Ya ni siquiera este partido realiza convenciones, ni hace consultas y tampoco reúne a sus directorios para tomar decisiones electorales.
El centralismo y el parlamentarismo al mando de su director nacional César Gaviria Trujillo se apoderó de la distribución de los avales dentro del Partido Liberal para las elecciones de autoridades territoriales en Antioquia.
Desde un apartamento en el exclusivo norte bogotano se decidió, por ejemplo, la suerte de candidatos liberales en municipios tan lejanos a la capital colombiana como Frontino, El Peñol, Yarumal o Cisneros.
Al margen u olvidadas quedaron las agitadas convenciones departamentales o las consultas internas, uno de los inventos liberales para democratizar a ese partido, y hasta los acuerdos regionales al menos en Medellín pero no en Bogotá, para en medio de duras discusiones, de amago de divisiones, de enojos y renuncias, tomar decisiones sobre candidaturas a alcaldías y concejos municipales, pues en cuanto a la Asamblea Departamental ya es imposible conseguir 26 liberales para completar la lista de aspirantes a esa corporación.
En el pasado quedaron los Bernardo Guerra, los William Jaramillo, los Federico Estrada, los Álvaro Uribe cuando fue liberal, los José Prieto, los Jorge Mesa de los años 80 y 90, reconocidos y acatados como verdaderos jefes y congresistas liberales.
Luego vino una camada integrada por los Darío Londoño, Armando Estrada, Luis Guillermo Vélez, Luis Fernando Duque, Orlando Vásquez, Ramón Elejalde, Héctor Arango, Piedad Córdoba, Luis Pérez, los hermanos Guillermo y Aníbal Gaviria, Eugenio Prieto, los Óscar Marín y Hurtado, quienes de una u otra forma se hicieron sentir regional y nacionalmente, y replicaron los principios liberales desde el Congresos o desde los cargos públicos que ocuparon.
Listado de como se repartieron o se distribuyeron los liberales los municipios en Antioquia, para la entrega de avales.
Hoy en el mosaico liberal aparecen los nombres de los senadores Iván Agudelo y Julián Bedoya, y los representantes a la Cámara, Julián Peinado, John Jairo Roldán y Juan Diego Echavarría.
A esos cinco políticos quedó reducida la fuerza legislativa liberal de Antioquia, bastante desconocida u otros dirán renovada, ninguno de ellos con la talla de verdaderos jefes liberales como los mencionados anteriormente, pero al fin y al cabo con la legitimidad que les dieron las urnas en los comicios legislativos del año pasado. Sin embargo, algunos de ellos hasta hace poco eran simples soldados políticos de algunos “jefes” domésticos. Y otros se rebelaron e intentarán caminar por el pantanoso camino de la independencia o de creer que ya pueden volar solos.
El caso más sonoro fue el de Iván Agudelo, quien partió cobijas con la matriz que lo fue escalando en el poder político y que crearon Néstor Hincapié y Aura Marleny Arcila.
Entonces, con base en equivocadas disposiciones de la Dirección Nacional Liberal, DNL, de reducir todo al poder de los congresistas, se armó inicialmente un gran malestar en otras fuerzas liberales, que sin tener presencia en el Congreso, contribuyeron a que el Partido Liberal siga vivo en Antioquia.
La propuesta de federalizar, regionalizar o descentralizar las decisiones políticas y electorales liberales, impulsada una y otra vez por el Liberalismo Socialdemócrata a través de su jefe natural Eugenio Prieto Soto en varios Congresos Nacionales Liberales, nunca ha tenido eco y ahora nuevamente este partido recurre a cerrados recintos o a conciliábulos en apartamentos bogotanos para repartirse desde allá o imponer reducidas realidades liberales municipales en Peque, Yondó, Maceo, etc.
Menos mal los reclamos de los excluidos fueron escuchados y además de los hoy “poderosos” o “reyes” congresistas liberales antioqueños, a la reunión capitalina en el apartamento de Gaviria Trujillo también fueron invitados los excandidatos al Congreso, Carlos Mario Mejía, Óscar Hurtado y Omar Hoyos. Este último no concurrió por su actual condición de servidor público.
Y lo que antes se hacía en emotivas convenciones, con voces a favor y en contra, o por parte de los miembros de los hoy desconocidos Directorios Liberales de Antioquia y de Medellín, se procedió a realizar en una mesa y durante una fría noche bogotana del pasado miércoles.
Como si fueran sus dueños, los asistentes se repartieron los avales liberales de todos los municipios, en muchos casos cometiendo elementales y graves errores que podrían conducir a dolorosas derrotas de este partido en alcaldías y concejos en Antioquia.
Es así como el controvertido senador Julián Bedoya se adueñó de 33 municipios y al otro senador Agudelo le dieron 14.
El representante a la Cámara, John Jairo Roldán será el amo y señor de los avales liberales en 23 municipios. Peinado mandará en trece localidades, mientras los de Echavarría serán los mismos de su rotulante senador Bedoya, además de Itagüí.
El Liberalismo Socialdemócrata, representado por el Flaco Mejía, logró rescatar 19 municipios, a Óscar Hurtado le cedieron seis, al tiempo que nueve se lo pelearán entre varios.
El caso de Medellín quedó en las manos centralistas de César Gaviria.
Las inscripciones de candidatos dentro del Partido Liberal se cerraron el pasado 30 de mayo, pero las volvieron a extender hasta el 21 de junio.
Hasta el momento las cifras de candidatos inscritos en Antioquia por esta colectividad están así:
21 inscritos al Concejo de Medellín, 18 a la Asamblea de Antioquia, 120 a las JAL de Medellín y en todo el departamento se han apuntado como aspirantes por esta formación partidista 1.575 personas.