Miles de menores desaparecen al año en América Latina y la UE. Desde Eurolat, los parlamentarios se proponen intervenir juntos el problema al firmar convenios con Naciones Unidas.
Las incesantes desapariciones forzadas de niños, niñas y adolescentes en Europa y Latinoamérica rememoran los crímenes del holocausto del régimen nazi alemán (1933-1945), flagelo que debe ser atacado con mejores iniciativas, dijo la directora regional de América Latina y Caribe de Unicef, María Perceval.
"Todavía en nuestras geografías resuenan los silencios del horror en épocas dictatoriales, en el que el terrorismo de Estado usaba la desaparición forzada junto a la tortura y la muerte como una forma odiosa de la violencia", declaró la representante durante la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat) en Panamá.
Perceval sostuvo que aún la figura del desaparecido evoca "la crueldad en los campos de exterminio del nazismo", en donde noche y niebla era la estrategia de un decreto para desaparecer a las personas y no dejar huella.
Con respecto a la propuesta de un grupo de parlamentarios de EuroLat sobre desapariciones a menores de edad, sostuvo que Unicef hace un llamado para que esta no sea ambigua y contemple mecanismos específicos y de reparación adecuada.
Además, pidió a los parlamentarios que se promueva la Convención de la ONU sobre la protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, en vigor desde 2010, firmada por 93 Estados y ratificada por 57.
Para capitular cómo las desapariciones forzadas han calado en la oscura historia de Latinoamérica, recordó el Plan Cóndor en las que dictaduras del Cono Sur entre la década del 70 y 80 realizaron una persecución, desaparición y exterminio de opositores.
Con base en ello, explicó que las nuevas amenazas para los menores están latentes ante nuevos actores como los grupos asociados a la trata de personas y narcotráfico que se aprovechan de situaciones de vulneración y pobreza.
"Resolver los casos depende de la defensa de países y de haber asignado y ratificado la Convención, además falta generar políticas públicas así como el buen funcionamiento de las instituciones para poder prevenir e identificar cuando se cometen esos avasallamientos que afecta a niños y familias", declaró la ejecutiva de Unicef.
La eurodiputada del Bloque Nacionalista Gallego (BNG) Ana Miranda declaró que los casos de desaparición de niños refugiados que acceden a través de las fronteras de Europa es cada vez más preocupante, que según un informe de Save The Children no se sabe en dónde están más de 10.000 de ellos.
Sostuvo que las recomendaciones de Unicef sería un paso a la denuncia internacional que existe entre migraciones y trata, dado que un 77% de las personas emigrantes sufren algún tipo de abuso
"Sabemos que hay un vacío legislativo de los países de Europa y Latinoamérica, debemos poner este tema como prioridad porque es una vergüenza como avanza", lamentó.
Mientras que el delegado peruano del Parlamento Andino, Jorge Romero, afirmó que la desaparición forzada es el caldo de cultivo de los crímenes más horrendos como el abuso infantil, la trata de personas y trabajo forzoso.
Con el documento presentado y las recomendaciones de Unicef, Romero propuso a la Comisión de EuroLat crear un registro sistemático internacional de desaparición de niños, mejorar la condición de menores en los centros de acogida y optimizar los servicios.
La cita política que culminó este sábado se debatió sobre informes de justicia y lucha contra la impunidad, la cooperación bilateral en seguridad aérea, la responsabilidad social corporativa, entre otros.
La EuroLat es la institución parlamentaria de la Asociación Estratégica Birregional conformada por 150 miembros -75 del Parlamento Europeo y 75 de Latinoamérica-, incluidos el Parlamento Latinoamericano, el Parlamento Andino, el Parlamento Centroamericano y el Parlamento del Mercosur.