Gobierno nacional, con el apoyo de la OEA y de organismos internacionales, continúa esta labor que recientemente permitió entregar otros 75 municipios libres de sospechas, más otros 40 que están en proceso de ser certificados, lo que quiere decir que “hoy son 350 municipios en todo el territorio nacional libres de sospecha de minas antipersonal”.