En la toma de Mitú más de mil guerrilleros atacaron la población con bombonas de gas cargadas con combustible y explosivos causando la muerte de 16 policías, catorce militares y once civiles. Esa acción también dejó 47 policías heridos y 61 más secuestrados.
Rodrigo Rivera insistió en que la responsabilidad con las víctimas del conflicto armado no es tema de un gobierno sino que "es un compromiso de Estado".
El Alto Comisionado para la Paz, Rodrigo Rivera, dijo que las Farc, convertida en partido político, deben pedir perdón a las víctimas de la toma de la ciudad de Mitú, capital del departamento del Vaupés, en la que hace 20 años murieron 41 personas, entre civiles, militares y policías.
"Que los responsables de esa toma se presenten ante las víctimas, reconozcan su responsabilidad y pidan perdón por lo ocurrido", dijo Rivera citado en un comunicado de su despacho.
Según Rivera la incursión a la ciudad, por parte de las Farc ocurrida el 1 de noviembre de 1998, "fue un hecho mayúsculo de la violencia y victimizó a toda una población".
Al instalar el Consejo Nacional de Paz, Reconciliación, Convivencia y Derechos humanos del Vaupés, el funcionario aseguró que se debe mirar ese episodio dramático "con el respeto, la dignidad y la justicia que amerita el sufrimiento de tantos hombres y mujeres".
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