La JEP, el organismo de justicia transicional creado para juzgar los crímenes cometidos en el marco del conflicto armado colombiano, recibió este informe para investigar los hechos.
La Fiscalía entregó este lunes un informe a la Jurisdicción Especial para Paz (JEP) en el que identifica 2.248 casos de "falsos positivos", entre 1988 y 2014, como se conoce el asesinato de civiles a manos de militares para presentarlos como guerrilleros muertos en combate.
Así lo hizo saber el ente acusador en un comunicado, donde señala que "este fenómeno se incrementó a partir del año 2002 y conoció su etapa más crítica entre 2006 y 2008", los años en que se concentran el 59,3% de los casos.
La Fiscalía aseguró que 5.626 personas han sido procesadas por estos delitos, de los cuales 3.826, el 68% del total, eran soldados en el momento en que ocurrieron los crímenes.
También se han enjuiciado a 992 suboficiales (17,6%), 514 oficiales (9,1%) y 133 civiles (2,4%).
“La mayoría de las víctimas fueron hombres jóvenes entre los 18 y 30 años, quienes se dedicaban a las labores de campo y trabajos informales en la ciudad”, agregó la información.
El ente registró muertes de civiles hechos pasar por guerrilleros en al menos 27 de los 32 departamentos del país, aunque la mayoría de los casos se concentraron, con gran diferencia, en Antioquia, con el 29,4% de estos asesinatos.
Le siguen el departamento del Casanare, que presenta el 7,9% de los casos; Cesar, con el 7,7% y Meta, con el 7,5%.
La JEP anunció el pasado 9 de julio que el general retirado Henry Torres Escalante, acusado de participar en varias de estas ejecuciones extrajudiciales, aceptó someterse al tribunal de paz.
Torres, quien está privado de la libertad desde 2016 en la Escuela de Infantería del Cantón Norte, en Bogotá, se convirtió así en el primer militar en presentarse ante este organismo.
La JEP también abrió el pasado viernes su primer caso para investigar y juzgar los secuestros perpetrados por las Farc y se espera que en los próximos meses empiece nuevos procedimientos para encausar otros actores del conflicto armado.
Los falsos positivos son casos de civiles que fueron reclutados bajo la promesa de un empleo para luego ser asesinados y presentados ante la opinión pública como guerrilleros muertos en combate por militares que buscaban obtener beneficios o ascensos.