El presidente de EE. UU., Donald Trump, ordenó lanzar decenas de misiles contra la base aérea siria de Al Shairat, en la provincia central de Homs.
Las fuerzas gubernamentales sirias están evacuando sus bases principales en el país ante las amenazas del presidente de EE. UU., Donald Trump, de responder "contundentemente" al supuesto ataque químico de hace cuatro días cerca de Damasco, según activistas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos apuntó que los efectivos leales al Gobierno sirio están vaciando los aeropuertos y las bases más importantes, mientras continúan en estado de alerta, en cumplimiento de las órdenes de su comandancia.
Esa fuente había revelado el martes que el liderazgo de las tropas gubernamentales sirias había dado instrucciones para que sus fuerzas se movilizaran durante 72 horas.
La Sociedad Médica Siria Americana (Sams, en sus siglas en inglés) y la Defensa Civil Siria, ambas organizaciones apoyadas por EE. UU., aseguraron que al menos 42 personas fallecieron el sábado con síntomas de haber sufrido un ataque con sustancias tóxicas.
Ninguna otra fuente ha confirmado que se tratara de un bombardeo con armamento químico y tanto Damasco como Moscú han negado el empleo de esta clase de armas en Duma.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, al menos 21 personas perecieron ese día por asfixia, pero como resultado del "derrumbe de los edificios" en los que se encontraban.
El 6 de abril de 2017, Trump ordenó lanzar decenas de misiles contra la base aérea siria de Al Shairat, en la provincia central de Homs, como represalia por el ataque químico en la localidad de Jan Shijún, donde murieron más de 80 personas y del que la ONU culpó al Gobierno de Damasco.